Enamorada De Mi Admirador Secreto ( Jungkook Y Tú)

18.

¿Me creerías cobarde si me da miedo acercarme a ti?

Me siento desesperado al no poder estás a tu lado.

A veces pienso que si no me acerco a ti alguien más va a llegar y te sacará esa hermosa sonrisa.

K
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-Si es un cobarde. - aseguró Suni.

-Para mí no. - dijo Su Hye

-Lo dices porque te estás enamorado de él. - dijo molestándola

-Claro de que no. - dijo sonrojada

-Como tú digas. - dijo rondando los ojos.

-¿Hablaste con Jimin? -

-No, hoy falto a sus clases - Su Hye suspiró triste. -¿Lo irás a ver? -

-Tal vez. - dijo, las dos se dirigieron a clases.
Todo el día Su Hye pensaba si ir hablar con Jimin, el era un amigo muy especial para ella y no quería que su amistad se terminará.

(...)
Su Hye.

Me encontraba sentanda con mi padre, casi no quería comer lo de Jimin me tiene triste.

-Hija, ¿estás bien? - preguntó mi Padre

-Si, solo estoy cansada. - dije, suspirando y sonriéndole forsadamente

-Me enteré lo que pasó en la cafetería- dijo, lo mire confundida.

- En la forma que defendiste a Jackson - dijo tomando mi mano- Estoy orgullo de ti -dijo él sonriendo.

-Gracias. - le dije sonriendo, la verdad lo había olvidado, no sé dónde tengo la cabeza.

-Eres igual a tu madre. -dijo, y yo lo miré -Harías lo que fuera por un amigo. - dijo, y eso hizo que un dolor en mi pecho se producierá, me levanté y fui a dejar el plato al lavado.

- Voy a salir un momento. - dije, dirigiendome hacía la puerta

-¿A esta hora?- preguntó confundido.

-Cómo tú dijiste, haría lo que sea por un amigo- dije, él asintió aún confundido pero no se negó, salí de casa. Salí corriendo en dirección a casa de Jimin, vivía muy lejos de la mía y a esta hora no habían taxis ni autobuses.

Cuando llegué a casa de Jimin, antes de tocar, recuperé el aliento. Había hecho el ejercicio que no había hecho en toda mi vida.

Toqué el timbre como unas tres veces, la luz de la casa de Jimin se encendieron y escuché pasos, él abrío la puerta y me miró sorprendido.

-¿Su Hye? - dijo sorprendido por mi visita tan repentina.

-¿Puedo hablar contigo? - le pregunté.

-Pasa. - me dejó entrar,  me indicó un lugar donde sentarme.

-Quería pedirte disculpa, por lo de ayer. - dije, cabizbaja- Solo pensé en mí y no pensé en ti-

-No, Hye...yo soy el culpable. Yo tenía que haber aceptado tu decisión y no decirte eso. Yo soy el culpable aquí, no tú. - su mirada reflejaba el arrepentimiento que sentía, yo me puse de pie y caminé hacia él.
Me puse de cuclillas y tomé su rostro con mis manos.

-Yo, no me supe explicar. Desde el día que te conocí solo pensé en ti como en un amigo en el cual, podría confiar sin importar qué sucediera. Yo nunca tuve hermanos pero veo a Suni ya ti como mis hermanos mayores- dije, este me sonrió y me abrazó y yo le correspondí, después nos separamos.

-Entonces, ¿seguimos siendo amigos?- dijo

-Si - dije sonriendo

-Gracias- sonrió ahora si como siempre lo había hecho.

-Una pregunta, ¿estabas dormido cuando vine? -pregunté.

-No, estaba apunto de dormir. -

-Ups, lo siento. - dije

-No importa-

-Bien yo debería irme, si no mi papá se preocupara mucho- dije poniendome de pie

-¿En que viniste?-

-Corriendo. - dije, este me miró sorprendido.

-Vivimos muy lejos, como crees que vas a venir corriendo. -

-Pues así no más-

-Bien, vamos. Te voy a dejar. - tomo las llaves de su auto y salimos de casa. -No voy a dejar que te vayas a esta hora sola. - yo le agradecí y él me llevó a mi casa.