Uno por uno

Capítulo 1

Son las 20:50 aproximadamente, hace frío y las calles están un tanto obscuras, no hay gente al rededor pero escucho pasos, el sonido es cada vez más intenso tengo miedo, mucho miedo.
Procuro caminar aún más rápido y en medio de la carretera porque presiento qué alguien me está siguiendo, no quiero que algo malo me pasé, no por favor...
Y derepente siento un ligero aire helado acompañado de un fuerte manotazo en la espalda. Dios,¿Qué está pasando?. Giro unos 90 grados y veo una silueta masculina tratando de tapar mi boca, intento gritar y pedir ayuda pero me es imposible ejecutar algún ruido escandaloso, en ese momento pasan miles de cosas por mi cabeza,¿Será esto una broma pesada?, ¿Quien sería capaz de hacerme algo así?,¿O esto si es real?,¿Me estarán secuestrando?. Puedo sentir claramente como ponen un pedazo de metal en mi garganta, cerca de la yugular, estoy convencida, me están secuestrando o algo peor están apunto de quitarme la vida.
-Shhhh
Susurran en mi oído
Estoy temblando de pánico
-Shhhh
Vuelven a susurrar pero está vez también puedo escuchar su respiración agitada
- Que linda estás cariño
Me susurra nuevamente mientras mete su mano bajo mi blusa
Quedo plasmada
Puedo sentir cómo su mano fría explora mis senos
No se qué hacer, me tiene sujeta a él y si me muevo es probable qué ese metal que tiene contra mi garganta me corte

- Estás rica cariño, muy rica, ojalá estés nuevecita, eh

-¡Subela!

-¡Subela!, por un demonio!

No puede ser, no, no, no, no.
Evito con todas mis fuerzas ser llevada a ese automóvil, pero es inútil, mi fuerza es inferior a la de  éste hombre, éste maldito hombre.

-Sujetala bien coño

Lo lograron, me tienen en sus manos...

-¿Cómo te llamas?
Grita mientras me pregunta

Con desorientación y ahogamiento de mis lágrimas, gimo

-Eeeeh

-¿Qué cómo mierda te llamas?
Me pregunta con voz alta  enfurecida y al mismo tiempo qué  sostiene un bate

Zas, primer golpe
Zas, segundo golpe, tercer, cuarto, quinto y sexto golpe

- Por última vez infeliz,¿Cómo te llamas?

No puedo sentir mi rostro, y ni siquiera puedo abrir los ojos es increíble que aún este consciente, sólo sé qué estoy empapada de algún extraño líquido rojo

- Soy Paula...