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Capítulo 1:
" Cartas De Un Fan "

N A R R A D O R A

Sus aburridas orbes camín se posaron en su plato de comida, no había provado ni un bocado desde que llegó su pedido, sin interés alguno tomó el frío tenedor para empezar a jugar con las verduras de su ensalada, su cara tenía una expresión neutral que pocas veces se veía, desde hacé más de una hora que no hablaba más de cinco palabras, no hacía gestos o señas, su mente parecía estár en cualquier lado menos en ese lugar, la cafetería de la disquera dónde trabaja y graba con otros utaites, su acompañante, un chico de cabellera rosa y ojos del mísmo color, dejó hablarle para mirarlo con atención.

¿En que tanto pensaba ese lindo angel?, ¿Que lo tenía de esa manera?, ¿Tan grave era el asunto para dejarlo así? Esas y más preguntas se plantearon en la rosada cabeza del chico, empezó a recordar situaciones las cuales podrían ser la razón de su humor, luego empezó a sospechar de personas, compañeros de trabajo, gente cercana o familiares al de orbes carmín, parecía que nada daba resultado hasta que un nombré paso por su cabeza.

— ¿Tu y Soraru se pelearon? —La pregunta o más bién el nombré del azabache sacó al de orbes rubíes de su burbuja.

— ¿EH? ¡No!... No puede ser eso posible, no nos hemos hablado más haya del trabajó —Contestó con cierto tono de tristeza, el cual trato de disimular pero esto fue notado por el de ojos rosas.

— ¿Es por qué dijó que dejara de ser utaite cuándo ya haya cumplido los 30?

La pregunta parecía haber dado en el clavó pués el albino hagacho la cabeza, soltó un suspiró y volvió a verlo a los ojos con tranquilidad fingida.

— Sobre eso, ¿Quién soy pará cuestionar una decisión así? No soy más que su amigo y como tal debo de apoyarlo en las decisiones que tome —Sonrió con serenidad mientras dejaba de jugar con su comida.

El albino sentía un profundo dolor en el pecho, un agrio sabor se apoderaba de su paladar, fingir era duró, lo sabía desde que era pequeño, sabía lo difícil que era actuar pero aún así lo hacía sín importar cuánto doliera, porque el era así, una persona que ocultaba sus malos pensamientos para entrar al escenario que el mundo le daba para fingir ser un chico alegré.

— Estás muy tranquilo con respecto a ésto —

" Cómo me gustaría que en realidad fuera así "

Pensó el de orbes carmín con tristeza, tristeza que inmediatamente trató de alejar para que no arruinará su actuación.

El albino al temer que seguir con la conversación cambió de tema.

[.:*☆.:*]

Leyó una ves más lo que había escrito en la blanca hoja de papel, trató de hacer su mejor letra, trató de transpasar sus sentimientos en aquella hoja de papel, hizó su mejor esfuerzo, pero aun con todo ésto no era suficiente, sentía que lo que escribia era simple basura, un sentimiento de frustración se apodero del chico de orbes escarlata, tomo el lapicero y rayó sobre la carta, la arrugó para luego tirarla en el suelo juntó con otras hojas, con enojó soltó el lapicero, posó ambas manos en su cara, trató de controlar su humor.

¿Como era posible que una simple carta lo pusiera de esa manera?

Tal ves la principal razón de su desconfianza al escribir la carta era que su amado lo leería, tenía miedo de que al leer la carta descubriera que era el quién escribió éso, miedo a que cuándo transpase sus sentimientos en aquella carta deje de ser su amigo. Tal ves exageraba, pero el así lo sentía, jamás se había sentido tán desconfiado al escribir, ni si quiera cuándo escribía sus canciones sabiendo que muchas personas escucharian su voz, sus sentimientos transmitidos através de aquellas notas musicales, entonces ¿Porque se acobardaba? Era tonto, lo sabía.

Solto el segundo suspiró del día, se levantó de su lugar para ir ala cocina, tenía que alimentar a su pequeña iroha.

[.:*☆.:*]


Gracias a que la noticia de que Soraru se retiraría se expandió por los medios sociales al azabache no le paraban de llegarle cartas y regalos por paquetería, las fans hacían cartas por médio de twitter agradeciéndole al de ojos zafiro por tantos años siendo un buen utaite cantando, como era de esperarse el albino se iba a quedar a tras.

" A éste punto es imposible volver atrás "

Se recordó a si mísmo el de orbes escarlatas, hace ya dos días le había entregado su primera carta a su amado escribiendole como un fan más que se sentía triste por la notícia del retiró de su ídolo, cerró sus ojos tratando de tranquilizarse pues sus manos no dejaban de temblar.

Con cuidado dejo la carta en el casillero de zapatos del azabache, fue a su casillero y cambió sus zapatos, su hora de trabajó había acabado, para sorpresa de sus compañeros fue el primero en ir se, normalmente el se quedaba hasta tarde revisando una y otra vez la canción, pues su inseguridad a veces no le dejaba sadisfecho con su trabajó, comi era en el casó de la carta en donde se paso toda una semana intentando escribir la carta "perfecto", en ese tiempo acumuló muchas cartas dedicadas a su tsundere amigo, incluso ya tenía un cajón para esas cartas.

Salió de ese lugar con su paragüas en mano, pues desde las tres de la tarde había empezado a llover, entré momentos se calmaba pero no dejaba de llover en ningún momento, cerró la puerta para seguir caminando hasta la sala de recepción la cuál estába serca de aquél lugar.

Todo aquéllo que hizó el albino fue observando por los ojos azules de su mejor amigo.

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Gracias Por Leer★

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