XXVII

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S

iento que mi corazón se romperá, estoy pensando en cómo hablar con el, que decirle, como reaccionar, nuevamente imaginó situaciones posibles, pero ninguna lleva por el buen camino, todas son desastrosas y terminan conmigo llorando o con DaeHyun yéndose o conmigo, pero esta vez gritando como si estuviera loco.

Tal vez debería dedicarme solo a las modas porque esto de inventar historias es malísimo para mi autoestima, sin mencionar que en mis historias posibles el protagonista es igual que yo, un chico histérico e indeciso, que no sabe qué hacer con su vida tan desastrosa. ¿Qué habrá visto DaeHyun en mí?

Ya paso una hora desde que DaeHyun regreso solo y Plue esta con él. Supongo que ambos están en la sala y que ambos ya deben de estar dormidos, tengo miedo de bajar y encontrarlo despierto t que me haga hablar sobre el tema de que el se ira.

El hambre me está molestando, no e podido comer nada desde que cenamos con el viejo. El hambre al menos me mantiene ocupado pensando en otra cosa.

Mi cabeza me da vueltas y me reniego a mi mismo:

— Debes salir YoungJae no seas cobarde...

Despeino mi cabello y me obligo a mi mismo a hacerlo o al menos lo intentó.

— ¿Estara dormido?

Me pregunto su tendrá frío en la sala, ¿deberia llevarle una cobija?

Tal vez el piensa que no pertenece a esta casa porque no se molesto en venir a buscar una o siquiera en acercarse a mi cuarto, es como si buscara permiso para pasar, ¿acaso se siente como un invitado?

¡Deja de pensar tanto YoungJae!

Solo estas sacando conclusiones absurdas.

Me recuesto en mi cama y me cubrió con la manta hasta la cabeza, ¿que es esta maldito miedo que tengo? De repente siento como mi mundo se desmorona, estoy solo en mi cama y ni siquiera Plue esta aquí conmigo... Así sera a partir de ahora, ¿verdad? Solo sin nadie quien este a mi lado y que pueda ver ahora mismo debajo de las sabanas para reír como tontos por la oscuridad que eso provoca.. ¿Eso es lo que quiero? Dejar de ver esa tierna sonrisa que me provoca tantas cosas y pasar mis días rodeado de trabajo y con dos amigos que son los mejores, pero que no están siempre para mí ya que tienen vida propia.. ¡Aahh! ¡Maldición! ¡¿Acaso estoy teniendo miedo de morir solo como una vieja solterona?! No quiero que eso me suceda a mi, no quiero pensar esas cosas tan estúpidas ahora.

Son cosas triviales que muchas personas piensan, pero yo no puedo permitir pensarlas.

Debajo de la oscuridad de mi cana comienzo a patalear como un niño pequeño, estoy por gritar, pero en mitad de mi berrinche escucho su voz riendo:

— ¿Qué haces?¿Recordando cuando eras pequeño?

¡Maldicion! ¡¿que hace aquí?!

Aun debajo de las sabanas y matan respondo:

— N-no es eso solo estaba intentando acomodar las sabanas.

¿Que demonios acabo de decir? ¿Acaso tartamude?

— ¿Las sabanas?

Escuchó como ríe y yo me lamentó ya que no puede verme. Me golpeo mentalmente antes de responder:

— Si las sabanas estaban revueltas y no me di cuenta sino hasta el momento en el que me acosté.

Gran escusa YoungJae

Escucho sus pasos acercándose y antes de que me diera cuanta él apoya su mano aun lado de mi cabeza sobre la almohada, aún estoy debajo de las mantas así que no se que cara esta poniendo, siento su rodilla apoyándose a un lado de mi cintura, ¿que tan cerca estará de mi rostro?

𓏲࣪◜Amor, pídeme un favor' -En Edición-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora