—Emma, despierta llegaremos tarde. Emmaa!!!.
—Un rato más, es temprano — susurre.
—Eso te pasa por salir y llegar tarde, aparte aún no me hablaste del chico con el que llegaste anoche—dijo Mey tirandome una almohada.
Me levante de golpe, recordé todo de la noche anterior, y aún no estaba lista para hablar de esto con nadie, soy consciente de lo que iba a hacer y no quiero sermones de todo mundo, suficiente con los del castaño de ayer.
—Era un amigo, me lo encontré por el parque y se ofreció a llevarme—hable dirigiendo me al baño —Tenemos que pasar por mi casa, no he traído mi mochila.
—Descuida, tu papá me hablo está mañana, mando tus cosas. Supuso que no lo querías ver por un tiempo.
Asentí. Tenía varios problemas con papá, ciertamente una parte de mi lo odiaba y otra no. Era muy difícil controlar mis emociones claro después de todo el era mi padre y eso nunca iba a cambiar por mucho que quisiera.
Después de alistarnos y desayunar, nos dirigimos a la Escuela, ni bien llegamos Mey fue en busca de su novio, odiaba que hiciera eso.
—EMMA—gritaron detrás de mí.
Voltee y me encontré con mi mejor amigo Luke —Hola rubio.
—Hey te llame ayer, toda la noche. Donde andabas— preguntó.
—Ah si yo salí a pasear y después me fui a casa de Mey, ya sabés los problemas que tengo—respondí.
—Bueno pudiste avisarme, tu papá me llamo y eso hizo que me preocupe mucho. Emma intenta seguir, superalo sí — dijo el rubio abrazandome.
Y entonces pasó lo vi, era él.
Me despegue de Luke e intenté ir donde él pero ya no estaba, desapareció. Volví donde Luke que al parecer tenía una cara de Que diablo?
—Vi a una amiga quise ir a saludar pero ya se había ido—añadí.
—Bueno, te veo en descanso Emma voy a clases.
—Oh si claro yo igual tengo que ir—sonreí y me fui.
Me tocaba Deportes, tenía que correr 40 vueltas en la cancha y bueno yo apenas era buena caminando así que decidí no entrar e irme a otra parte. Estaba bajando las escales cuando choqué con alguien y éste cayó brutal, fui rápido donde el sujeto para ayudarlo y era él.
—Oh Dios yo te salvo y tu me haces daño—dijo con una sonrisa arrogante.
—Lo siento mucho—ayude a que se ponga de pie—Te encuentras bien, caiste muy fuerte.
—Descuida soy fuerte, no me paso nada.
—Ay que bueno. Hey no sabía que estudiaras aquí —pregunté.
—Pues ahora lo sabes, este es mi último año, así que solo me veras poco tiempo—respondió.
—Wao netaa este igual es mi último año, que raro que nunca te vi—agregue.
—Pues la verdad resien ingresé este año, soy nuevo en la cuidad apenas voy 2 meses aquí.
—Ah oye respecto a lo de ayer, ya sabes no se lo he dicho a nadie y no quiero que nadie la sepa asi que...
—Hey tranquila no dire nada— dijo con una sonrisa de labios cerrados.
—Gracias—sonreí —Y como eso que eres nuevo. De donde eres.—pregunte.
—Bueno llegue a Australia hace un par de meses y soy de Curitiba-Brasil—respondió.
—Ah que bueno y ya conociste todo de la hermosa ciudad de Sidney.
—Aún no todo, de hecho como tu llevas más tiempo aquí que yo te quería pedir que me enseñes tu cuidad.
Su petición me sorprende, y antes de responder lo pienso más de dos veces, estaría bien ir, salir y distraerme después de todo no tenía planes para la tarde y me encantaría conocer mejor al chico.—Si claro me encantaría, puedes recogerme a las 3p.m. Ya tienes mi dirección.
—Oh claro, bueno entonces nos vemos luego.
Se despide, lo veo desaparecer en la multitud. Aún me quedan dos clases así que voy en camino al salón, me toca historia y aún me parece la materia más aburrida voy con una sonrisa ya que es la unica clase que comparto con Mey.
—Amor mio, me extrañaste—me acerco a ella besando su mejilla.
Ella sonríe por el acto—No hagas eso Oscar se pondrá celoso—dice entre risas.
Le lanzó una mirada de pocos amigos—Si bueno, solo tengo que decirte que saldré en la tarde así que apenas terminen las clases me voy a tu casa.
—Salir tú, con quien eh? —pregunta.
—Alguien—respondo.
El profesor entra a la clases y después de eso ninguna dice palabra alguna. Mey vive sola, sus padres están en España hace un par de años, nuestras madres eran mejores amigas así que ella casi siempre paraba metida en mi casa, pero las cosas cambian, ahora yo soy la metida.
Las clases terminan y yo voy en camino a casa de Mey para cambiarme, Luke se ofreció a llevarme pero no accedí quería estar sola unos momentos, reflexionar sobre mi vida, estar con mis pensamientos caminando y escuchando música, siempre me sentía mejor después de todo eso. Es como si las letras se las canciones fueran escritas para mi, lose soy una sonsa porque hasta la canción mas antigua la escucho y la encajó con mi vida.
Por favor no dejes tu vida en las manos de una banda de rock and roll. Quien le echará a perder.
Yo ya lo hize.
Llegó a casa y lo primero que hago es entrar al baño y bañarme ya que faltan 40 minutos para las 3p.m. El camino se hizo largo porque me perdí, okay es momento de decir que soy recontra distraída y siempre confundo las calles.
Termino de asearme y revisó que ponerme, no tengo muchas opciones ya que toda la ropa está en mi casa, decido ponerme un vestido floreado y plancho mi cabello. Suena el timbre y me alistó lo mas rápido posible, bajo las escaleras y me encaminó a abrir la puerta.
—Hola—saluda el castaño.
Lucah era bastante apuesto ya lo había mencionado pero hoy se veía mucho más lindo de lo normal, estaba muy bien vestido y con su sonrisa hermosa que él posee, tal vez estaba siendo demasiado obvia ya que la cara del muchacho comenzó a sonrojarse.
Sonreí negando con la cabeza—Hola.