1. Un Largo Viaje

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El sonido de su teléfono fue su punto de partida, tras años de intentos fallidos de encontrar trabajo esta llamada venía a cambiar todo lo que hasta ese momento había conocido.  La entrevista era al siguiente día, tenía que ir a la estación central para tomar un bus que era la única opción para llegar; este bus salía tres veces al día y el único horario que servía para llegar a tiempo era el de las 6:20 de la mañana. Aún así partió a la cita, temiendo que podría ser una nueva decepción en su truncada carrera. Un café cargado y un cigarro fueron su desayuno su negatividad habitual fue borrada de sus pensamientos y el anden 64 fue la luz de esperanza que la apartaría de años de sobreprotección, dependencia familiar y constante depresión.

Los campechanos hacían una hilera a la que tuvo que unirse sin protesta, había desesperación por subir a la máquina, la gente a toda costa llegar al pueblo. Con suerte la profesora logró conseguir un asiento, que de cierta manera era un alivio porque el calor del verano y las horas en la carretera se harían un suplicio ese viaje de seis horas y media estando de pie.
Al principio del viaje pensó que era muy lindo el paisaje, admiraba el verde de los valles y los coloridos poblados que el bus iba recorriendo. Pero cuando llevaba tres horas sentadas ya odiaba ver un árbol o un parrón cargado de uvas que veía en el camino, estaba tan acostumbrada al gris del asfalto y la falta de luminosidad que otorgaban los edificios a la ciudad que de la cual ella sentía orgullo que esto le estaba siendo indignante, le irritaba sentir aire distintinto al que se había acostumbrado ese que todos evitan pero que a ella le encantaba.

Pasaron algunos minutos y se atrevió a preguntar - ¿Cuánto tiempo falta para llegar a "El Olvido"? a la señora que iba a su lado.  La mujer con voz amable le respondió - Falta poco mijita. Aprovechando que la joven le habló la mujer se sintió cómoda para intentar una conversación - Oiga señorita ¿Uste' a qué va al pueblo?porque así como la veo no parece una de "Las niñas" esas andan con   minifalda y con hartos colores, na' que ver con como uste' se ve. La profesora miró atónita a la señora y pensó «acaso ella creía que soy una punta» entonces le respondió que iba a una entrevista de trabajo, tratando de ser lo más seca posible para evitar seguir hablando con tan desagradable mujer. Pero, la compañera de asiento no hizo caso al tono de voz y lanzó otras observaciones - Hay varias vestidas parecido a uste' en el bus y parece que todas van a vender enciclopedias se ven tan ordenadas, que da  "cosa" hablarles.

En ese momento se dio cuenta que varias mujeres iban a lo mismo que ella y se sintió algo feliz porque todas iban de pie e incómodas, pensó que el cansancio les jugaría una mala pasada y así ella obtendría el puesto.
Una de estas mujeres iba a su lado y a pesar del calor y lo horrible del viaje se veía impecable, era alta, esbelta, tenía un hermoso cabello y un rostro que sobresalía de las demás personas en ese bus. Entonces su moral decayó pensó de inmediato que la bella joven quedaría en el cargo debido a su imponente figura. Mientras la observaba la joven le dio una gran sonrisa de dientes perfectos y en ese preciso momento la despreció.

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