Como el mar azul...

Prologo.

Querida Abuela:
Hace casi ya dos semanas que te fuiste, te extraño bastante.Ahora estoy arriba del avión de camino a P.Vallarta con mi nueva familia,Diana y Carlos Rosas, y básicamente lo único que se sobre ellos es que fueron grandes amigos de mi padre durante toda la infancia y tienen un hijo de mi misma edad llamado Lukas.
Sabes estoy bastante nerviosa, este futuro incierto me tiene colgando en un hilo,desearía poder estar en un naufragio y navegar por aguas desconocidas para después encontrarme en una isla misteriosa, como en las historias de Julio Verne, y así poder escapar de la realidad que aguarda por mi.¡Pero no! Estoy aquí sentada,sin movilidad alguna,y Tita está totalmente dormida,escurriendo baba en el hombro del señor que está a su lado, la verdad tengo un poco de pena ajena.
Me he pedido un croissant y un café, pero como no tengo mucha hambre lo guardaré para después, por qué básicamente nose a lo que enfrentaré con la familia Rosas,aunque tengo que aclarar que tu me has hablado maravillas sobre ellos,pero aún así no es bueno juzgar antes de conocer realmente a las personas....