01| One Shot

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– Es un varón – se escuchó que decían en voz alta.

– ¿Puedo verlo? – preguntó un pequeño niño de no más de cinco años, o al menos eso aparentaba.

– Por supuesto, vamos con mamá.

Caminando hasta donde se encontraba aquella mujer con un pequeño bebé en brazos, el menor se acerco para ver mejor al pequeño bulto. Sus pequeñas manos hechas puñitos, con los ojos cerrados y haciendo un lindo puchero, comenzó a removerse en los brazos de quien era su madre, provocando que el otro infante se asustara por los movimientos de quien seria su hermano.

Con suaves palmadas en la pequeña espalda del recién nacido, la mujer comenzó a calmar al bebé antes de que este comenzara a llorar.

– Debes de dejarlo llorar. – La mujer vio con curiosidad a quien en ese momento era su esposo, con cara de interrogación el varón continuó con su explicación – debemos de saber que poder heredó – con pesar, dejo de darle suaves palmadas al bebé, logrando así que soltara en llanto a los pocos segundos.

En las afueras se podían escuchar murmullos de los demás en aquel lugar. Con algo de curiosidad el hombre mejor conocido como Fugaku, salió del cuarto en donde estaba su esposa para ver qué pasaba.

– Señor – se acercó uno de ellos al pelinegro mayor.

– ¿Qué sucede? – Abajo, un terremoto ha comenzado – con una sonrisa en el rostro, volvió a donde se encontraba su esposa.

Su esposa al notar al hombre entrando le miró – ¿Qué sucede? – pregunto con algo de curiosidad.

– Hemos sido bendecidos cariño – se acercó poco a poco a su esposa – nuestro hijo heredo los poderes de Namazu.

– ¿Y eso que tiene de bueno?

Aquel pueblo nacido en los cielos, era muy prosperó, su población era bendecida con los niños que heredarán los poderes de ciertos dioses del mundo, algunas familias tenían hijos que eran relacionados a los dioses más fuertes y más conocidos del mundo, sin embargo, así como habitaban dioses buenos, habían dioses malos, quienes traían el caos al mundo y así mismo, quieres eran desterrados de su nuevo cielo al llegar a cierta edad, provocando que olvidasen sus recuerdos, sin embargo, eso solo pasaba cuando los niños nacidos con poderes desobedecían las reglas o incluso cuando lo usaban para el mal.

En los primeros años de vida, se sabe que aquellos pequeños no son capaces de controlar nada de lo que hacen, por ello siempre esperan que sus padres sepan educarlos y enseñarles lo que es el bien y el mal, para que aquellos no sean desterrados.

No obstante, hay ocasiones en que los poderes heredados se salen de control, provocando desastres naturales en varias partes del mundo, tomando con ello varias vidas de las personas inocentes e incluso la vida de sus portadores.

Vivir en SoledadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora