parte uno.

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Soonyoung tomó las llaves de su bolsillo trasero para abrir la puerta del departamento, las colocó en la cerradura, y en cuanto empujó la puerta hacia adelante para pasar, se arrepintió de todo: desde el cuarto de su amigo, se escuchaban agudos gemidos de una chica.
Cerró la puerta rápidamente tratando de hacer el menor ruido posible y se sentó en el suelo de aquél angosto pasillo perteneciente al piso número cuatro del edificio dónde vivía.

Minghao lo hizo otra vez.

Xú Minghao y Kwon Soonyoung eran amigos inseparables desde que se conocieron en el instituto, cuando el menor había sido transferido de China.
Aquél chico tierno, de bonita sonrisa y quince años de edad, apareció un día cualquiera en la vida de Soonyoung; cuando tuvo que ir al frente de la clase a presentarse por ser nuevo alumno, se notaba que no controlaba muy bien el coreano. Eso no hizo más que hacerlo morir de ternura, pero cuándo comenzaron a sentarse juntos en clase, a hablarse, a entablar una amistad, Soonyoung le hizo un lugar a Minghao en su corazón.
Pasó el tiempo y ambos se graduaron del Instituto y decidieron ir a vivir juntos a un bonito departamento, aprovechaban que ambos iban a la misma universidad y estudiaban también la misma carrera como excusa para vivir juntos.

Pero el problema comenzó cuando Soonyoung comprendió que no veía a ese lindo chino como un simple amigo, y eso lo preocupó bastante.

Un día cualquiera, Minghao comenzó a traer chicas al lugar donde vivían para tener sexo. Lo entendía, estaban en la universidad y necesitaban despejarse pero, ambos vivían ahí y era agobiante tener que buscar otro lugar para pasar la noche.

Suspiró, él lo único que quería era dormir, estaba agotado luego de tantas horas de trabajo en la cafetería.

Sacó su teléfono y rápidamente marcó el número de Jihoon.

--¿Jihoon? Hola. ¿Cómo estás?

"Muy bien, perdona, aquí hay mucho ruido y no se te escucha muy bien, la verdad es que ahora no puedo hablar." Se escuchó murmullo, un tintineo de platos y una voz masculina del otro lado de la línea.

—¿Estás con Seungcheol verdad?— Concluyó el castaño para luego llevarse dos dedos al puente de la nariz.

"Gracias por tu llamada. Luego hablamos, adiós." Y dicho esto, cortó.

—No puedo creer que ese sea mi mejor amigo— Murmuró para sí mismo.

No quería molestarlo, pero realmente necesitaba ir a dormir a otro lado o despejarse con alguien ¿Por qué siempre debía ser la tercera rueda?

Marcó otro número, esperanzado en tener una oportunidad de olvidarse con él su mierda de día.

—Hola Seokmin.

"¿Minghao lo volvió a hacer verdad?" Preguntó su carismático amigo del otro lado de la línea. Escuchó su tono de voz alardeante, obviamente tenía razón.

—Sí Seokmin, por algo te estoy llamando.

"Eres muy cruel Kwon" Contestó con un dejo de diversión en su voz.

—Si, sí, lo que tú digas, por favor dime que no estás con Samuel.

"No, él está muy ocupado con el colegio y casi no puedo verlo."

—Genial. ¿Podemos salir?

"¿Me estás insinuando ir a beber?"

—Claro, ¿por qué no?

Minghao terminó dentro del condón y dejó caer su cuerpo sobre el de Jieqiong, su mejor amiga.

Cuándo volvió a respirar normalmente, tomó sus prendas y las de ella para luego arrojárselas. Ambos se vistieron y el chico fue rápidamente a buscar algo de su mesa de luz: su billetera.

crush; soonhaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora