Capítulo 1 ~Regreso a Miami~

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Christopher era un chico muy amigable, desde niño siempre lo había sido, junto a su mejor amigo Zabdiel, eran una bomba

Pero su ánimo y su alegría se esfumó a sus 17 años, en un día de septiembre, Christopher fue internado en urgencias ya que estaba tociendo sangre y no podía respirar
Al tenerlo ya estable, el doctor le informó a su madre que Christopher padecía de cáncer de pulmón, su caso no estaba tan avanzado, él tenían buenas defensas y era muy jóven

Para Christopher fue la noticia que lo desánimo completamente

Meses después entró de nuevo a la preparatoria, el colegio al que Zabdiel y él asistían, todos lo habían notado diferente, pero Christopher pidió total discreción con el tema, así que los únicos enterados eran Zabdiel y Yenny, su madre

Él había dejado de ser el chico amigable y feliz, ya no hablaba con nadie más que no sea Zabdiel, así que iba a disfrutar su último año en preparatoria con actualmente 18 años

                     ···

Los Pimentel estaban contentos por la llegada de la menor de ellos
______ Pimentel, ella había ido a estudiar un año a México,
Había planeado su regreso a Miami con su padre y su hermano mayor, ella se había ido después de la muerte de su madre, su enorme depresión la llevó a buscar nuevos aires con su tía Susan en alguien estado de la República Mexicana

Ansiosa por comenzar a estudiar su penúltimo año en la preparatoria, feliz por un nuevo comienzo...

|Narra ______|

Acababa de bajar del avión en el aeropuerto, con mis dos enormes maletas buscaba a mi hermano y a mi padre, se suponía que estarían ahí a las 7:40 de la mañana para venir a recogerme, cansada del viaje me senté en una de las maletas a esperar a esos dos hombres, pasaron aproximadamente unos 15 minutos y escuché un grito, esa voz era inconfundible

–Pimentel número 4 –Gritó mi hermano Joel, tenía un enorme globo en forma de corazón con escrito de "Feliz 14 de febrero", lo mire y corrí hacia él, dejando las maletas en el lugar
Cuando estuve a un metro brinque sobre él, Joel me atrapó en sus brazos, lo abracé con todas mis fuerzas y de mis ojos comenzaron a brotar lágrimas, lo extrañaba tanto, después de un año lo volvía a ver en persona, estaba tan cambiado, estaba más alto y fuerte, su cabello estaba ya más largo y con rulos, se empezaba a ver marcas de la barba y inclusive sus pestañas estaban más risadas

Detrás de él, ví al hombre que era mi padre, tenía un enorme ramo de rosas rosas, mis favoritas, al soltarme de Joel corrí hacia él hombre que tenía al frente, lo abracé con todas mis fuerzas, al separarme me dió un beso en la frente y me susurro un "Te extrañamos mucho" yo solo me dediqué a abrazarlo, al voltearme me encontré a Joel con las maletas, mi padre tomo una y Joel la otra

Partimos a casa, a esa casa que me llenaba de recuerdos, al entrar a casa el olor a hogar me inundó, era tan feliz volver a casa, lo primero que hice fue subir a mi antigua habitación, como la recordaba, me acerque y abrí el pequeño balcón que daba hacia el patio trasero, note que la casa que veía abandonada cuando era chica, estaba habitada de nuevo, me instale en mi nueva habitación y me tomé una ducha, al terminar me cambié y bajé
La mesa estaba servida con pizza y spaghettis, me senté y comí junto a mi padre y mi hermano, platicando de mi viaje y mi vida en México

–Me di cuenta que ya habitaron la casa de atrás–Dije tomando otro trozo de pizza

–Si, la habitaron semanas después de que tú te fuiste, al parecer son buenas personas, solo son la madre y su hijo, el chico va en mi grupo pero no hablamos, solo habla con un amigo suyo, se mantienen alejados –Dijo Joel con la boca llena de spaghetti

–¿Me inscribiste en la preparatoria?–Dije, quería asegurarme se ya estar inscrita para empezar el año escolar y no retrasarme

–Si, de hecho ya hasta tenemos tus libros, papá lo pagó y me los dieron, me dijeron que el lunes te podrás presentar

–Excelente –Dije mientras me acercaba mi trozo de pizza a la boca, hasta que escuche unos arañazos en la puerta trasera, solté mi pizza y me levanté con rapidez, ¡Como pude olvidarlo!
Abrí la puerta y fui recibida por Fang, mi perro, un Husky siberiano que tenía desde los 10 años, mi padre me lo había regalado en mi cumpleaños, lo acaricié tanto, lo extrañaba mucho

[>>>]

Ahora me encontraba en mi cama, con Fang a un lado en el suelo, me asomé al balcón y ví a un chico, alto, de tez blanca, tenía un pantalón de mezclilla azul, una camisa a cuadros azul, un gorro gris y audífonos, era lindo, pero volví a la cama, la luz de la luna entraba por esas gran ventana, dejándome verlo

Me sentía en paz, de vuelta a mi casa

               
                      ···

|Narra Christopher|

Estaba recostado en el sillón con mi suero insertado en el brazo, tenía una manta color gris y veía una película, mi madre estaba haciendo sus clásicas verduras al vapor, eso iba a ser mi comida
Decidí tomar mi celular y llamar a Zabdiel

–¿Hola?–Dijo Zabdiel al otro lado de la línea

–¡Hey! ¿Quieres venir a cenar?–Dije esperando que su respuesta fuera positiva

–¿Qué cenaremos? –Dijo él

–Si te digo no querrás venir... mamá hará verduras al vapor –Dije un poco asqueado, ya estaba asqueado de las verduras

–Oye si, me gusta la comida de tu mamá, te veo en 20 minutos –Dijo y colgué, me levanté del sillón quitándome la aguja insertada en mi brazo, me acerque a mi madre y me senté en un banco de la barra

–Invite a Zabdiel a cenar –Dije haciendo una mueca, ella se volteó conmigo y sonrió

–Me gusta que venga Zabdiel, siempre te convence de que comas mejor, me cae bien –Dijo ella, salió de la cocina y entró al baño, a los segundos salió con una bendita de dinosaurios en las manos y me la coloco en el orificio provocado por la aguja en mi brazo

–¿Mamá, mañana me podrás llevar en la tarde a la biblioteca?–Dije con desgané

–¿Para qué quieres ir otra vez a la biblioteca? –Dijo mi mamá mientras movía sus verduras en el sartén

–Quiero otros libros, ya acabé los pasados –Dije y ella se volteó a verme sorprendida

–Pero si apenas hace un mes te compre 5 libros, ¿Ya los acabaste todos? –Dijo ella sorprendida y yo asentí –Mi amor, deberías hacer otras actividades, no te la puedes pasar leyendo dejando que el tiempo pase, haz algo –Dijo ella sentándose frente a mi

–Si no recuerdas tengo cáncer–Dije con obviedad

–Pero si tú no recuerdas fue detectado a tiempo y no lo tienes tan avanzado, deberías darte de gracias que no tienes que tener un respirador artificial las 24 horas, date de gracias que eres un caso muy exitoso –Dijo mi madre, yo solo rodé los ojos y me encamine a la puerta que había sonado hace unos segundos, abrí y ví a mi mejor amigo Zabdiel

–Traje un bote de helado de mora azul y tengo tres películas de superhéroes para ver –Dijo Zabdiel mostrando su bolsa con un bote de helado gigante y las películas en la mano, sin contar que en mi patio estaba su bicicleta tirada, le sonreí y me hice a un lado para que entrará...

Mi Ángel ||C.V&TÚ||TERMINADA☑️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora