"[...] Caminó por la solitaria calle en medio de la noche. Tal vez pasaban de las 2 de la madrugada...
El callejón por el que decidió tomar el atajo era bastante estrecho, lo que le daba un poco de miedo.Jungkook ahogó un grito cuando de la nada, un gato negro cayó frente a él en medio del camino. El minino se quedó viéndolo fijamente y, por un momento, creyó que era su esposo el que lo veía. Juzgándolo. Pero no, era imposible, él no podía ser, su esposo no tomaría la forma del gato sólo para hacerlo sentir miserable.
Siguió su camino cuando el gato, luego de unos minutos, se fue como llegó.
Saliendo del callejón, sintió unas fuertes pisadas detrás de sí, por lo que se volteó y logró ver a un hombre bastante abrigado que, al devolverle la mirada, hizo una mueca de disgusto, para luego negar con la cabeza y seguir por otro camino.
Se quedó unos momentos parado viendo a la nada ¿podría ser que su esposo lo hubiera seguido? No. Primero que nada, este hombre era mucho más bajo que él; segundo, era imposible siquiera que su esposo pudiera caminar, para ese momento, seguramente, ya ni respiraba. Sintió ese golpe en el corazón, comenzaba a extrañarlo...Llegó a su casa y el pequeño perro que ambos querían como a su propio hijo, lo recibió con ladridos y reproches. ¿Sería posible que su amado hubiera mandado al cachorro a reclamarle por lo que había hecho? No. Su esposo, su amado Taehyung, jamás le reprochaba nada.
Ingnoró al can por completo y bajó las escaleras hacia el sótano.
Entonces, pensó en cómo era posible que su amado esposo, del que jamás recibió reproches, quejas o siquiera llegaba a juzgarlo, le hubiera dicho la semana anterior que ya no quería saber nada de él, que ya no quería seguir viéndolo, que incluso las maletas ya estaban listas.Escalón a escalón bajó, casi como una tortura, hasta que se detuvo en el último...
—Ah. Ahí estás— sonrío— sabía que no era posible que estuvieras tras de mi. Aún estás aquí para cuando vuelvo a casa. Sabía que me amabas, sabía que no me dejarías.Bajó lo que quedaba, llegó hasta él y acarició sus cabellos.
—Ju-Jungkook, por favor...— dijo débilmente— por favor, déjame ir...—
Él dejó de acariciar, para sujetar fuertemente su pelo.—¿Dejarte ir? ¿Dejarte ir a dónde? Perteneces aquí, a mi lado. Me Perteneces a mí.
Y hasta que entiendas eso, tendré que dejarte así. — Dicho esto, liberó su agarre para volver a subir las escaleras y dejar el sótano, dejando tras de sí a un desnutrido, ensangrentado y encadenado Taehyung..."
—¡¡Por favor, Jungkook, por favor!! Gritó Taehyung desde el sótano. Al día siguiente...—¡¡Para!! ¡Para ya! ¡Esa historia está horrible!—Taehyung se quejó.
—¿Eh? Pero si está interesante— retrucó Seokjin, el autor.
—¡¿Qué parte es la interesante?! ¡Estoy muriéndome en un sótano!
—Sí bueno, pero esperá el desenlace.— Seokjin carraspeó — al día siguiente...
—No, no, no quiero seguir escuchando, ya me imaginé ahí todo muerto, basta. No— el pelirrojo se cruzó de brazos.
—Es solo fantasía, amor. No te asustes, no te voy a encadenar.— Jungkook defendió la historia de Seokjin — a menos que termines conmigo, claro.
—¡Aaaahhh! ¡No! ¡No quiero, no, Jungkook, no!— gritó al borde de las lagrimas.
—¡Bueno, basta!— Yoongi habló— Aunque está bueniiiisimo el sadismo, apoyo lo que dice Taehyung, está re aburrida tu historia. Dale, que siga otro.
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You Know Halloween? (O.S)
TerrorUn grupo de amigos que cuentan historias de terror al rededor de una fogata. ¿Qué podría malir sal?