Día 9: Misionero

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{ Mundo Normal }

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El tiempo pasó volando, tantos recuerdas que fueron guardando, muchos buenos y otros no tanto, algunos vergonzosos, otros sumamente íntimos. Pasaron por tantas cosas juntos, apreciando lo que tenían, el uno al otro.

Solo... ahora que se veía frente al espejo se daba cuenta del pasar del tiempo.

Pensar que ya habían pasado poco más de cuatro años desde aquel día en que comenzaron su relación.

En el espejo podía ver como sus facciones habían madurado pero aún dejando un toque suave y juvenil, su cabello mayormente atado en una cebolla alta y el resto esparcidos a los lados de su cara. Pero su ojos estaban más concentrados en el uniforme que portaba, sus manos vagando por la tela azul clara en su pecho y jugando con la corbata negra tratando de creerse que esto era real y no un sueño.

Esto daba el fin a su era adolescente y el comienzo a la vida adulta.

Estaba nervioso, con ansias de empezar su nuevo trabajo y al mismo tiempo quería que el tiempo se detuviera y no llegara ese día. El futuro del que tanto pensaba se convirtió en el presente demasiado rápido, y le aliviaba el no estar solo en esto.

Pero aún faltaba una semana para empezar, y en estos momentos el que más necesitaba apoyo no era él.

Sin cambiar de ropa se dirigió a la cocina y sirvió en dos tazas el café que había dejado en la cafetera, uno lo dejó como estaba mientras que al otro agregó una buena cantidad de leche y azúcar. Con estas camino hasta la oficina de su pareja, tocó la puerta y entró aún sin escuchar el permiso. Como esperaba se encontró a su novio frente al escritorio, su cabello completamente liso, decaído, llegando a casi taparle por completo uno de sus ojos, ojeras enormes que mostraban lo cansado que estaba se escondían inútilmente detrás de unas gafas de lectura.

A decir verdad Gold no había cambiado tanto, tal vez su pelo era más largo que antes pero del resto estaba igual, después de todo desde hace mucho que sus facciones ya habían madurado igual que su actitud.

A pasos tranquilos se acerco y dejó ambas tazas en el escritorio dejando la más amarga cerca del albino, caminó alrededor del escritorio hasta estar detrás de la silla donde este yacía, sus brazos no tardaron en rodear al mayor. Él no reaccionó más que tomando su café designado y bebiendo más de la mitad aún estando caliente.

—Deberías descan-

—Luego— respondió sin siquiera dejarlo terminar y sin mirarle a los ojos.

Ese fue lo que le dijo ayer y antes de ayer y todos los días desde hace una semana.

En vez de rendirse Freddy afianzó su abrazo. Ya no podía dejar pasar esto.

—Ese "luego" esta tardando mucho en llegar— murmuró suavemente en su oído. Pasaron cerca de un minuto en silencio hasta que el contrario suspiro.

Antes de que se diera cuenta estaba sentado en su regazo, brazos tatuados se aferraban a su cintura, la frente de Gold apoyada fuertemente en su pecho. Freddy no dudo en volverlo a abrazar.

—Es tan jodidamente hilarante, ni en su muerte nos deja en paz— esas palabras llegaron claras a sus oídos aunque estaban amortiguadas.

Hace tan solo una semana que el más viejo de los Golden murió de un paro cardíaco, en poco tiempo se realizó el funeral y la cremación, pero aquel hombre codicioso que tenía todo bajo su control no se planteó una muerta temprana, nunca pensó que su día llegaría y consecuentemente no pensó en lo que pasaría con la empresa después de su muerte, más bien no le importó lo que pasaría después. Ahora la compañia Golden era un caos y aunque tenían los medios para volver a la normalidad, necesitaban un tiempo para estabilizarse.

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⏰ Última actualización: Oct 15, 2020 ⏰

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30 Días OTP Challenge Freddold {Gold x Freddy}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora