Uno para el camino |Renhyuck|

3. Sin invitación

12 de noviembre: el nuevo tatuaje de Renjun 

—Oye— Renjun gruñe en el teléfono, se alivia la respiración y la voz se escucha con un claro agotamiento. —¿Estás en tu casa?—

Donghyuck está sentado en su sofá con un tazón de helado junto a él y una cuchara colgando de sus labios. 

—No— responde mientras mira las caricaturas en frente de él.

Renjun gime una vez más, los sonidos de él arrastrando sus pies por el suelo. 

—Escucha, no te molestaría tan tarde en la noche si no fuera en serio— Donghyuck sabe que está diciendo la verdad, aun así todavía pone los ojos en blanco.

—¿Qué, Renjun?—Finalmente se quiebra, frunciéndose el ceño por ser tan fácil.

—¿Puedo ir a tu casa?— Él suena sin aliento una vez más y Donghyuck frunce el ceño ante eso. —Puedo escabullirme por tu ventana—

Donghyuck sacude la cabeza, deja caer la cuchara en el cubo de helado y sostiene el teléfono mejor contra su oreja. 

—Mis padres están en una reunión, no regresarán hasta el miércoles— Hace una pausa, —¿Por qué suenas tan ... cansado?—

—Lo verás pronto— Renjun jadea como si hubiera golpeado algo, antes de que Donghyuck pudiera siquiera disparar y preguntar qué pasa, la línea se detiene.

—¡¿Qué demonios te pasó ?!—Es lo primero que sale de los labios de Donghyuck cuando ve a Renjun en su puerta.

Tiene la boca adolorida, el labio inferior roto y los pómulos magullados por los nudillos ásperos de alguien. Donghyuck agarra su mandíbula y Renjun hace una mueca, marca su mandíbula como otro punto débil donde fue golpeado. Renjun solo se ríe con sequedad y torpeza bajo la mirada de Donghyuck, agarrando su mano y apartándola ligeramente. Donghyuck se da cuenta de que se mantiene de costado y cojea cuando entra en la casa de Donghyuck, con una sonrisa en sus labios cuando mira el cubo de helado derretido y las repeticiones de dibujos animados.

—¿Es esto lo que estás haciendo un lunes por la noche?— Renjun se da vuelta, haciendo una mueca de dolor por la rapidez con que el movimiento causó dolor.

Donghyuck suspira por la forma en la que está tratando de aligerar el estado de ánimo. 

—Renjun, ¿qué te pasó?— Renjun arrastra los ojos para mirarlo. 

—¿Estás preocupado por mí, bebé?— Primero, Donghyuck no es su bebé, simplemente les gusta besarse en áreas apartadas. Segundo, Renjun está exudando demasiado confianza para alguien que acaba de ser golpeado

—No me llames así—Donghyuck resopla molesto y Renjun se retira al instante para respetarlo. —¿Qué tipo de matones te hicieron esto?—

Renjun se ríe de eso

—Confía en mí—apenas llega al sofá antes de colapsar en el —Se ven peor que yo, Donghyuck—

—Tendré que verlo para creerlo— Donghyuck toma el helado y lo coloca en la mesa de café —¿me dirá quién lo hizo?—

—Los nombres solo lo harían peligroso—, responde Renjun al instante y Donghyuck se pregunta si Renjun trabaja para una mafia o algo más arriesgado. —Son solo algunos de los mayores en YG—

Donghyuck deja escapar un suspiro inconsciente, Renjun debe haber notado su postura tensa. 

—¿Por qué te hicieron esto?—

Renjun se encoge de hombros

—Tengo una gran boca—. Confiesa tranquilamente como si no tuviera moretones ni un labio roto. —Esos punks pensaron que podían molestarme, solo porque yo era un poco más pequeño que ellos—

Donghyuck se ríe suavemente, cortando la perturbación de Renjun mientras se inclina para presionar un beso casto en la esquina de la boca de Renjun donde no está su dolor. 

—¿Debo ejercer el poder de presidente de mi clase?—

Renjun murmura y se inclina hacia atrás en el sofá mientras Donghyuck permanece a su lado, en el borde para ver mejor a Renjun. 

—¿Y arriesgarte a que esos idiotas vengan por ti, chico bonito?—Se ve distraído en las líneas la cara de Donghyuck, pasa su mano cubierta de tinta a lo largo de la nariz y la mandíbula de Donghyuck.

—Tomé karate cuando era un niño— responde Donghyuck obstinadamente con una mirada fulminante. Renjun tira suavemente su labio inferior con su dedo índice y pulgar.

Los ojos de Donghyuck se hunden y se ensanchan cuando ve un nuevo tatuaje en el dedo medio de Rejun, justo debajo de su nudillo. Se aleja del toque de Renjun,

—¿Otro?—Tartamudea, mirando hacia arriba para igualar los intensos ojos de Renjun.

—Sí, lo tengo porque soy un Aries— Sonríe, clavando su dedo medio en Donghyuck para mostrarle el tatuaje.

Es un tatuaje Aries muy fresco y complejo, de un carnero que mira con audacia en un resplandor. No es la primera vez que Renjun se presenta frente a Donghyuck con una nueva obra de arte en su bonita piel, pero últimamente Donghyuck siente que siempre se mantiene alerta. La última vez que fue la perforación de la nariz de Renjun, esta vez es el nuevo tatuaje de Aries en sus nudillos, Donghyuck no está seguro de lo que anticipa a continuación. Renjun se ve hermoso con la tinta y el piercing, Donghyuck desea que se quite la chaqueta de cuero para que pueda ver su brazo entintado en el que está trabajando.

—Me duele, dame un minuto y me quitaré la chaqueta—. Renjun se ríe sin aliento, con sus delgados dedos agitando sus propios mechones marrones.

Donghyuck hace un ruido, golpea el hombro de Renjun y sonríe ante la forma en que el otro chico gruñe. 

—Siempre tienes algo nuevo, no puedo seguir el ritmo—

Renjun atrapa su muñeca y lo acerca a él para que sus narices se rozan entre sí. 

—Puedes— su voz es calmante para el oído de Donghyuck, antes de soltar su muñeca. —Deberías ver a mi hermano mayor, Yukhei, y a mi hermano menor, Chenle— Él señala los tatuajes en su mano y cuello.

—He oído hablar de Chenle— Donghyuck se golpea la barbilla, recordando los momentos en que el niño de segundo año en el consejo estudiantil, Jisung, se quejó de Chenle.

Renjun zumba una vez más y es suficiente para que Donghyuck sepa que la conversación ha terminado. Donghyuck, con una mirada determinada, se inclina hacia adelante y vuelve a unir sus narices mientras sus labios se separan ligeramente. Renjun sigue sus labios con los suyos, los ojos cerrados y sintiendo el roce de Donghyuck. Donghyuck se inclina hacia adelante y cierra la brecha suavemente, Renjun todavía tiene un labio roto y Donghyuck no quiere lastimarlo más que los demás. Renjun es sensible, tiembla de dolor y Donghyuck pasa su lengua por el corte para aliviarlo. Es probable que sea asqueroso, Donghyuck solo se aleja, despacio, cuando los ojos de Renjun todavía están cerrados por la sensación.

—Vamos— Donghyuck se agacha para agarrar la muñeca de Renjun. 
—Tenemos un botiquín de primeros auxilios en la cocina—