Estar frente a él después de todo lo pasado me resulta difícil, quiero correr a él, abrazarlo, decirle que lo amo y que siempre lo haré, pero Lucah solo está ahí observandome, sin decir palabra alguna.
—Hola—digo con voz temblorosa.
—Hola Howland—Dios extrañé oírlo decir mi apellido.
—Como has estado.
—Mira no quiero que te confundas, solo vine a dejarte algo claro— dijo el chico con una frialdad.
—Lucah por favor, podemos intentarlo, saldremos adelante juntos.
—No Emma, que no ves, ya no hay un Juntos, superame, sigue con tu vida, se feliz. Por favor.
—No puedo ser feliz si no estás tú, Lucah yo te amo— No mentía, en realidad lo amaba y mí felicidad no era completa si no estaba él.
—Sabés yo puedo decir que nunca dejé de amarte— Silencio, oírlo decir aquellas palabras hicieron que mi corazón se acelerará—Porque en realidad yo nunca te ame.
Como es posible que las palabras duelan más que un golpe, porque eso pasó, aquello que dijo de verdad me lastimó. Intentando retener las lágrimas me acerque a Lucah, tome su mano, estaba fria y temblorosa, lo mire a los ojos, evitando no perderme en esos cafés hermoso.
—No me importa, porque yo si te amo, tú fuiste y siempre serás Mi Primer Amor.