El intento n.°4 de Jay: el acecho

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El acoso es un delito por el que puedes ser arrestado.

Ah, bueno, Jay decidió que valía la pena ir a la cárcel siempre que su mensaje llegara a Daniel, el mensaje diciendo que le gustaba más que a sus amigos. Ojalá. Siempre podía conseguir que uno de sus hermanos pagara la fianza en caso de que lo atraparan.

Así que aquí estaba, siguiendo a Daniel con cuidado mientras caminaba a casa en su motocicleta. Con cuidado de no hacer un sonido y asustar a Daniel.

Si lo atrapaban, siempre podía mentir y dar una excusa improvisada.

Daniel permaneció ajeno mientras Jay lo seguía hasta su casa, abriendo la puerta, entrando y luego cerrando la puerta.

Ahora se escondía en las sombras de su motocicleta, exactamente como un acosador o depredador que esperaba a su presa para que pudieran saltar y atacar.

Vio la puerta abierta cuando el compañero de cuarto gordito de Daniel salió con el uniforme de trabajador de una tienda de conveniencia.

Observó cómo su compañero de cuarto se marchaba al trabajo mientras él lentamente se bajó de su bicicleta y caminó hacia la puerta y, ante su desaprobación, la puerta estaba abierta. Tendría que advertir a Daniel de una manera sutil para recordarle a su compañero de cuarto que cerrara la puerta cada vez que se fuera.

Jay entró en la pequeña casa, con cuidado de no derribar nada antes de ver el bulto debajo de las mantas.

Podía ver la mopa de cabello y los hombros desnudos de Daniel a la luz de la luna que venía de la puerta.

Se ve tranquilo, Jay pensó mientras se agachaba cerca de la forma dormida de Daniel.

Sacando su teléfono y asegurándose de que el flash estaba apagado, Jay tomó una foto.

Sin otro sonido, se levantó sin darse cuenta de que había dejado algo atrás porque estaba demasiado ocupado poniendo el selfie con un Daniel durmiendo como pantalla de inicio.

Mientras tanto, el gordito Daniel llegó a casa un par de horas después para cambiar de cuerpo y notó el pañuelo en el suelo, junto a su hermoso cuerpo.

Eh? ¿Cómo llegó esto aquí?, pensó mientras lo recogía.

0h, bueno, huele bien. Huele a alguien que conozco.

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