Invocation (OS)

karussell

—¿De verdad quieren hacerlo?

Con sonrisas cómplices, Im Changkyun y Lee Minhyuk se vieron. Yoo Kihyun, con un traje de Jack Sparrow medio mal hecho, rodó los ojos porque ya veía que no podría hacer cambiar de opinión a aquellos dos.

Una semana atrás, antes de que el preciado día treinta y uno de octubre llegara, Changkyun había entrado a su aula comentando que sería buena idea hacer un ritual de invocación que se había encontrado por Internet. Kihyun lo había sacado a patadas de su sala porque el profesor iba entrando y Changkyun ni siquiera estudiaba con él, pues era menor. Aun así, y quitando el hecho del maltrato intrafamiliar (según Changkyun), Kihyun pensaba que desistiría. Es decir, ¿un ritual de invocación? Por favor, él era bastante listo como para saber que esas cosas eran mentira. Aunque Changkyun, con todo lo rarito que solía ser, convenció a sus demás hyungs de hacerlo, prometiéndoles antes que si aceptaban les regalaría alcohol hasta para una semana entera. Y con lo fiesteros que eran el resto de sus amigos, habían soltado el sí más rápido que alguna vez Kihyun les haya escuchado decir.

—Vale, no necesitan responderme —soltó el castaño, rodando los ojos por enésima vez esa noche. —Sólo hay que esperar a Hoseok, Hyunwoo y Hyungwon.

—Tengo mucha curiosidad del disfraz de los demás —comentó Changkyun acomodando su sombrero mientras se sentaba en el sofá, a un lado de su preciada Bonnie.

—Explíquenme otra vez porqué han decidido usar disfraz de pareja.

—Ya te lo dijimos, Kihyun; son lindos, ¿a que no? —Minhyuk abrazó con fuerza al chico de cabellos casi platinados.

—Ustedes me dan asco. ¿Por qué Bonnie eres tú? Que yo recuerde, ella era mucho más bonita y tenía mejor cuerpo.

—¿Querías que Changkyun fuera Bonnie y yo Clyde? Es obvio que él no tendría la adorabilidad que yo tengo.

—Adorabilidad ni siquiera es una palabra, tarado.

Minhyuk abrió la boca ofendido y se acomodó la peluca. —¡Dile algo, Changkyun!

—Detesto darle la razón a Kihyun porque se le sube el ego, pero lo que dijo es cierto.

El rubio entrecerró los ojos y apuntó a Kihyun con un dedo índice como si estuviera acusándolo por haber hecho algo horrible. —¡Sólo tienes envidia porque usaste el mismo disfraz feo del año pasado!

—Qué tiene de malo mi disfraz, yo lo veo bastante bien —dijo, tomando una de sus rastas. —Además, no iba a gastar dinero en otro traje cuando este está en perfecto estado.

—Eres un tacaño hasta contigo mismo.

Kihyun se encogió de hombros para no lanzarse sobre Minhyuk y ahocarlo, decidiendo que era mejor ignorar sus comentarios y simplemente seguir bebiendo de la cerveza que había abierto hacía una hora pero que no había probado por estar meditando sobre lo que harían después de la media noche. No creía que de verdad estuviera siguiendo las estupideces de sus amigos.

El timbre sonó y Kihyun tuvo que dejar a Changkyun y a Minhyuk solos para darles su espacio -se estaba incomodando de verlos besándose con lengua y dientes y chasquidos y ew-, se acercó a la puerta y la abrió sin esperar más, encontrándose del otro lado a un Capitán América, un Tamaki de Ouran Host Club y un apuesto gladiador que definitivamente le quitó el aliento.

—Eh, qué bueno que llegan, aquel par de idiotas no dejan de comerse la boca.

—Menos mal que es la boca y no algo más —respondió Hoseok pasando su escudo de una mano a otra. Kihyun no pudo evitar perderse en la tensión de sus bíceps con cada movimiento. Lo hace a propósito, pensó.