Homofóbico - VKOOK +18

/Cap 3/

- Tumbado, en mis piernas, ya.

-Q-que? P-para que? -a pesar de ser Virgen, el menor sabía qué significaban esas palabras, pero no estaba seguro de que eso fuese a pasar.

-Dije, ya, joder!!

Jungkook se tumbó en las piernas de Taehyung mientras temblaba.

-  Sabes contar hasta 10, ¿verdad, Kookie?

- Si hyung, claro que se contar -habló algo molesto-

- Bien, pues empieza

Taehyung dio una leve nalgada en el trasero de el menor, y sonrió de medio lado al poder apreciar el sonrojo de este.

- A-ay! Q-que haces?!?

El mayor volvió a estrellar su mano contra las nalgas ajenas,esta vez más fuerte.

- Dije que empezases a contar, ¿por que número vamos, Kookie?

- D-dos...

Así siguió Taehyung hasta el diez, dejando el trasero de Jungkook completamente rojo, con marcas de su gran mano en ambas nalgas. A los ojos de Taehyung, Jungkook había escarmentado, pero la realidad era que el menor quería más...

/ En la mañana siguiente/

Taehyung se encontraba desayunando en la cocina, cuando Jungkook bajó con su pijama de conejitos, el cual estaba compuesto por una camiseta blanca con el estampado de un conejito en el centro, y un pantalón rosa. Taehyung se percató de que el pantalón tenía una colita de conejito en la parte de la entrada de el menor.

- Buenos días, Jungkook - Saludó el mayor-

-... 

Kook no le contestó, se le hacía raro hablar con él después de lo ocurrido la noche anterior.

- No seas maleducado, Kook

-... -desvió la mirada y se cruzó de brazos-

Tae se levantó y se acercó al contrario, lo que provocó que el más pequeño agachase la cabeza

- No me digas que vas a hacer una rabieta -rió el mayor, mientras levantaba la cabeza de el más bajo- Debes contestarles a tus mayores, Kook

Jungkook estaba confuso, ¿no era que Taehyung lo odiaba por ser homosexual? Llevaba tres días mirándolo con desprecio, haciéndole sentir inferior e hiriéndolo, ¿a que se debía ese cambio de actitud tan repentino? Ni el propio Taehyung lo sabía.

Las mejillas de el pequeño, cobraban poco a poco un tono rojizo, y se calentaban a medida que eso pasaba. Taehyung se dio cuenta, pues era demasiado obvio.

-Que te pasa, Conejito? Estás nervioso? -rió ronco el mayor-

-...

-Que dije de contestarle a tus mayores, Kook? 

-Y-yo... 

Las palabras no salían de su boca, tenía un nudo en la garganta, y sentía que, si contestaba algo indebido, recibiría el mismo castigo de la noche anterior... entonces... debía decir alguna cosa mala? Al fin y al cabo, el pequeño pero travieso Kook, se había divertido con las inesperada visita de Taehyung

-Tu que?

El pequeño se mordió la lengua, no abusaría de el conocimiento que ahora poseía, y sería sincero; quizás, adornando de algún modo su frase, conseguiría más atención de Kim, pues era lo único que quería.

-Y-yo... l-lo siento hyung...~ y-y si... e-estoy nerviosito... h-hyung es muy lindo y eso ha-hace que... que "conejito" se ponga m-muy tímido...

Perfecto, realmente perfecto. Le había salido genial. Kook si sentía eso, pero el tono empleado y los pucheros que acompañaban la frase, lo hacían ver infantil,tierno e inocente.

Por otro lado, Taehyung se estaba volviendo loco... no, Jungkook lo estaba volviendo loco. El joven que detestaba a los homosexuales, ahora, se sentía atraído por una persona de su mismo sexo.

Fue entonces cuando el joven Kim, lo hizo. Alzó a Jungkook en el aire y lo subió a la encimera, sentándolo ahí, (pues la diferencia de altura era notable) para posteriormente, besarlo, aún sin saber muy bien lo que estaba haciendo.

En cuanto se separaron de el beso, Taehyung se fue hacia la habitación, como si nada hubiera pasado.Mientras, Kook estaba paralizado, con la cara completamente sonrojado, sus manos sudaban y sus ojos estaban abiertos como platos.

- P-pero qué...? -susurró el pequeño Jeon,  para luego esbozar una leve sonrisa-

No esperaba que su truco tuviera un efecto tan inmediato, pero le agradó comprobar que así era.

El resto de la mañana, transcurrió de una forma bastante inusual, donde quiera que fuese Jungkook, ahí estaba Taehyung; observándole, atento a cada movimiento de el menor, solo una pregunta pasaba por la cabeza de ambos chicos: " ¿por que me gusta tanto?"