Una historia de terror

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"Hace no mucho tiempo en un pueblo lejano existió un niño bastante extraño y solo, no tenia amigos, sus compañeros de la escuela decían que no era humano, sino algo más como un vampiro, extraterrestre, hombre lobo o incluso un demonio, pero nada de eso era cierto, era solo un pequeño con autismo quien vivía con su abuela.

Una noche como esta, los chicos mas grandes de su generación se les ocurrió hacerle una inocente broma, los amigos sabían que los viernes la abuela del pequeño llegaba tarde por su trabajo y dejaba al niño solo, así que cuando el chico iba llegando a su casa, ellos le advirtieron que no entrara por que un extraño hombre había entrado a su casa, el chico entró sin pensarlo dos veces, mientras los 3 amigos esperaban con una sonrisa a verlo salir corriendo asustado. El susto perfecto.

Al pasar por la puerta, el chico tomó un bate de béisbol que estaba junto a los paraguas y caminó en la oscuridad de su casa aterrado, con las piernas y brazos temblorosos, volteando a su alrededor, recorrió la cocina, la sala, su habitación, la bodega, no encontró nada hasta que llegó al cuarto de abuela, había algo sentado a la orilla de la cama de su abuela, el miedo lo invadió, no lo pensó dos veces y corrió contra lo que sea que sea eso y lo golpeó con todas sus fuerzas, gritando, repetidas veces, hasta que lo dejo tirado en el suelo.

En menos de una hora llegó la policía diciendo que los vecinos reportaron unos gritos, en pocos minutos llegó la ambulancia. Los vecinos al igual que los tres amigos observaban estupefactos como sacaban en una camilla una persona tapada con una sábana blanca y tras esta, el chico esposado. Resulta que, por ser día festivo, mucha gente no fue a trabajar y otros pocos los dejaron salir temprano, entre estos, la abuela del chico.