nos volveremos a encontrar

capitulo 3

Cambios de humor, la reina frigga ya se estaba hartando de esos malditos. Pero todo eso era culpa del pequeño ser que residía en su interior, cuando esta información fue pasada al pueblo, hubo varias celebraciones, el emperador llevo a su malhumorada esposa al coliseo para alegrar su humor ya que eso necesitaba, su dosis diaria de violencia.

La diosa freyja* fue muy bondadosa pero fue algo despiadada en el momento que les dejo dicha bendición, como la princesa había dicho ellos juntos habían creado un gran reino, todos los respetaban ya que ellos dos juntos eran sabios y justos,

Pero siempre hay problemas, los hermanos de Rómulo le tenían envidia por la bella mujer que tenía y por qué el pueblo ahora más que nunca lo amaba,

Pero el hermano más pequeño se arrepintió por esos pensamientos, cuando pudo presenciar como su hermano mayor miraba con tanto amor a su esposa y como acariciaba el aun plano estomago de su esposa, servo se apareció frente a su hermano y le confeso sus malvados sentimientos y se disculpó, su hermano miro enternecido servo y los abraso, después de ello estos se volvieron más cercano.

Por otro lado remo no fue más fácil, el envidiaba mucho a su hermano, hasta tal punto de querer matarlo

Por otro lado Frigga ya se estaba cansando de las constantes insinuaciones del hermano de en medio, hasta que un día se arto y casi le corta la cabeza remo, hubo un gran alboroto al respecto, pero al final del día culparon a los cambios de humor, claro Frigga no quedo contenta pero se dispuso a vigilar muy de cerca al hermano de su esposo.

El tiempo fue pasando con ayuda de freyja y Odín el tiempo y el embarazo de la ahora reina fue pasando maravillosamente, Frigga de querer cosas picantes, quería cosas dulces y de cosas dulces a cosas raras todos a un pueden recordar su ultimo extraño pedido.

—que desea mi reina.

Una de las esclavas se inclinó sumisamente delante de una muy embarazada Frigga, está la miro con una gran sonrisa y le hiso un gesto para que se levantara

—gracias por venir tan rápido, quiero que me traigas algo, ya que este pequeño bribón no se está quieto y tiene hambre.

La esclava rápidamente asintió esperando el pedido de su ama.

—bien quiero tentáculos de calamar con miel.

La esclava la miro con una cara de enserio, pero solo se topó con una mirada decidida de parte de su reina, eta algo indecisa volteo a ver al emperador que estaba al lado este solo la miro comprensiva y solo asintió. Si los antojos eran extraños.

El emperador no tenía muchos miedos en su vida ya que siempre se le enseño que tenía que enfrentarlos con valentía, pero ninguna de esas enseñanzas lo preparó para esto.

—TU MALDITO INFELIZ, CUANDO ESTO TERMINE SUPLICARAS QUE MEJOR SEA EL RAGNAROR*, DUELE.

Un gran escalofríos le corrió por la colpa vertebral, ese sí que era un grito de guerra, su hermano casi no comprendía lo que su esposa decía pero este tenia el presentimiento de que no era nada bueno así que con algo de pésame le puso su mano en su hombro ganándose un gran suspiro en respuesta.

Un barón, esa fue la exclamación en conjunto de toda roma.

Por fin había nacido un digno heredero de sus preciados gobernantes.

El tempo paso las primaveras se acumulaban y el joven guerrero crecía, tanto en fuerza como en astucia, el dios Eón* hacia bien su trabajo ya que el tiempo corría muy rápido, cuando menos se dieron cuenta el joven heredero ya tenía 12 años,

Este posea una singular belleza, cabellos dorados, hebras heredadas de su madre, poseía unos singulares ojos azules, estos parecían emanar relámpagos, ya que eran tan azules que parecían que en cualquier momento Zeus reclamaría los rayos que emanaban esos hermosos ojos azules, este poseía la inteligencia y sabiduría de su padre y la determinación y la fiereza de su madre.