Cuando te dejé ir

28 1 0
                                    

Cada vez que empiezo a escribir, me repito lo mismo, no escribiré sobre ti. No lo haré, me lo prometo. Ojalá algún día pueda llegar a hacerlo cierto, pero de verdad, no puedo. ¿Nunca os habéis quedado con esa cosa ahí que jamas desaparecerá porque seguís amando a esa persona, aunque hayan pasado años? Pues os juro, de verdad, que si alguna vez hubiera sabido todo lo que me destrozaría el corazón su ausencia, jamás le hubiera herido.
Si alguna vez lo hice, si alguna vez llegas a leer esto, si alguna vez volvemos apostar por lo nuestro, si alguna vez nos encontramos por la calle y nos saludamos con dos besos comiéndonos la boca con nuestras miradas, si alguna vez vuelves a pasar (rara vez, jamás se tiene la oportunidad de conseguir al amor de tu vida dos veces) si alguna vez pasa todo lo que soñamos para "alguna vez" si alguna vez te vuelvo a besar, créeme que no vuelvo a destrozarme el corazón como lo hice al dejarte ir.
Cuando te deje ir, sabia muy bien porque lo hacía; quería verte feliz. Quería verte cumpliendo tus metas, tus sueños, quería hablarte un día y que me hablases con la misma dulzura que cuando me hablabas. Quería verte soñar, y a mi lado no era justo, no lo hacías. No podía permitirme no verte feliz.
Cuando te deje ir, también pensé en otras razones, me dije; "si le dejas ir te olvidarás, te olvidarás de todo a medida que el tiempo pase, encontrarás a otra persona y le olvidarás" no estaba convencida de ese argumento que me machaba la cabeza día si y día también. Pero al final, eran más fuertes mis ganas de que todas las peleas terminasen y meses después pudiésemos tener una amistad aunque te amase, que seguir peleándonos y haciéndolo más tóxico. Y te deje ir, prohibiéndome enviar cualquier tipo de mensaje, mordiéndome los labios cada vez que me hablabas y yo moría al ver que tenías el mínimo interés por arreglar algo. Quería dejarte ser feliz. ¿De verdad ibas a serlo conmigo? Jamás fui feliz conmigo, tú no ibas a poder serlo por mi.
Esos días me dije..."tienes que ser fuerte, vas a olvidarle, vas a dejarle de hablar y va a irse". Cada mensaje lo releía mil veces, intentando entender cómo podíamos haber sido tan idiotas de llegar al extremo de odiarnos cuando nos amábamos, y si tú, esa persona que sigue en mi corazón meses más tarde, llegas a leer esto, ¿sabes porque nos seguimos amando? Por que cuando te deje ir, cuando vi vídeos tuyos con tus amigxs, cuando vi lo feliz que estabas, cuando oí una canción de una película que justo tú me habías hecho ver un mes antes, cuando vi eso, fui más feliz todavía. Cuando te vi feliz, sonriente, siendo la persona más preciosa de mi mundo, entonces no entendí porque en algún momento se me había ocurrido prohibirte algo. Y sí, fui una persona irreconocible para mi, jamás le reproché nunca a nadie que no estuviera a mi lado siempre, pero contigo, me volví completamente loca, obviando que tú tenías una vida aparte, que yo formaba parte de ella pero también tenías derecho a ser feliz. Lo que más me duele es que lo he entendido todo meses después, meses en los que ya no recuerdas mi nombre, meses en los que tu nombre sigue retumbando mi cabeza como si no hubiese absolutamente nadie más en este mundo. Y de verdad, espero con todo mi corazón, que te estén haciendo muy feliz, yo siempre recordaré lo que tú me diste a mi. No habrá espacio en mi corazón para nadie más porque tú clavaste muy fuerte esa huella.
Había una canción que siempre te cantaba, y tú escuchabas con demasiada atención, (como siempre, algo que te hacía más especial aún) la canción decía "ya no suena en tu boca ni mi nombre, y yo sigo preguntando algún por que..."

Y ahora, más que nunca lo entiendo todo .
Yo no entendía muy bien porque llegabas a hacer todo lo que me apetecía, quería, o sentía, pero sentía que ese punto era el necesario para que una relación funcionase perfectamente, por ello, te exigía, discutía, y te trataba mal, llegando a no entender que sobre todo existe la libertad de expresión, y el sentido común que quizá por aquellas épocas solía faltarme. Lo siento por haber sido tan desordenada emocionalmente y haberte hecho perder un poco el equilibrio en tu vida, sin tener en cuenta que tú no tenías culpa de nada. Te pido mil lo sientos por seguir hablando de ti cuando me dije, y te escribí que jamás lo haría. Pero no puedo más. Retumbas en mi cabeza de vez en cuando con demasiada fuerza, y me es imposible no escribirte una canción de amor cuando suena tu voz en la canción que escucho. Cada melodía que suena de Manuel Carrasco me recuerda a que tú y yo un día fuimos demasiado feliz sin saberlo. Me recuerda a tus manos agarradas a las mías, y tú diciéndome que sudaba. No puedes creerte lo mucho que me llego a latir el corazón en el momento en el que me besabas. Gracias por hacerme sentir el amor, gracias por ser lo que fuiste, por escuchar mis demonios, por ser parte de mi familia.
Gracias por aguantarme tanto.
A veces me escriben "Alba..." y inevitablemente me acuerdo de cómo nos despedíamos tú y yo cada noche. Espero que me sigas escuchando en alguna canción de Vanesa. Te amo...

"Quisiera a veces escaparme y volar lejos, para encontrarme como aquella vez contigo..."

Nadie dijo que fuera facíl, pero solo a los valientes les gusta lo dificíl.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora