Capitulo 2

6 2 2
                                    

Sábado, 10 de noviembre

El dolor no desaparece, el dolor aumenta.

Pedí que me trajeran tanto el desayuno como la comida a mi habitacion, con la excusa de que no podía perder tiempo en bajar y comer con mi madre, tenia que estudiar.

Pero la verdad es que no queria que mi madre me viera así.

Siento muchas cosas dentro de mi ahora mismo.

Pero no siento ni hambre, ni felicidad.

Sopese mis opciones durante la madrugada.

Mi padre vive en Cambridge, Inglaterra, supongo que esta bien para empezar de 0, para comenzar de nuevo. Si, esa es la mejor opción y ya lo tengo decidido.

Chad, ni siquiera me ha llamado para pedirme perdón o para decirme el por que. Y que le importe una mierda hace que el dolor aumente el doble.

Después de horas y horas me levantó de la cama, ni siquiera me había cambiado de ropa, pero será mejor que me vista y me lave antes de bajar a decírselo a mi madre.

Con una sudadera lila grande, unos vaqueros cortos y una cola de caballo basta, ya me costo demasiado levantar los brazos para hacerme la coleta y mi pelo ni siquiera se digno en cooperar.

— Madre...– entre en la cocina, mi voz sonaba rara, sonaba rota, pero dudo que mi madre lo note mucho.

Levanto el dedo indicandome que esperara un momento, esta hablando por teléfono, seguramente sobre algo del trabajo. Después de dos minutos que me parecieron horas cuelga el teléfono.

— Dime, Tess– me sonríe, ya no se distinguir una sonrisa falsa de una verdadera, he visto muchas falsas ultimamente y yo creía que eran verdaderas.

— Tengo que hablar contigo de una cosa– ni siquiera estoy nerviosa, como veo que no responde, continuo. — he pensado... Que como hace mucho que no veo a papa y como tu estas muy ocupada ultimamente, podría pasar en Cambridge una temporada.

Parece aliviada. ¿enserio soy una carga?

— ¿Que pasa? ¿He echo algo mal?– no notó mucha preocupacion en su voz.

— No, no, es que echo de menos a papa y me gustaría cambiar un poco de aires

— Bueno, puedo hablar con el, ya te iré diciendo – me asegura y yo asiento.

Vuelvo rapidamente a mi habitación. Miro rápido el móvil con esperanza, veo muchos mensajes de números desconocidos, comentarios malos y ofensivos, demasiado ofensivos.

Mis piernas cedieron y termine en el suelo, en cuanto vi que no tenía ningún mensaje de Chad, las lágrimas comenzaron a brotar.

La persona que creias que te quería. Te mira a los ojos y te dice que te quiere, pero luego te destruye.

No, después de esto no volveré a ser la misma Theresa que hace unos meses tenia una sonrisa de oreja a oreja cada vez que ese hombre la decía que la queria, la misma chica ingenua que no conocía el dolor, si hubiera podido advertir a aquella chica enamorada lo que se venia... Puede que no hubiera terminado así.

O puede que si, no suelo admitir consejos de desconocidos y eso es lo que me siento, una desconocida.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 10, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Mirame, soy hermosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora