GAEL

EL HIJO DE UN GUIVERNO

I
1.178 D.C.
En la ciudad de Damasco había un calabozo que dos cadenas tenía para someter a un apóstata ,una en cada brazo y de allí a la pared .Cada año el sultán Salahuddin descendía a sus infiernos pues era su don más exquisito el abrir un sendero entre la cáscara del alma y arrancar la verdad .Del crepúsculo al alba ,más allá de lo evidente los corazones se constriñen por el filo de un cuchillo y encuentran sosiego en la traición ,pero aquel prisionero era diferente ,la piel se le pegaba a los huesos tachonada de magullones más el callaba sin suplicar ni pronunciar agravios _¿Que busca con tanto empeño en el desierto y las montañas del Sinaí tu amado Balduino?
Ocurrió que al cumplirse cinco años de su cautiverio llegó a la ciudad una caravana de trece camellos comandados por el heroico Bálian de Ivelin portando oro ,plata, diamantes y demás piedras preciosas como precio de libertad de aquel prisionero .
_¡¡¡¡Helo ahí ,pues es escoria para mi y un perro imposible de domesticar!!!!

Gael Deveraux

II
1.183 D.C.
Pero un día la vió y un refucilo azulado golpeó su cabeza cual látigo luciferino ,dejándolo ciego. Su familia había perdido el abolengo de antaño ,la otrora portentosa casa de los Deveraux sufría la ignominia y el desdén de sarracenos y cruzados por igual .El último señor de Ur yacía en una oscura tumba escondida entre los escarpados riscos de Ascalón. ¡¡¡¡Muere y maldice en vano !!!! luego una helada espada le atravesó el corazón sin miramientos .
El desierto se devoraba la carne y los huesos de cualquiera que lo azuzara con temeraria estupidez ,pero de aquella bestia ardiente y sofocante surgió una dulce criatura con aspecto arapiento. Los brazos de Gael la tomaron antes de desfallecer ,rescatando su cuerpo en el portal sempiterno de la Santa Ciudad .Al punto legó un mercader piadoso con un tazón repleto de agua fresca para saciar la sed de la princesa entre jirones .Mientras bebía,sus labios musitaron el recuerdo de un horror furtivo allende las arenas.
Cuando el lucero de la tarde apareció detrás de las almenas Julia despertó y vió sentado al regazo de su cama a un esbelto príncipe ataviado de túnica blanca ,corona numinósa y una máscara de plata sobre el rostro .La dulce voz de aquel ángel benefactor llenó sus oídos con poéticas palabras sobre el regocijo de recuerdos mejores ,tambien le aconsejó no alimentar los demonios que nos susurran pérfidas canciones luego de la pérdida de un ser amado .
Poco a poco los comos y los porqués brotaron de Julia como el agua cristalina deslizándoce entre las rocas _¿Cómo llegaste a Jerusalém?¿Porque tu arribo fue en total desamparo?¿Cuál es el nombre del horror que te atacó?
El tomó su pequeña mano ,puso un viejo rosario en ella y le dijo mientras sus sollozos llenaban el cuarto .
_Te contaré un secreto si prometes no divulgarlo :El paso de los melancólicos otoños ,los lacerantes inviernos ,las dulces primaveras y nuestros ardientes veranos me han llevado a una epifanía que puede resultarte profana y sacrílega .Nuestro Señor no tiene un plan maestro para ti o para mi ,nos deja ser lo que queramos .El solo confía mucho en nosotros .Somos peces en su gran mar y nuestros afectos extraviados son gaviotas volando libres en su océano de aire .¡¡¡¡ Déjala ir ,o ellas te devorarán !!!! Llora cuanto necesites ,desahoga tu alma ,maldice tu desventura,luego échate a andar y continúa.
El hombre enmascarado se puso de pie y caminó lentamente hacia la puerta con el temple gallardo y altivo propio de su casta sangre azul .Cuando hubo llegado su mano a tomar el añejo picaporte Julia logró coraje para que sus labios pudiesen quebrantar su timidez y preguntó.
_Mi Señor ¿Como debo llamarte? Temo ofenderte de algún modo.
_Para algunos soy Balduino IV ,descendiente de la casa Chateau Landon .Para otros Balduino el leproso ,rey de los cruzados _Al decir esto sonrió ,pero la máscara de plata le ocultó a Julia aquella sonrisa _Su merced puede llamarme como guste .