En la garganta un nudo
Qué fácil es sarcarse con el mundo cuesta arriba
Normal que sea tan crudo, porque no escribo un verso que no sienta en carne viva
Te regalo mi escudo... Avísame si encuentras un puñal a mi medida
Perdona si estornudo, con el corazón desnudo el frío se nota enseguida
Y no.
No es noche vieja en esta cama, soy yo de mala uva dando vueltas de campana
Deja de buscar la puerta en llamas, te dije que me quedaba, lo que se van son mis ganas.
Veo caer dardos por la ventana, porque apunte al cielo en lugar de a la diana.
Me siento un camello pasando por la aduana, llevar tanto dentro hace que me explote el alma.
Y siempre que me acerco tú me matas, y siempre que me alejo es punto muerto.
Si digo la verdad meto la pata, porque tendría que llamarte acierto.
Con la mirada llena de post-datas , que mal que se me da decir "lo siento".
La próxima prefiero el mata ratas, antes que volverte a tragar por dentro.
El tiempo suena absurdo... Y yo creando emociones en fracciones de segundo...
Llámame vagabundo, no cuando pierda dinero, si no cuando pierda el rumbo.
No en cualquier boca me hundo, y si es una rotonda mí no es un no rotundo.
No me odies por besarte y morderte tan profundo, que recuerdo confesarte que vine a comerme el mundo.
Tócame los acordes de tu aire... Y te toco un solo de iron maiden.
Diógenes no hablaba del revolver, acepto mi desorden, no que las cosas cambien.
Pasó de correr como un cobarde, apúrate a mi entierro que yo he vuelto a llegar tarde.
Hoy no es día para quedar con alguien, la lluvia es lo de menos, siento que nadie es nadie.
¿Con qué verdades me vas a mentir?, Dame razones para volver, que las perdí por ir.
Si te heriste por mi culpa ni lo decidí,
Un cristal no se pregunta dónde está el faquir.
Me he vuelto un "hazme llorar", no un "hazmerreír", me he visto más en la mierda que en el DNI.
Solo dime "vemenzzi" porque me rendí, pero recuerdo ganar porque te sentí.
Y ahora me siento un mal cajero, porque no sé que me falta, solo se que me lo debo.
Que quiero hablar con Dios, pero no puedo, igual que un familiar de un militar de zarajebo.
Qué no me tientes, que me atrevo.
Me sobra tiempo para perderlo de nuevo, déjame espacio para el miedo y que se vaya tu olvido ...
Que yo de ti no me muevo