Eiden

Capítulo 3

Puedo escuchar la música. Con todo el tiempo que llevo aquí me he dado cuenta de que mi imaginación es más vívida que nunca. Estoy imaginando una canción que alguna vez escuché cuando puse una lista al azar en una de esas aplicaciones para escuchar música. Jaja, sigo sin decir nombres de marcas porque siguen sin pagarme.

Lo bueno es que no he perdido mi sentido del humor. Eso es bueno, si es bueno. ¿Es bueno? No lo sé. Me pregunto si ya caí en la locura. Hace mucho que no siento mis extremidades, podrían haberlas cortado y no me habría dado cuenta. ¿O sí? No sé cuál sea el límite de mi inmortalidad o de mi regeneración.

A veces me pregunto cuántos años han pasado. La única manera de pasar el tiempo aquí es durmiendo y sufriendo. Hey, un verso sin esfuerzo. Probablemente no suene tan poético en otro idioma, ese será problema del traductor de esta historia. Ya me cansé de romper la cuarta barrera, pero en serio estoy muy aburrido aquí adentro... en mi mente.

Tengo sueño, creo que dormiré otros diez años. O no sé cuánto tiempo duermo cuando lo hago, pero me gusta pensar que es una buena parte de este encierro. Buenas noches.

"Hay un pastizal frente a mí, verde, muy verde. Puedo ver a lo lejos como el horizonte se dobla, estoy seguro de que no hay un paisaje así en la Tierra. Lo extraño es que aún en mis sueños puedo sentir la corriente eléctrica. Ya no me lastima como antes, creo que la soporto un poco más, pero si mantiene mi cuerpo inmóvil y entumido.

Los imbéciles han estado aumentado la energía con el paso de los años, siento que fue una idea bastante buena. Si no lo hubieran hecho probablemente mi cuerpo se habría acostumbrado en algún momento y hubiera podido salir hace mucho.

Pero olvidémonos de eso por un rato, ahorita estoy en un pastizal. Creo que estoy sentado. Si, estoy sentado en una banca. Voy a estirar un poco los brazos, por lo menos aquí no tengo esos grilletes. Woah, hay alguien aun lado de mí.

Volteo, es una mujer. Cabello rubio, ojos azules, tez blanca; muy blanca. Tiene buen cuerpo, pero estoy seguro de que si intento algo probablemente despierte. Meh, me limitaré a hablar con ella.

-Hola preciosa, ¿Qué te trae a esta esquina de mi mente?

-La vista es muy buena aquí.

-Y contigo es mucho mejor.

-¿Quieres que me sonroje? Porque no va a suceder.

Se tocó la cara con la palpa de la mano y me sonrió. Qué bonita sonrisa, ¿podré tocarla? Acerco mi mano hacia ella.

-Cht, quieto vaquero. Si me tocas, despiertas.

-Bueno, dame puntos por intentarlo.

-No, Eiden. Tengo algo importante qué decirte.

-Si te imagino sin ropa, ¿Desaparece?

-No. ¿Puedes tomarte esto en serio?

Otro déja vu. ¿Otro? Jaja, como si esa pelea hubiera sido ayer.

-Esto es un maldito sueño, por lo menos déjame disfrutarlo.

-Esto es un sueño, pero yo no soy parte de él.

¿De qué está hablando? Mis sueños son cada vez más bizarros.

-Eiden, vas a ser liberado. Necesitamos tu ayuda. El mundo necesita tu ayuda.

-¿Eh?

-No me queda mucho tiempo. Dile a Ban que vaya al Polo Norte. Dile que no tenga miedo y que lo estoy esperando.