El Prometido de ZeWu-Jun. [MDZS]

Extra uno: Boda

Jiang Cheng estaba demasiado furioso, después de darle un centenar de vueltas a la habitación, finalmente se sentó en el borde de la cama y jugueteo ansiosamente con la insignia de cascabel de su secta.

—Ah... Moriré joven —murmuro para sí mismo mientras soltaba un extenso suspiró. Trató de distraer su mirada en la decoración de la habitación y el ambiente tranquilo que la envolvía. Había visitado este lugar tantas veces que lo conocía igual o mejor que su propia habitación. Se froto lentamente la parte trasera del cuello y buscó un poco de paciencia.

Jiang Cheng se había preparado mentalmente para todas las reacciones que nacerían con la noticia de su boda. Algunos cultivadores prominentes les felicitaron con cierta sorpresa y otros más (especialmente jóvenes doncellas) puntualizaron su desacuerdo, Jiang Cheng podía contra esos comentarios caprichosos... O eso creyó. Claro que no estaría nunca preparado para la lengua afilada de una doncella herida que caprichosamente hizo una comparación entre la relación de sus fallecidos padres y su cercana boda.

"ZeWu-Jun está siendo obligado... seguro SanDu-ShengShou hizo lo mismo que Madam Yu"

De haber tenido a Zidian seguramente habría azotado a la joven hasta que se disculpará por sus descuidadas palabras. XiChen acostumbrado a intervenir en los problemas, dulcemente le había detenido y solicitado que se adelantará a su habitación mientras sin miramientos aplicaba el hechizo silenciador en la joven. Jiang Cheng no fue capaz de presenciar la gélida actitud del primer maestro Lan, incluso más aterradora que WangJi molesto.

WanYin apretó los puños y tuvo muchas ganas de desquitar su mal temperamento contra algo ¿Él podía ser feliz? No estaba arrastrando a XiChen a un matrimonio obligado, ¿verdad? Bajo la mirada al anillo de Jade con detalles de nubes a la deriva, Zidian actualmente lucía en al anular de XiChen, protegiéndole recelosamente como lo haría su maestro (Jiang Cheng). Desde niño, Jiang Cheng procuró no pensar en el amor, las relaciones o el matrimonio, esos eran temas difíciles en su familia, hacer preguntas significada recibir una mirada compasiva de FengMian y la desdichada furia de Madam Yu. Distraídamente desanudo el nudo en su cabello dejándolo caer como una oscura cascada sobre sus hombros y espalda. Desanudo la fajilla color violeta, abriendo lentamente la túnica oscura con pliegues morados.

—¿Puedo pasar, WanYin? —XiChen se asomó con una dulce sonrisa, silenciosamente se acercó, acuclillándose delante del menor, tomando sus manos mientras buscaba su mirada.

—¿Estás satisfecho con esto, ZeWu-Jun?

XiChen suspiró y sus facciones se suavizaron aún más. Con los pulgares acarició circularmente el dorso de sus manos. Jiang Cheng no lo sabía pero lastimaba mucho a XiChen cuando le hablaba de una manera tan fría.

—A-Yin... ¿Me veo como si estuviera siendo obligado? —beso los nudillos de sus manos sonriendo con extrema dulzura—. En todo caso... ¿No deberías ser tú quién este insatisfecho?

La mirada confusa del menor le hizo reír. XiChen se levantó, empujándolo sobre la cama. Acarició su mejilla y beso su frente, exactamente donde tenía esa pronunciada arruguita de tanto fruncir el ceño. Mientras le llenaba el rostro de suaves besos, entretuvo las manos en desbaratar las trenzas de su peinado que curiosamente aún se mantenían hechas.

—En aquél momento ni siquiera recordabas tu propuesta. Si yo no quisiera estar contigo sólo debí seguir tu mentira y fingir que aquella noche fue un error. —enrolló los dedos en los rizos oscuros. XiChen se maravilló en silencio con la preciosa imagen ante él— Las personas pueden estar en desacuerdo, no importa porque yo no busco su aprobación... Mañana tú y yo tendremos nuestra boda, no te dejaré solo nunca, así que tampoco me dejes.