Teatro | Creek [REMODELACIONES]

1 ~ Wht

Coincidence

Un día más en el "precioso" pueblo de South Park, el sol empezaba a hacerse presente, iluminando las calles a su paso, iniciando otro lunes laboral.

Craig empezaba a despertar por el molesto ruido de la alarma, el sonido puesto por el mismo era lo más molesto que pudo encontrar, ya que con las delicadas alarmas de hoy en día, solo se quedaba aún más dormido.

Se levantó lentamente, desperezandose para luego dirigirse al baño a lavarse la cara, observando su rostro durante algunos segundos, le molestaban sus imperfecciones en la piel, consecuencia de nunca cuidar su piel en su adolescencia. Regresó al cuarto, agarró el conjunto de ropa que había preparado en la noche y fue sin prisa hasta el primer piso.

Como era costumbre, agarró la primera fruta que se le cruzó, está vez siendo una manzana, sirvió con café una mitad de la taza, agregó leche y bastante azúcar para después tomarlo de casi dos tragos. No era fan del café, pero después de solo tres horas de sueño, necesitaba cafeína en su sistema para poder rendir el día.

Dejó la taza en el fregadero, agarró su mochila y salió de la casa, subió a su moto emprendiendo camino a su escuela.

Solo al entrar al recinto, se encontró con un chico castaño, quien ya no tenía ni siquiera que esforzarse en reconocer - Heey bro - dijo saludando; a lo cual su contrario sólo respondió al saludo sin parar su camino, siendo seguido por el más bajo.

- Oye ¿hiciste el trabajo de Inglés?- dijo con un tono de interés en su voz.

- No necesitas saberlo - se quejó sin mostrar emoción alguna, pues ya no era novedad que cualquier tarea que necesitara su amigo, se la pidiera.

- Ahg.. por favooor ¿Síiii? - suplicó el chico, alargando las vocales de sus palabras.

- No.

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El rubio abrió sus ojos repentinamente, tardando solo pocos segundos en levantarse de su cama, con euforia fué rápidamente a darse una ducha de agua fría, siempre era rápido en todo, pero hoy estaba aún más ansioso de llegar pronto a la escuela.

Agarró la primera camisa que, a su criterio, no estaba tan arrugada, puede que en el proceso de colocarsela, alguno que otro botón no haya quedado en su lugar, pero no era importante, se puso sus pantalones y zapatos sin agujetas de forma torpe, tomó su mochila tratando de no tirar nada y bajó corriendo las escaleras, siendo regañado por su madre en el proceso.

- ¡Tweek! te he dicho que no bajes corriendo, no quiero que te vuelvas a romper algún hueso - dijo molesta la castaña, que terminaba de colocar café en un colorido termo, entregándoselo a su hijo.

- ¡Ahg, perdón mamá, pero es que ¡estoy tan emocionado! - sonrió, recibiendo una mirada alegre de su madre.

- Está bien Tweek, solo recuerda respirar y por favor, no corras - mencionó haciendo énfasis en la última instrucción, besando a su hijo en la mejilla, este recibiéndolo con una mueca en su rostro.

Salió de su casa, directo hacía la estación del autobús, que para su suerte, no sé retraso, llegando temprano a su destino. Solo entrando, se dirigió hasta la zona entre su casillero y el de sus amigas, viendo cómo ambas le veían llegar

- ¡Holis! - saludó la chica de pelo rubio, seguida de la azabache.

- Hola chicas - respondió el saludo con una pequeña sonrisa alegre.

- ¿Preparado para hoy? - pregunto la chica de boina rosa.

- ¡Eso creo..! ahg, pero la ansiedad me puede, aún no me creo que al fin conseguí un protagonista - dijo el chico con una voz ansiosa y entusiasmada.