Nina, una chica a la que no le gustan las fiestas ni el ruido está casada con Matteo, un chico que es alegre, guapo, inteligente, y un fiestero total. Son polos opuestos pero dicen que los opuestos se atraen ¿será verdad? Un día Matteo sale de fiest...
He estado mirando el reloj, desde qué llegué, muero por ver a Luna llegar aquí. Nina ha estado insoportable sólo se la pasa detrás de mí o mirándome, he pasado el día ignorandola, me estresa y sé que es por mi culpa, yo nunca le digo o reclamo nada, por lo único por lo que le pude reclamar alguna vez es por sus padres, si yo hubiese sabido lo que era, a veces pienso que estoy casado con sus padres, sólo lo qué a ellos les gusta o no, pero creo que ya me acostumbré, ¿cómo serán los padrés de Luna?, imagino que son buenas personas así como ella, Camino hasta la oficina de la pastelería y buscó en los cajones el currículum de Luna, busco su número y lo agrego, sonrió cuándo veo su foto de perfil, es muy linda, escucho cómo unos pasos se ha cercan y guardó todo y sacó los libros de contabilidad
Nina: Qué haces amor Matteo: sólo revisó las cuentas por? Nina: amor deja éso, lo puede revisar mi papá Matteo: sabes qué Nina está bién que lo haga tu papá, voy a hornear algún pastel o no sé qué
Me levanté cogí mí teléfono y me fuí a la cocina, le mande un mensaje a Luna el cual no tardo en contestar, esta chica es perfecta, dejé mí teléfono en el mostrador y me puse a hornear
Nina
Matteo no llega en toda la noche y ahora no quiere hablar con migo anda muy frío conmigo, cuando fuí a ver lo que hacía pareció enfadarse el no es así, el me dice que no pero quien sabe donde estubo anoche, voy caminando a pasó corto a la cosina cuando lo veo está consentrado horneando y veo su teléfono en el mostrador, se que esta mal pero muero por saber que esta pasando, me hacer que al teléfono y lo tome, y sin que me percibirá me fui al la oficina
Nina: ahora sí Matteo
Cuándo puse su contraseña ya no era la que tenía, pero no importa puse mi huella y el teléfono abrió sín problema, mé puse a revisar sus mensajes y vi algo que no me gusto
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Nina: pero que es ésto
Tomé con rabia el teléfono y me diriji a la cocina y lo deje donde estaba
Nina: tengo algo que hacer te quedas acargo
No le di tiempo ni de contestar y sali de la pastelería, me estara engañando?¿que son ésos mensajes con Luna?,no tenia claro a donde iba cuando percate a donde habia llegado, pense si deberia entrar o no tenemos mucho tiempo sin hablar
?: ¿Nina? Nina: Gaston, como estas Gaston: bien y vos, que haces aqui Nina:maso menos quiero hablar con tigo Gaston: claro pasa
Luna
No pude concentrarme por Nicolás. O sea, ¿cómo se puede enseñar la cara este tipo? La neta es que es muy...ugh, no lo entiendo ni nada, es un tipo tan...no sé cómo explicarlo. Estoy hablando con Trini y con Emília en la cafetería.
Trini: pero güey, ¿cómo está aquí? O sea, pensé que estaba en la cárcel, o por lo menos, eso es lo que yo sé. Emília: es cierto, Luna, ¿cómo salió de la cárcel? Luna: ay, que sé yo, chicas. Quizás escapó o terminó su sentencia o pagaron para que saliera, yo no sé. Trini: no entiendo como podías salir con él en primer lugar, neta. Luna: Trini, tenía 14 años, no sabía nada sobre el amor ni nada de eso. Cuando me di cuenta como era, quería cortar con él pero no me dejó, Trini. Emília: ¿como? Solo sé que tuvimos que ir con tus padres a la comisaría Luna: ni me recuerdas. Me quedé en una celda por un mes y lo odié más que nada en el mundo. Trini: pero fuiste con el juez y todo bien, te declaró inocente en fin de cuentas. Luna: lo sé, no puedo creer que a las 16 años, me fui a la cárcel. Emília: ya párale, hombre. Luna: párale tú.
Luego vi como Nicolás empezó a acercar a nuestra mesa y se sentó a lado de Trini.
Trini: ¿que chingados quieres, imbécil? Nicolás: ay, cálmate, Trinidad, ¿ya te bajó el periodo? Trini le dio un puñetazo al brazo. Trini: eso te pasa por pendejo. Nicolás: no vine a hablar contigo, chola, Luna, tenemos que hablar pero ya. Luna: dime lo que tienes que decir ahora porque no quiero pararme de esta mesa y menos si tengo que ir contigo. Nicolás: como te encanta hacerte el difícil, gatita. Luna: no me llamas "gatita", imbécil. Trini: ¿sabes? Escúpalo de una vez, Nicolás antes que te parto la cara. Nicolás: cállate, Trini. Luna, necesito que hackeas la cámaras de una tienda. Emilia: a ver, Nicolás, ¿no saliste de la cárcel? ¿Por qué arriesgarás entrar en la cárcel de nuevo? Nicolás: no te importa. ¿Hackeas las cámaras o no, luna? Luna: ¿que pasa si no lo hago? Nicolás: tu noviecito ese, el que tiene esposa, va a saber la verdad, que eres una delincuente. Piénsalo.
