TÚ, MI SECRETO

¿Constelación?

Alaia

Me gusta observar cuando no mantengo conversación con nadie, determinando lo que acontece a mi alrededor, cómo hablan, se mueven, se expresan cada una de las personas, entro en un trance, como en el que estoy ahora mismo, perdida en un mar de nada alrededor de todo. Costumbre, supongo que por falta de comunicación, entro en un tipo de seguridad conmigo misma.

En este ambiente de jóvenes, todos hablan, y, hay alguien a la que empiezo a determinar, alegre, rodeada de personas, manteniendo conversación, pero, sus ojos negros, expresan cansancio, sus movimientos perezosos, aún manteniendo una sonrisa en el rostro, sonrisa falsa; es preciosa, sus lunares sincronizan con su rostro, parece tener estrellas, una constelación en donde su piel pálida resalta. Me hace soltar un suspiro, mi vista se satisface con ella, a pesar de ello, la aparto y me concentro en la nada de nuevo. Desde pequeña me he cuestionado, por qué escondemos a nuestro verdadero ser en una mascara, aparentamos estar cómodos y felices, y dentro, sentimos lo contrario; nos obligamos a representar algo falso, y así acomodarnos en esta sociedad en donde lo diferente no tiene lugar de ser.

- Buenos días, me presento, soy su maestro de Sociales y soy quien los va a representar, les pido el favor de que se formen por estatura y género - el maestro se dispone a esperar, y cuando nos hemos ordenado, asiente - andando.

Caminamos por el instituto, es grande y espacioso, y mantiene un estilo elegante pero sutil; cuando llegamos a nuestro respectivo salón, cada quien busca una posición y un puesto, yo suelo ubicarme en el centro, tanto horizontal como verticalmente, es cómodo y con buena perspectiva a donde mire. Ahora que lo reflexiono, realmente me gusta usar mis ojos.

-Bien, voy a pedirles que guarden silencio y escuchen las indicaciones que les daré a continuación, como es primer día de clases, les doy su bienvenida, tanto a los nuevos como a los viejos estudiantes, como algunos sabrán, soy su maestro de sociales y me llamo Juan Marcos Sotelo, seré su representante, y pueden contar conmigo en temas del salón y de la materia. Antes de ubicares en mi materia, van a presentarse todos, y luego continuaremos a lo que es una actividad grupal y de allí al descanso, además de que asignaremos al alumno representante, cabe aclarar que debe ser un estudiante antiguo, ¿de acuerdo? - el salón asiente- Parraga, por favor preséntese, y desde usted, empezaran los demás

Se arma un pequeño alboroto, entre los amigos del tal Parraga y el profesor

- Yo me llamo Mateo Parraga, tengo 17 años y soy estudiante antiguo... y ya

- ¿Cuales son sus aspiraciones? - pregunta alguien que se encuentra cerca de él, ganando una mirada de resentimiento y risas por parte de otros alumnos

- Vamos a intentar que las presentaciones sean presentaciones, así que, Parraga díganos que desea ganar con este año escolar, sus aspiraciones y qué desea estudiar. y para los estudiantes nuevos, por favor decir su procedencia de instituto

- ¡Buena! - grita el mismo que preguntó a Mateo

- Bien, ¿empiezo de nuevo profesor? - el mencionado le dice que si- me llamo Mateo Parraga, tengo 17, soy estudiante antiguo, que ¿qué deseo ganar con este año?- se murmura a sí mismo- pues... pasar bien este año y conocimientos nuevos, deseo estudiar diseño gráfico, y tengo aspiración a ser un diseñador reconocido en la red

- Muy bien, ahora, ¿quien desea presentarse a voluntad?

- ¡Yo! - alza la mano la chica que posee una hermosa constelación en su rostro- Yo me llamo Verónica Gonzalez Londoño, tengo 17 años, estudiante antigua, con este año quiero obtener mejores notas que el anterior y demostrarle a estos burros de aquí que soy mejor que ellos - "ellos" la abuchean y se burlan- no mentiras, los quiero - les manda un beso al aire- deseo estudiar muchas cosas, ¿sabe profe? y aún no me decido por nada, y mi aspiración supongo que es empezar en el mundo del arte o descubrir algún talento oculto en mí

Así continúan las presentaciones, con los cerca de 40 estudiantes que se hallan en el salón, me he dedicado a oír cada uno de ellos, y se acerca el momento en el que lo tenga que hacer yo, causándome pavor. 

- Al parecer, ya todos se han presentado, faltan un par de personas, adelante - con nerviosismo levanto mi mano, llamando la atención del profesor, me da la palabra y me levanto de mi puesto, me siento temblar-

- Mi nombre es Alaia Hernández Castillo, tengo 16 años, vengo de un instituto llamado El Rosal, ubicado en otra ciudad, quiero estudiar Bellas artes y aspiro, al igual que una compañera, hallar una fortaleza o talento oculto en mí - 

Después de ese pequeño intercambio de palabras, se presenta una persona más, y en ese momento salimos a nuestro descanso. Durante éste una compañera de nombre Rosie se acerca a mi y entablamos una conversación, ella es agradable, simpática y muy risueña, tiene sus ojos color café y cabello largo tono grisáceo, es de altura media, me presentó a sus amigos, Mauricio, David, y Paula. Cuando regresamos a clase, en las actividades grupales nos hicimos juntos excepto por David, que se ubicó en otro grupo, tuvimos que presentar una obra teatral improvisada basándonos en las faltas graves de nuestro manual de convivencia, fue entretenido y algo pendejo, y tuve que desarrollar más de un papel. Al final del día, Lucía fue la asignada como nuestra representante, al parecer, ella es quién socializa con todo el grupo, o así se aparentó al tener una cantidad considerable de diferencia en votos con las otras dos personas.

A pesar de que maneje un estado fatal en la mañana, puedo decir que me siento alegre ahora, terminó bastante mejor la jornada a como la había visualizado. Cuando llegué a casa, repase mi día, y a mi memoria regresó la imagen de Verónica, robándome (de nuevo) un suspiro.