Versos Rotos.

Lo que quiero ser

Las ventanas son atajos a la felicidad cuando la puerta está atrancada.

Somos eso que los demás esperan de nosotros pero,
¿Que esperamos de nosotros mismos? Nos movemos por sueños ajenos a los nuestros sin darnos cuenta de que, en realidad, no tienen la salida que nosotros esperábamos o la meta que en realidad queríamos cumplir.
Aprobamos exámenes, pasamos de curso conseguimos trabajo y ganamos dinero, pero ¿nos planteamos si es eso lo que queremos de verdad? ¿O hacemos lo que la sociedad nos dice que hagamos?
Sinceramente pienso que en el mundo hace falta un poco de todo, no ser seguidores de una sociedad que, en el mejor de los casos, llegará a tener un buen piso y a estar despreocupado de sus gastos.
Siento que en la vida hay que aspirar a ser el mejor, no en cualquier cosa, si no, en aquello que te gusta de verdad, mi sueño es ser reconocida por lo que hago bien y que se me recuerde cuando yo ya no esté, pero ni si quiera se que es eso que se me da tan bien como para llegar a tal nivel, a día de hoy casi nadie llega a tener tal importancia como para vivir hasta después de muerto. Pero un sueño es un sueño hasta para una niña de 17 años que escribe en un móvil con la esperanza de que esto llegue de verdad a alguien y poder emprender mi sueño.

No somos más que lo que los demás hacen que seamos. O por lo menos las personas de mente creativa, los demás llevan otras normas supongo.