Pesadillas ( One shot AstaxNoelle )

Pesadillas( One-shot)

Pov Asta

Mis pies caminan por si solos, estoy atrapado, atrapado en mi propio cuerpo.

No quiero mirar, siento el peso de la espada en mi mano y se lo que me encontraré si miro lo que tengo delante.

Intentó detenerme cuando mi cabeza se empieza a elevar pero es imposible. Entonces la veo.

Esta ahí, atada en una cruz y me mira. Me mira segura de que conseguiré liberarme y no le haré daño, porque ella confía en mi. Noelle confía en mi.

Y aún cuando alzo la espada dispuesto a matarla, mantiene esa mirada.

La espada se acerca a ella, le corta la cabeza y yo grito.

¡NO!

Me despierto agitado, estoy en la cama, en mi cuarto, en la base. Suspiro mientras me paso las manos por la cara.

He dormido unos 15 minutos, y siento que ha sido nada. 

5 días sin dormir me empiezan a pasar factura.

Me levanto, consciente de que es imposible que vuelva a conciliar el sueño, y camino hasta su habitación.

La busco y la encuentro tendida en la cama, durmiendo plácidamente, segura, sana y lo mas importante, viva.

Suspiro.

La noto moverse y decido alejarme de ahí. El comedor está vacío, pero es lo normal, son las 3 de la mañana y la única que podría estar aquí es Vanessa, pero se fue de misión  antes de ayer.

Me acerco a la ventana y noto el aire frió.

-¿Otra vez despierto?- Su voz me hace sobresaltar, estaba perdido en mis pensamientos.

-Necesitaba aire fresco. No te preocupes, vuelve a dormir.- Le contesto. Noelle me mira de arriba a bajo y suspira mientras se acerca a mi.
Sin decir nada, se apoya conmigo en la ventana y se queda mirando la vista. Estamos a principios de primavera pero el clima sigue siendo frío.

Lleva una camiseta morada y unos pantalones cortos de color blanco como pijama, noto su piel erizada y se que tiene frío.

- Deberías volver a la c- Le empiezo a decir.

-Ya se que no quieres contarle a los demás  por qué no puedes dormir, pero ¿a mi tampoco?- Sus ojos violetas me miran dolidos- Creí que confiabas en mi...- Su voz se apaga a medida que termina  de hablar. Sin poder evitarlo y consciente de que me pueda llevar un golpe la rodeo con mis brazos por detrás. Noelle apoya su cuerpo en mi pecho y veo como algunas lágrimas caen de sus ojos.

- Noelle yo...No quiero hacerte daño- Le confieso. Ella niega con la cabeza.

-¿Daño? Asta... si es por lo que paso en el bosque de las brujas no tien- No puedo escucharla.

- Si tengo.- La corto- Tampoco creías  que podría hacerte daño en ese momento y yo... ¡Noelle te maté! Por Dios si no llega a ser por Vanessa... - Aprieto mis puños incapaz de terminar la frase. No lo entiende, por mucho que ella confíe en mi si no puedo protegerla... ¿De qué sirve?

- Eres un idiota- Murmura a la vez que se gira para quedar frente a mi, sus manos acarician mi mejilla y limpian una lágrima que ni se de donde ha salido. Me abraza, y siento algo increíble, que hace que por un segundo me olvide de mis penas.- ¿Por eso no puedes dormir?¿Por que me harás daño?- Pregunta. Yo la envuelvo con mis brazos y la acerco más a mi deseando que este momento dure para siempre.

-Pesadillas- Murmuró. La siento suspirar. Estamos así por un tiempo, no sabría decir cuanto, pero se me hace muy corto.

-Ven- Me ordena mientras me coge de la mano y me lleva de vuelta a los dormitorios. Yo la sigo sin decir nada.

Pasamos por mi habitación pero no se detiene, ahí es donde me doy cuenta de que me está llevando a la suya.

- Noelle...- No se muy bien que decirle.

- Cállate- Me susurra, aun con la poca luz que entra por la ventana veo el sonrojo que tiñe sus mejillas, es adorable.

- Ven aquí - Me pide mientras se sienta en la cama, yo le obedezco.
Cuando me siento, sus brazos vuelven  a rodearme y sin dudarlo le correspondo. Mi mano viaja hasta su pelo suelto.

- No me vas a hacer daño. ¿Vale? - Me dice mientra se separa. No le contesto. Quisiera creerlo pero me resulta tan difícil. Acaricio con suavidad su mejilla, la cual parece hecha de terciopelo.
Suspiro mientras apoyo mi frente en la suya.- Tu sabes que nunca me harías daño intencionalmente tonto...Deja de darle vueltas a algo que nunca pasó, hazlo por mi...- Pide. Sus labios se mueven de forma muy tentadora a medida que pronuncia esas palabras y sin poder contenerme, la beso.

La beso con todo lo que llevo. No se me dan muy bien las palabras, pero quiero que sepa que me importa, que yo...que yo ¡joder la quiero!... y no quiero hacerle daño.

Noelle tarda un poco en reaccionar pero me devuelve el beso, es increíble sentir como sus labios se mueven al compás de los míos. La acerco mas a mi y la siento en mis piernas sin dejar de besarla. Cuando siento que ya no puede más me separo y vuelvo a apoyar mi frente contra la suya. 

Jadea en busca de aire, yo igual.

Tengo la mente en blanco, solo veo sus ojos mirándome.

¿Y ahora qué?

Antes de poder pensar en que decir, es Noelle la que vuelve a juntar nuestros labios, y es malditamente maravilloso.

Este beso finaliza mas calmado que el otro. Pero me quedo con la misma sensación.

- Siempre te protegeré, no voy a permitir que nadie, ni mucho menos yo, te haga daño.- Sentencio después de unos segundos de silencio. Como respuesta ella me abraza y provoca que ambos nos tumbemos en la cama. Me acomodo y procuro que ella este bien, su cabeza descansa en mi pecho desnudo y puedo sentir su mejilla caliente. Definitivamente Noelle es muy hermosa.

La abrazo mas a mi y le acaricio el pelo, me resulta un poco raro estar tan calmado.

- Ahora duerme, yo vigilaré que no tengas pesadillas, así  que descansa, que lo necesitas. - Murmura mientras sus ojos se cierran y inconscientemente se acomoda mas en mi pecho. Sonrió y le doy un beso en la cabeza.

- Buenas noches Noelle.

- Buenas noches Bakaasta.

Y por primera vez en cinco días, pude dormir sin despertarme  por una pesadilla.