Todo Comenzó Con Una Melodía (izukuxkyoka)

capitulo 4

Enfrentamiento  

Midoriya Izuku,nombre de héroe Deku, joven estudiante del curso de héroes de la academia U.A, heredero del símbolo de paz así como futuro héroe #1, impresionante no?, bueno así como suena debería ser también en persona, pero la cruel realidad era otra aunque no del todo equivocada, ya que el único impresionante era el Héroe Deku, en cuanto al joven Izuku, si quisieras describirlo estaría muy lejos de ser tan impresionante como su faceta de héroe lo era.

sus compañeros que lo conocían dentro y  fuera del traje se preguntaban a menudo 'por que era tanta la diferencia?' solo se trataba de un traje , pero cuando se lo ponía era como si un suiche se encendiera, el joven Izuku parecía desaparecer dejando solamente a un valiente e impresionante héroe, héroe del cual ahora mismo el requería ayuda.

Debido a la inesperada asistencia de su "amigo/rival" tuvo que interactuar con cierta chica sin haber aclarado la vergonzosa situación anterior, añadiendo el echo de que le estaba cantando en el oído con su hermosa voz, lo cual lo mando a quien sabe que universo poniendo una cara de bobo frente a la chica avergonzando lo de sobremanera, cabe de mas decir que esto solo lo puso mas nervioso, usando la opción que se le ocurrió 'huir'(la vieja confiable).

Teniendo la suerte que la chica predijo su pensar, abrió la ventana por la cual pensaba escapar evitando que este la hiciera pedazos, pero esto solo lo hacia sentir aun más peor, no solamente huyo de ella como animal asustado si no que hasta le ayudo a semejante acto de cobardía.

  ―Ahhhh!!― pego un grito al cielo alzando los brazos para luego arrodillarse golpeando el suelo con fuerza creando un pequeño cráter alrededor de cada puño   ―por que  hice eso?― se preguntaba en voz baja con un aura de depresión creciendo en el, estuvo un rato de esa manera hasta que algo paso por su mente.

  ―Y... "si me odia ahora?"― en ese momento sus palabras desaparecieron dejando rienda suelta a sus deprimentes pensamientos, sentándose en el suelo pego sus rodillas al pecho mientras con una mano se sostenía la cabeza, la otra la tenia en su boca mordiendo frenéticamente su uña del dedo pulgar, en ese momento empezó de nuevo a murmura como loco.

Era casi imposible entender lo que decía con esa depresiva y baja voz, pero se entendieron algunas como 'ahora que hago' o 'tengo que disculparme' también 'maldito Kacchan!, esto es tu culpa', esta deplorable escena duro casi una hora, perdido en sus pensamientos al darse cuenta que el sol comenzaba a arder abrazadora mente alzo la mirada, calmándose un poco reviso la hora en su celular, era casi medio día.

―haaa― dio un sus piro leve, dándose cuanta que no entreno se deprimió mas, ya eran dos entrenamientos saltados, esperaba que esto no se volviera una rutina, entonces  un pensamiento cruzo por su mente "si sigo haci no podre concentrarme en mi entrenamiento" al parecer ese sentimiento que la chica le estaba haciendo sentir y no entendía le estaba causando problemas, lo estaba alejando de su sueño.

―esto no puede seguir así― dijo levantándose y tomando rumbo de regreso a la academia, se le notaba lo confundido que estaba ―tal vez si le pido ayuda a All M-― se detuvo en seco antes de volver a suspirar y bajar la cabeza   ―no, no puedo decirle― estaba deprimido y confundido, no tenia a quien pedirle consejo, pues no quería defraudar a su mentor y era muy vergonzoso para preguntarle a sus amigos Iida y Uraraka.  

nuestro héroe caminaba lentamente a su destino, mientras cierto chico explosivo lo andaba buscando en el otro extremo de la academia, parecía muy molesto y con ganas de decir una que otra cosa al cobarde, según palabras de el mismo.