Prologo

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Dos niños (un niño y una niña) jugaban en el patio de una gran casa; estos respondian a los nombres de Eliza Clayton y Cristopher Smith.

Sus madres se visitaban seguido por lo que ellos se veían casi todos los días y siempre tenían algo que jugar.

–eres mi mejor amiga Eliza– comento Cristopher con inocencia

Eliza únicamente le dedicó una linda sonrisa y tomo su mano

–tambien eres mi mejor amigo – se quedo en silencio unos momentos y luego dijo – hagamos un juramento–

Cristopher sonrio y asintió con la cabeza

–si algún día el destino nos enfrenta siempre estaremos el uno para el otro– ambos rieron y cruzaron el dedo meñique con el de su contrario.

Se tomaban muy enserio lo de la amistad como para tener 8 años.

Paso una hora después de aquella promesa y la madre de Eliza dijo que ya se debían ir, ambos se despidieron con un abrazo y luego Eliza y su madre se fueron.

–Eliza y yo somos los mejores amigos – susurro Cristopher mientras observaba el auto donde iba su amiga alejarse.

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