×Parte 11×

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"Es el momento"

La mañana trascurrió como siempre. Tranquila con par de bromas por allí y otros juegos por allá. Mientras veía que jugaban como siempre, sonreí de forma inconsciente al recordar cada vez que veía sus rostros las dificultades que tuvimos al conocernos o para convencerlos de unirse a mi tripulación. Mi sonrisa se va quebrando al recordar también cuando los vi desaparecer en el Archipiélago.

Pero, si no fuera por eso, no nos hubiéramos echo más fuerte.

Suspire al darme cuenta que tenia razón y me concentre en comer mi carne, pero antes de ello, Law llama mi atención lanzandome un pedazo de carne que no dudo en atraparlo con la boca antes de que toque suelo. Mastique divertido y le sonreí agradecido.

—Mushas glashias. –Dije con la boca llena. Law solo me mira con poco interés antes de volver a hablar con Robín. De repente, sentí que mi felicidad se fue al carajo y tenia unas ganas inmensas de levantarme y enterrarle a Law el pedazo de carne en un lugar donde no le llega el sol.

—Luffy. –La voz de Sanji llama mi atención y gire la cabeza encontrándome con su rostro preocupado. Quería decir algo, pero me acorde que aun tenia comida en la boca así que la trague y hable.

—¿Pasa algo, Sanji?

—¿Qué te ocurre? Llevabas minutos mirando a Torao con la boca abierta... ¿En que pensabas, pícaro? –Hablo mientras hacia unas muecas extrañas.

—Pensaba en meterle esto en el ano. –Señale la carne. Sanji abre los ojos sorprendidos por mi respuesta y comienza a carcajearse provocando que los demás se dieran vuelta curiosos de la risa del cocinero.—¿Qué es tan divertido?

—Ah... Ah... –Limpia sus lágrimas recuperándose de su risas. Lo mire raro y volví con mi comida.

—Pienso rendirme. –Las risitas de Sanji pararon en seguida.

—¿Qué? –Por su tono de voz, parecía mas que sorprendido, pero no le di importancia. Mantuve mi cabeza gacha mientras analizaba mis palabras.

—Me rendiré. Sanji y ella están bien juntos. –Hable sintiendo mi nariz picar y mis ojos llenarse de lágrimas, a pesar del terrible nudo de mi garganta y del dolor punzante de mi pecho.

—¿Por qué...? –Pregunto Sanji hablando un poco más suave. Esta vez gire mi rostro para verlo y las lágrimas no tardaron en bajar rápidamente.

—Porque es horrible que te quiten a la persona que las amas.–Susurre sintiendo que las lágrimas bajaban hasta mis labios y el mentón. Trague saliva a pesar del dolor y Sonreí... A pesar de que mi corazón ardía.

—¡Largo de mi cocina, grupo de idiotas! –Grita Sanji de repente, se levanta de donde estaba y comienza a empujar a los demás que apenas de habían levantado confundidos.

—¡Eh! ¡Espera, Sanji-Kun, no he terminado mi...! ¡Oh, Luffy! ¡¿Por qué lloras?! –Las voces de mis amigos protestaban y se quejaban y cuando escucharon a Nami decir aquello, parecían que insistían más en quedarse. Decidí encargarme del asunto.

—Chicos. Necesitó que se vallan. –Hable usando un tono firme. Me sorprendí por dentro porque no sabia de donde había sacado tanta fuerza para hacerlo.

—¡Pero...!

—Es una orden. –Dije en tono seco. Todos se estaban por ir hasta que hable de nuevo. —Sanji, tú también vete. Deja a Law aquí.

Law era el último que quedaba en la sala. Los dos se voltearon a verme sorprendidos, aunque Sanji tenía una expresión de horror mientras que Law una expresión de confusión.

—Luffy... –Hablo Sanji.

—Solo hazlo. –Gruño. Me dolía comportarme de esta forma, pero era para que me tomara en serio.

Sin rechistar, Sanji se alejo y empujo con algo de brusquedad a Law en la cocina cerrando la puerta detrás de él.

—¿Qué sucede, Mugiwara-Ya? –Observe sus ojos grises mirándome curioso. De repente, me puse nervioso. Lo había llamado... Genial, ¿y Ahora? ¿que mierda le digo? Trague saliva y le señale de mala gana para que se sentará.

—Necesito hablar contigo seriamente.– Oh no... Oh no, oh no, oh no, oh no...

¿Hoy sería el día que me confesaría?

Enamorado de Ti. LawLu [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora