Capítulo 3 Todo está decidido.

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—De acuerdo.

Dio un largo suspiro de mala gana, sabía que cualquier cosa que dijera terminaría sin ningún valor, sentía tanta humillación por el comportamiento de su hijo que si no fuera porque Derek lo tenía bien agarrado del hombro Luka ya estaría pidiendo perdón.

—Propongo— intervino Derek— que si van a decidir sobre ésto nosotros deberíamos volver al entrenamiento, estamos en finales de temporada y si quieren que impresionemos al emperador— lanzándole una mirada a Benedic, sabía que solo así los dejarían libres.

Solo un movimiento de manos era lo que necesitaba Gabriel para que se pudieran retirar y eso era lo que más anhelaba en ese momento, odiaba ser el sensato de los gemelos nunca en su existencia lo había sido pero en ese momento Luka no estaba en sus cabales.

Gabriel negó divertido, enserio le encantaba molestar a su viejo amigo.

–No, no será necesario los chicos tienen que empezar a lidiar con estas cosas por si mismos, lo que en realidad necesitamos es dejarles las cosas claras— agrego sin rastro de amabilidad con sus ojos grises tornando a rojo..

Algo que tienen los vampiros de sangre pura, es que a demás de su obvia fortaleza superior a la de los vampiros mestizos era que podías saber cuándo eran una amenaza gracias a sus ojos, estos cambiaban de color de acuerdo al nivel de sus emociones, rojo cuando estaban al punto de arrancarte el corazón por otro lado está el Morado el cual aparecía cuando realmente estaban enamorados y dispuestos a dar su vida por su amado lo cual era extraño de ver ya que al vivir tanto tiempo algunos sentimientos nunca eran duraderos.

— ¡¡¡Está es la primera y última vez que se los advierto!!! — Con evidente furia señaló a Luka que se encontraba recargado en la pared con brazos cruzados — Nunca vuelvan a actuar sin consultarme primero, Terrence te vigilará para asegurarse de que no pase de nuevo ¿Cierto?.

Terrence que hasta ahorita había permanecido callado a un lado de su padre conservo la calma .

—Si no hay otra opción— sin ninguna pizca de entusiasmo.

—No. Ya pueden retirarse, y tú ven aquí.

Luka se acerco a Gabriel, sintió como sus fríos dedos lo tomaban de la barbilla sus ojos le dejaban claro que lo que estaba a punto de hacer no sería agradable.

—Escucha con atención toda decisión tiene su consecuencia y está será la tuya— con la mano libre coloco un anillo de oro con un rubí al centro en la mesa— te pondrás este anillo y no te lo quitarás hasta que tengas mi permiso aunque sabes que aunque lo intentas no podrás— añadió con una sonrisa que helaba la sangre.

Sin decir nada más Luka se lo puso en su dedo anular, sintió como su fuerza se perdía. Derek tomo a su hermano del brazo para sacarlo de la oficina.



Tenía que pasar a las oficinas de vinculación a recoger el uniforme antes de que cerrarán las oficinas, lo último que quería era tener que pedirle a Derek que me acompañará menos después de la extraña conversacion que acababa de tener con   su gemelo , así que para evitar cualquier enfrentamiento con ellos decidí ir sola. Sali rumbo al elevador rezándole a todos los dioses que no tuviera que ver a ninguno de ellos mientras esperaba que se abrieran las puertas que no hace menos de dos horas habían formado parte de uno de sus episodios que de acuerdo con la psiquiatra empeorará cada vez más a no ser que se internara en la clínica, pero debido a las ideas de mi padre era totalmente imposible por esa razón me había mandado al lugar más apartado de su familia, para que dejara de causarle vergüenza al menos eso era lo que  había dado a entender tan pronto consiguió espacio en la institución...

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