Embarazo.

Damián Wayne solo miraba a través de esa ventana con su traje verde de sultán que lo hacía parecer líder de la liga de asecinos.

Sí señores, al parecer el cuarto Robin decidió dejarlo todo con tal de liderar el legado de su abuelo, entre esas cosas dejo a sus amigos y a su amada Rachel Rhort

La verdad hay veces que se arrepiente y se pregunta que habrá sido de ella, por lo que le a dicho Maya que por cierto estaba muy enojada por qué éste se fue sin avisar y dejando a Raven desconsolada lo recuerda....

—¡¿Cómo diablos se te ocurre irte sin avisar?!— dijo ella quien está tratando de safarse de su aferra de las dos manos pues ella estaba tratando de golpearlo. — Nos preocupaste a todos, ¡No tienes idea de lo que le has hecho pasar a Rachel! ¡No tuviste la decencia de ir u decirle; me voy terminamos o lo que diablos se te ocurra!—.

—Maya escucha... Esto es complicado y no dispuesto a volver. — Dijo soltandola.

—¡Mejor...! Así no te estorbas entre su relación con-....— de inmediato se tapa la boca dejan a Damián confundido.

—¿Con quién Maya?— pregunta.

—Con nadie...— dijo para que desapareciera y marcharse de ese frío lugar.

Sí, supo que su amada cuervo estaba en una relación que no sabía si todavía perdura pero no pudo evitar sentir algo de celos del pobre diablo que se atrevió a ocupar su lugar en el corazón de Rachel, pero que más daba fue él el que la dejo al fin y al cabo, él decidió dejarla, la hechicera merece ser del feliz ¿no?, aún que un pensamiento un poco egoísta fue que no quería que nadie la hiciera feliz más que él.

—¡Señor!— grito uno de sus sirvientes.

—¿Qué?— dijo secamente.

—Encontramos a unas mujeres... Extrañas... En nuestros terrenos— respondió el sirviente. 

«Seguramente es Maya, me preguntó que querrá?»

Pensó .

De inmediato fue a ver a la supuesta mujer extraña pero al llegar se sorprendió.

Era Maya pero no venían sola venía con Rachel en brazos, parecía débil, ambas eran apuntadas por distintas armás de sus guardias que estaban apunto de tírarles a balazos a ambas femeninas que parecían débiles.

—¡Un momento!—Grito Damián a sus guardias. —¡Bajen las armas!— ordenó.

Damián se acerca a ellas pero Maya no deja que él la agarre si no Maya...

—Yo estoy bien...— dijo manteniéndose fuerte sujetando a Rachel... — Pero Raven...

Damián solo le quita a Raven de sus brazos quien estaba más pálida de lo normal, no parecía ningún sangrado podría ser de su magia o salud...

Maya se desmayó en varios de uno de sus guardias.

—¿Qué pasó?— susurro para sí mismo  muy confundido — ¡Rápido adentro todos! ¡Hay que ir a la enfermería!.

♦

Damián solo estaba en espera, no pensó después de varios años ver a Raven, pero lo que más le llamó la atención fue el anillo de oro que ella traía en su mano izquierda, él quería pensar que ese anillo es todo menos uno de matrimonio, le dolía pensar que Raven ya lo había olvidado.

—Señor...—. salió un enfermero que pertenecía a su linaje. — la mujer... Está embarazada...— Soltó de último.

En ese momento Damián supo que ese anillo que Raven traía en su mano era de matrimonio.

—Pero... Está un poco mal de salud quiere que interrumpa el embarazo o...

Damián no escuchaba ya «Embarazo de quién, quien era el padre de ese niño en caminó o bastardo por qué por alguna razón sin sentido yo lo odio».

Dejando que los celos nublaran su juicio...

—Interrumpa el...

—¡Tú no decides eso Damián Wayne!— interrumpio una voz masculina que apareció rompiendo una pared muy molesto.

Damián estaba estático; Era su viejo amigo Jonathan Kent pero no primero que Damián pensó fue qué hacía él aquí.

Jon se acerca a él tomándolo de del cuello.

—¿¡Jon qué estás haciendo aquí!?— dijo con difícilmente pues el nuevo Súperman  está horcandolo

—¿Dónde está mi esposa? ¿dónde está Rachel?— pregunta muy enojado.

Damián se sorprende de manera terrible, ahora todo tiene sentido, Jon también tenía un anillo de oro en su mano izquierda, estaba molesto, dijo que dónde está su esposa, y la única conclusión fue Rachel su amor eterno estaba casada con uno de sus mejores amigos Jonathan Kent y están... Esperando un hijo...

—¡Jonathan!— aparece Maya deteniendo al híbrido.

—Maya...— voltea Jon soltando a Damián quién estaba tosiendo por el fuerte agarre que no lo dejaba respirar. —¿Dónde está? ¿Cómo está mi hijo?.

—¿Lo sabías?— Dijo Maya.

—Wonder Woman y Batman me lo acaban de decir, ¿Por qué ocultarme algo así?— pregunto él muy agitado.

—Raven quería que fuera una sorpresa— Sonrió.

—¿Por qué no me lo dijiste Maya? Hace dos años veniste y me reclamaste mi partida... Pero me mencionaste que... Raven salía con alguien ¿Era Jon?— Se levanta Damián. —Tú— apunta Damián a Jon — ¿Esperabas que me fuera para estar con ella verdad?

—No Damián, no es así.— Responde Jon.

—¡Entonces!— Grito Damián.

— Yo... — Jon miró a Maya. — bueno.. a los 17 cuando te fuiste Raven se vió muy preocupada pues era tu novia y yo pues tu amigo, pasaron 6 meses y Raven se rindió con todo el dolor y yo solo me indique hacer lo mismo— suspiro —Raven estaba demasiado dolida pues ella ya sabía que estabas aquí y no planeadas regresar pues el mismo Batman lo dijo porque bueno eras su hijo y todo ello, pasaron dos años y... Buenos nos hicimos los mejores amigos, estuvimos así durante 2 años, después nos enamoramos y decidimos iniciar una relación, no pensamos que fuera a funcionar, 6 años después nos casamos y bueno supongo que Maya se le escapó decirte que Raven estaba en una relación, una relación que mantiene conmigo y ahora supongo que ya debes saber que estamos esperando un hijo después de 2 años de casados—  Dijo, a pesar de que Jonathan ya es un adulto mayor aún guarda esa pequeña inocencia que traía consigo desde niño.

Damián no pudo evitar sentir celos e envidia por su amigo, Jon podría tener un futuro feliz pues... Está casado y esperando un hijo de la mujer que ama.

Damián lo supo... Raven no hiba a esperarlo, al final ella se casó y se enamoró de otro hombre...

Lo pudo comprobar cuando despertó y lo primero que dijo la mujer oscura fue el nombre de Jonathan.