En la ceremonia de ingreso a la escuela secundaria, el estudiante Park JiMin de la clase "F" ve al guapo e inteligente Min YoonGi de la clase "A". El se enamora inmediatamente. JiMin inicialmente no expresa sus sentimientos hacia él, pero finalmente...
Como Min me rechazó rotundamente... Pensé que ya no me importaría cómo me trataba. Entonces, ¿por qué lloraba?
El pequeño JiMin, iba caminando rumbo a su casa a paso lento, recordando lo que había pasado, dejando salir algunas lágrimas, paro el paso y miro hacia el cielo viendo una estrella fugaz pasar rápidamente, dio un largo suspiro lleno de tristeza.
—Después de todo, c-creo que aún lo amo —Dijo con lágrimas en los ojos y siguió su camino hasta la casa de los Min.
Entro a la casa viendo como corría hacia ella la señora Min, preocupada— JiMin, llegas muy tarde —Dijo mientras el menor se ponía las pantuflas y dejaba sus zapatos en una esquina—, estaba preocupada por ti.
—Lo siento, debí llamar más temprano —Admitió—, lo siento mucho —Le regalo una sonrisa débil y después paso junto a ella para subir las escaleras hacia su cuarto, mientras que la señora veía preocupada a JiMin y extrañada por su aura llena de tristeza.
Cuando llego finalmente a su cuarto, abrió su cajón, sacando la carta que la había hecho con tanto esmero a YoonGi, saco del sobre la hoja.
Esta es la primera carta de amor que escribí en mi vida, pero esta carta no tiene lector. Sé que es un patán, pero igual lo amo. ¿Por qué?
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Toco la puerta de la habitación YoonGi
—Oye, toma un baño —Aviso—. Voy a entrar —Al no oír ninguna respuesta del menor decidió entrar avisando antes—, mi madre quiere que te ba... —Antes de poder decir otra cosa, vio al menor dormir sobre el escritorio, entro a su cuarto cuando vio la carta en el escritorio al lado de JiMin, la agarro, para después empezar a leerla.
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Capítulo 3 :
¿El café de la mañana es el aroma del amor?
Se despertó, viendo que estaba en el escritorio y era tarde, rápidamente se vistió yendo hacia el comedor mientras se ponía el saco.
—Buenos días —Saludo al instante también obteniendo saludos de los que estaban en la mesa, después sentándose en la silla para empezar a comer.
