Hyuk viajaba solo a Tokyo esa noche, el vuelo 742 con destino a Tokyo estaba retrasado, esto le daba tiempo de comer algo decente pues detestaba la comida que sirven en los aviones. Eran las 10:45pm, cenó en un pequeño restaurante tailandés. Luego de esto fue al baño, cuando estaba frente al espejo escuchó que la puerta de uno de los cubículos se abría lentamente. No le prestó mayor importancia en el momento y continuó aplicándose loción hidratante. De pronto cayó en cuenta de que la puerta había dejado de sonar y que alguien lo observaba desde adentro del cubículo. Solo alcanzaba a ver un rostro, dio un respingo y con esto el frasco de crema cayó al suelo.
-lamento asustarte! Dijo el rostro en el cubículo.
Hyuk volteó la cabeza para ver mejor, en ese instante el rostro salió del cubículo y se acercó a Hyuk, se agachó y recogió el frasquito. Al levantarse se acercó demasiado a Hyuk, tanto que Hyuk pudo percibir el aroma de aquel sujeto.
Sus rostros estaban demasiado cerca, Hyuk se sentía extraño, inusualmente fuera de si, aquel aroma lo envolvía, ese rostro era perfecto. El sujeto miraba directamente a los ojos de Hyuk. -Pasajeros del vuelo 742 con destino a Tokyo por favor abordar.
Hyuk salió del letargo, recogió sus cosas lo más rápido que pudo y salió corriendo hacia la puerta de abordaje.
Qué mierda fue todo eso? Pensaba Hyuk, nunca se había sentido así, mucho menos con un hombre. - debo concentrarme en el trabajo! La empresa tiene fe en mí, en que yo podré cerrar este negocio.
Pasaron 3 horas y al fin vio la enorme ciudad abajo. Había pasado el tiempo del viaje repasando lo que tenía que decir, los puntos claves, incluso pensando en qué camisa debería vestir en la tarde cuando se encontrara con Yamamoto-san.
La auxiliar de vuelo le sonrió cuando le informó que ya podía quitarse el cinturón de seguridad. Hyuk encontró esa sonrisa bastante agradable y reconfortante.
Tan pronto cruzó inmigración vio un letrero que tenía su nombre escrito "Lee Hyukjae" se acercó al hombre de baja estatura y gruesa complexión que lo sostenía, éste le indicó en inglés que por favor lo siguiera.
Un auto de la marca Mitsubishi lo esperaba, se subió y justo cuando el conductor encendió el vehiculo Hyuk vio de reojo un rostro conocido.
Continuará.
