THREE

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4:00 a.m

Comienzan a oírse ruidos desde la otra habitación como si alguien quisiera abrirla, Josh abre los ojos lentamente frunciendo el ceño por el sonido, sin levantarse de la cama sonríe al recordar que la puerta está con llave y vuelve a dormirse.
No tarda en empezar a oír un "Ayuda", la voz se eleva, cada vez más y más, hasta que son gritos elevados de tono, con todo lo que se permitiría salir de la garganta de una persona, casi destrozándola.

Josh desearía creer que no es Tyler, obviamente lo es, los gritos se oyen más que cerca, decide levantarse pesadamente de la cama, casi arrastrándose hasta la habitación donde se encontraba el menor.

Tyler tenía un plan, no bien pensado, solo correría, correría como cuando sus padres lo culparon por la muerte de su hermano, correría como cuando en el colegio recibía los insultos, correría como cuando se sentía lastimado, sólo...Correr.
En el  momento que siente unos pasos que se aproximan con toda pesadez, deja de gritar, apretando la punta de la cobija que era amarilla.
Amarillo, como el color que lo ayudaba a sentirse seguro.
Ve la puerta abrirse y da una patada en las partes bajas de Josh, el cual se agacha rápidamente llevándose sus manos hacia la parte donde duele.

Tyler corre hacia la puerta de entrada, abriéndola con agilidad, ya corriendo por el pasillo del edificio, muy asustado, a la par de que repite casi susurrando.

Jumpsuit, jumpsuit, cubreme.

Josh con algo de dolor logra levantarse maldiciendo para luego empezar a  correr tras el menor.
Siendo más ágil y veloz que Tyler, logra alcanzarlo, tirandose sobre él y haciendo que ambos caigan al piso.

Josh: Maldito mimado, hijo de puta.

Tomando al castaño del cuello y levantándolo, mientras esté solloza intentando soltarse.

Josh: Podríamos haber sido amigos, si hubieras colaborado...

Samarreandolo un poco, para luego soltarlo y arrastrarlo hasta el departamento nuevamente.

Josh: Si no obedeces, lamento decir que tendré que ser rudo.

Entrando al lugar y tirando a Tyler contra el respaldo del sillón.

Josh: ¿En serio pensaste que ibas a escaparte?

Ríe sarcásticamente, acercándose, para luego arrodillarse frente al cuerpo del menor, el cual se encontraba tembloroso. Josh podía sentir el miedo, eso parecía ser un alimento para su grandeza, inspirar miedo, sentir como le suplicaban, aveces, le hacía gracia ver que algunos hasta se orinaban, por ser intimidados de esa manera.

Josh: Mírame...

El menor hace caso omiso a lo que el teñido le dice, tapando su rostro con sus manos, sollozando aún más fuerte.

Josh: Vamos, quita las manos de tus ojos por mí.

Acercándose más al menor, logrando que este trate de retroceder, fallando en el intento.

Josh: Te lo pediré de nuevo.

Sintiendo su poca paciencia borrarse.

Josh: Mírame...

Al ver que el menor sigue sin hacerle caso, toma las muñecas de este, ejerciendo una fuerza sobre estas bajandolas de golpe, dejando ver el rostro del castaño, el cuál era levemente iluminado por la luz de la luna.
Traía su rostro algo sucio y rojo, sus ojos colorados al igual que sus mejillas, como si hubiera estado llorando toda la noche o madrugada.
Josh intenta calmar un poco su adrenalina y enojo en ese momento, recuerda que a su jefe no le gusta que "maltraten la mercancía".

Josh: escúchame, Tyler... Tú ahora me perteneces, este no es un nudo, es una correa.

Volviendo su rostro aún más serio, acercándose los últimos centímetros hasta el menor, casi arrancando el alma de este al conectar miradas.

Josh: Y tengo algunas noticias para tí.

El menor aparta la mirada  sin dejar de llorar. El teñido hace una pausa para tomar el rostro del menor entre sus manos, bruscamente, haciendo que lo mire nuevamente.

Josh: Tú, me perteneces.

Levantándose y arrastrando al menor nuevamente hacia la habitación que le corresponde.
Volviendo a empujarlo haciendo que este retroceda tropezando con sus propios pies torpemente y cayendo a al piso.

Josh: Ahora, necesito que hagas silencio, estoy intentando dormir.

Cerrando la puerta, haciendo de esta casi una giratoria.
Tyler oye las llaves y luego los pasos de Josh alejándose.
Trata de calmarse a él mismo, acariciando sus propias piernas sin soltar la manta amarilla.
Hasta caer en profundo sueño, después de estar casi media hora mirando hacia la puerta.

• Sweet kidnapping • (joshler)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora