Un caballero de su madre

Capítulo 4

El mundo era un lugar divertido. Hoy fuiste venerado como un héroe y mañana las mismas personas pronunciaron tu nombre como si fuera una maldición; las mismas personas que te cantaban alabanzas en sus sueños ahora deseaban que te pasara lo peor.

Naruto estaba casi divertido por la situación en Konoha. El querido Uchiha Itachi, un prodigio, la luz del famoso clan, que se había convertido en un objeto de resentimiento de las mentes que odiaban a los aldeanos de Konoha, se había convertido en uno de los aldeanos traidores. O así, su ignorancia los llevó a llamarlo.

Uchiha Itachi ahora se hablaba en la misma oración que el Orochimaru amoral. Cuando enviaron maldiciones a la serpiente, enviaron algunas a Itachi. Los había traicionado y convertido en un monstruo hambriento de poder diabólico que mataría a sus propios hombres de clan.

Al menos eso es lo que Konoha creía.

Era irónico que la llamada luz se convirtiera en el lado oscuro, como creían los aldeanos. Se suponía que Itachi era el salvador de los Uchiha. Demonios, algunos incluso lo estaban inclinando por el manto de Hokage una vez que él creció lo suficiente.

Esos sueños fueron aplastados en una sola noche de derramamiento de sangre ...

Lo ridículo que había divertido a Naruto fue una reacción de la gente de Konoha a la tragedia que había caído en el clan Uchiha.

Lloraron por el Uchiha como si hubieran estado en términos de risa con ellos. Uchiha Itachi fue odiado. Lo despreciaron por asesinar a miembros del clan Uchiha. Hablaron tantas maldiciones sobre su nombre, y aún faltaban 24 horas para que ocurrieran los asesinatos. Era solo la tarde, y los aldeanos habían descubierto la tragedia a primera hora de la mañana.

Naruto había escuchado a muchas personas decir tantas cosas. Le hizo reír. En el interior, por supuesto. Las piedras serían un trono para él si de repente comenzara a reírse de esta situación. Varios miembros del clan Uchiha habían sido asesinados a sangre fría. No había nada divertido en eso. Sí, de hecho no había nada gracioso al respecto.

Puede que a Naruto no le importe, pero no fue gracioso. Fue realmente triste. Sin embargo, él no podía simpatizar con ellos.

El segundo la situación fue muy divertida. No fueron los asesinatos en sí los que resultaron divertidos. Todavía tenía que perderse, o pasar la barrera de la locura para reírse de la muerte de otras personas. Sí, puede que no le importe, puede que no haya ofrecido simpatías, pero aún era una persona.

Lo que divirtió a Naruto fue la reacción de los aldeanos en relación con él. Los tontos ignorantes sospechosos tenían el clan Uchiha para el alboroto de Kyuubi. Habían ido tan lejos como para mostrar una desconfianza descarada hacia el clan. No le mostraron amor. No estaba oculto para nadie. Era una razón por la que podía llevarse bien con el clan. Ambos fueron vistos como razones para el alboroto por el Bijuu sellado dentro de él.

Los aldeanos habían llorado por los Uchiha. Actuaron como si les hubiera importado todo el tiempo. Sí, exigieron que Itachi fuera perseguido por asesinar a miembros de su clan más poderoso. Maldijo su nombre mientras lloraba lágrimas por el clan. ¡Lágrimas! ¡Lágrimas de tristeza por gritar en voz alta!

¿Fue solo él quien lo encontró divertido, después de todo lo que Konoha había hecho pasar al clan?

Fue como si de repente muriera y comenzaran a llorar por él, no de felicidad, sino de tristeza por haber muerto. Triste que su amado Uzumaki estuviera muerto. Ridículo. Estaba más allá del ámbito de las posibilidades, sin embargo, algo parecido había ocurrido.

Por supuesto, Naruto no se engañó ni siquiera creyendo que llorarían por él si muriera. Infierno no Se reirían y se alegrarían de lunes a viernes. Demonios, incluso honrarían el día en que él muera como el día de la libertad. Sí, Naruto realmente podía ver que eso sucediera.