Mírame [RBD]

Capítulo 1

Era viernes, horario de salida del colegio para Maite y sus amigas, ella estaba más que feliz pues faltaba solo un día para ver a a su novio, Nicolás, y a demás no tenía tareas pendientes, era una niña muy aplicada, se destacaba por eso.

Maite: ¡¡AL FIN ES VIERNES!! -dijo con un grito que probablemente oyó todo el colegio.

Anahí: ¡Niña, cálmate! Eso lo sabemos. -dijo una de sus mejores amigas riendo, Maite era muy intensa.

Maite: Ay discúlpame Ani, es que sabes que salgo con Nico mañana y estoy muy emocionada.

Anahí: Ay si, tú y ese tal Nicolás...

Maite: No suenas muy feliz. -dijo triste y enojada a la vez, no le gustaba que su amiga hablara de esa forma aunque ya sabía cuál era el problema.

Anahí: ¿Feliz? sabes que ese siempre me dio mala espina.

Mai: Ani, no seas amargada por favor, sabes que lo amo.

En ese momento, Anahí iba a responderle a Maite, pero llegó Dulce y habló antes que ella pudiera decir algo más.

Dulce: ¿Qué onda chavas?

Anahí: Hola Dul, -saludó ella- nada nuevo de hecho, solo Maite hablando de Nico

Dulce la miró con disgusto y la morocha lo captó.

Maite: me mires así que ya sé que eres una exagerada diciendo que me engaña y crees que no me conviene -dice rodando los ojos.

Dulce: No, ¿cómo crees? Yo sólo dije que es un mujeriego y que se la pasa hablando muy amablemente con otras niñas, nada más -dice Dul con tono sarcástico.

Anahí: Y te dijimos que no te conviene estar con él, que te puede estar engañando con cualquiera de ellas, o con todas. Pero allá tú lo que hagas de tu vida.

Maite: Y yo te dije que Gastón te tiene idiota y no te quiere, pero ya mejor me voy porque no quiero terminar peleando. -dice finalmente y se voltea para comenzar a caminar. Anahí queda furiosa.

El sábado por la mañana suena el teléfono de Dulce y ella se molesta, pero al ver que la llaman tan temprano cree que es algo importante y atiende.

Dulce: ¿Quién eres y por qué fregados me molestas a esta hor... QUÉ?! Dios mío, si claro ya mismo la busco.

La pelirroja se vistió y salió completamente furiosa y confundida. El de la llamada era Christopher, el chico que le gustaba, pero que no la conocía. O eso creía ella hasta ese día, se preguntaba de donde había sacado su celular, pero no era el momento de preguntar. Al llegar a la casa de Maite, quien para su suerte estaba ya despierta y vestida, no le dijo nada, simplemente la hizo subir al auto.

Maite: ¿Dul? ¿Ucker? ¿Qué pasa? ¿A dónde vamos? Me tomaron por sorpresa. -dijo desconcertada.

Dulce: no hagas preguntas, solo espera. -contestó su amiga. Maite no habló más.

Los chicos llegan a la casa de Nicolás y Maite definitivamente no entiende, Ucker le pide que mire por la ventana y lo ve besándose con Karen, una zorra de un colegio privado de la ciudad. Maite se derrumba por completo, pero no llora, se arma de coraje y abre la puerta. Sabe perfectamente que Nicolás nunca la cierra con llave.

Maite: Así que Ani y Dul tenían razón, eres un mujeriego descarado. -dijo intentando mantener la calma- y aún así te atreves a decirme que me amas.

Nicolás: puedo explicarte esto -dijo sorprendido y nervioso.

Maite: No hay nada que explicar, esto se acabó. -intentaba no llorar, intentaba parecer fuerte aunque no creía aguantar mucho mas.

Nicolás: no me hagas esto, yo te amo y lo sabes.

Maite: No, quien ama no lastima, hasta nunca- dijo por ultima vez y se fue antes de llorar frente a él, era lo menos que quería. Pero al salir se derrumbó, abrazó a Christopher y lloró, pero no duró mucho pues si Nicolás salía podría verla, así que simplemente subió al auto y lloró en silencio mientras abrazaba a Dulce, quien solo permanecía callada.

Ella creía entonces que jamás volvería a creer en el amor, pero, ¿realmente sería así? Quizá ella sólo necesitaba alguien que la valore,  que la mire de verdad y no la use.
¿Existirá ese alguien?