ONE SHOT- Parejas de Naruto

(NejiTen) ♥ Te visitaré en tus sueños

-¡La juventud florece en ustedes, mis jóvenes pupilos!- Gritó Gai-Sensei, apoyándose en sus brazos.

Han pasado dos meses desde que finalizó la cuarta guerra ninja y desde entonces Konoha como el resto de las naciones siguen en su tarea de reconstruir el territorio que fue destrozado.

La mayoría de los Jōnin, Genin y Chūnin han sido mandados a misiones para ayudar a construir, levantar escombros o simplemente para servir de apoyo en las cosas que se requieran.
Luego de que Gai-Sensei peleó con Madara y terminó sumamente malherido, el hombre quedó imposibilitado de seguir realizando misiones, por lo que ahora su equipo, siendo sólo de dos integrantes, pues Neji también había fallecido, era enviado a ayudar en lo que pudieran.

-¡¿Guy-Sensei, deberíamos darle 200 vueltas a toda Konoha para celebrar que pudimos completar la misión como se debía?!- Ofreció Lee, con el entusiasmo que siempre lo caracterizaba.

-¡Si tanta energía tienes todavía, deberías ocuparla para ayudar a reconstruir la aldea!- Le gritó TenTen, siendo un poco más brusca de lo que quería. –L-Lo siento por haberte gritado, Lee... Me voy a casa, estoy muy cansada.- Dijo la castaña, alejándose poco a poco de su maestro y amigo.

-¿Y el informe de la misión?- Preguntó el pelinegro menor, sin entender el poco entusiasmo de la joven.

-Lo siento pero ¿Podrías encargarte tú? No me siento muy bien hoy.- Dijo la chica, sin girarse a verlo. Por inercia siguió caminando por las calles y cuando menos se dio cuenta ya estaba frente a la puerta de su casa. –Tadaima~- Canturreó la joven, sin esperar que alguien le respondiera. A pesar de que su estómago gruñía de hambre, se sentía demasiado cansada para prepararse algo, por lo que simplemente se fue a su cama, donde se recostó, fijando la vista en el techo, quedándose en silencio.

-Neji, ¿El lugar donde estás ahora es lindo?- Preguntó la joven a la nada, mientras una lágrima se deslizaba por el rabillo de su ojo, seguida de otras más. -¿Por qué te tuviste que morir? ¿Sabes cuánta falta me haces?- Gritó la chica, cubriéndose el rostro con las manos y pegando las rodillas a su pecho, en un intento de silenciar los sollozos.

Nadie sabía los sentimientos que TenTen había guardado por su compañero de equipo. Neji siempre le pareció alguien sumamente interesante a la vez de inalcanzable, tal vez su personalidad era un poco fría, pero cuando pasabas tiempo con él lograbas descubrir que no era así, siempre era determinado y nunca se rendía. Aunque en un inicio y a pesar de ser compañeros de equipo no hablaban mucho, el tiempo se fue encargando de hacerlos más cercanos, hasta el punto en que ambos se podían reír juntos, charlar de cosas triviales y... de enamorarse, aunque eso sólo fuera unilateral.

La joven limpió las lágrimas de su rostro y se arropó con las cobijas de su cama, esperando a que el sueño se apoderara de ella.

El sonido del despertador parecía que iba a partir la cabeza de TenTen en dos. Sin abrir los ojos, la chica estiró su brazo en un intento de apagarlo, pero por más que tentaba a ciegas, no lograba encontrar el reloj.

-¿Te diviertes?- Escuchó que alguien le preguntaba, haciendo que abriera los ojos de inmediato, para encontrarse con Neji frente a ella.

-N-N-Neji qué...- Preguntó la mujer, sin poder creer lo que estaba viendo. Quitó su mano del rostro del joven, pues es lo que había estado tocando hasta ése momento y se sentó en lo que se suponía debía ser su cama, pues ahora estaba acostada en un campo lleno de girasoles. -¿Dónde estoy?- Siguió preguntando la chica, mirando a su alrededor. El joven por su parte no habló, simplemente se puso de pie y la miró con una sonrisa.

-Ven conmigo.- Dijo Neji, tendiéndole una mano. La castaña dudó un poco, ¿Acaso esto en un genjutsu? Se preguntó, pero no se sentía como si realmente fuera uno, por lo que luego de pensarlo unos segundos, aceptó la mano que le tendía el joven, el cual empezó a caminar con ella a su lado.

-¿Gai-Sensei y Lee lo están haciendo bien?- Preguntó el pelilargo, luego de estar un rato en silencio.

-Sí. Gai-Sensei no puede caminar, pero eso no ha detenido a su juventud y Lee... Bueno, Lee sigue siendo Lee.- Contestó TenTen con una sonrisa.

-¿Y tú?- Preguntó Neji, tirando suavemente de la mano que tenía enlazada con la chica para indicarle que se detuviera.

-Pues, yo... ¡Claro que también lo estoy haciendo bien! Tenemos muchas misiones, reconstruir Konoha no es una tarea fácil sabes. El cargar las tablas de madera es complicado, pero entreno duro para que cada vez sea más fácil...- La joven cada vez hablaba más rápido, atorándose un poco con sus palabras.

-TenTen...-

-Además, Kakashi-sensei se volvió Hokage, han pasado muchas cosas desde que...- La castaña había comenzado a derramar lágrimas, pero no paraba de hablar, ni siquiera parecía ser consciente de que el joven le estaba pidiendo que se detuviera.

-TenTen...-

-También Lee y yo seguimos entrenando duro, él dice que...-

-TenTen, cierra la boca.- Dijo Neji, juntando sus labios con los de la joven, dejándola sorprendida. Luego de unos segundos, el chico alejó su rostro del de la mujer, la cual estaba ligeramente sonrojada. –TenTen, ya puedes abrir los ojos.- Susurró divertido el joven, viendo con dulzura a la chica, quien hizo lo que le pedían.

-¿Q-Qué fue eso?- Preguntó la castaña, aún con un poco de sorpresa.

-Eso se llama beso TenTen.- Contestó Neji, con una sonrisa provocando que la mencionada se volviera a sonrojar. –No digas que estás bien si no es verdad. Cuando te sientas mal cuéntale a Lee o a Hinata-sama. No te lo guardes todo para ti sola o harás que me preocupe.- Susurró el hombre, abrazando a la chica, quien respondió el contacto después de unos segundos.

-Te extraño mucho.- Dijo la castaña, enterrando su rostro en el pecho del joven, quien la apretó más a su cuerpo.

-Lo sé.-

-Es muy difícil seguir cuando sé que ya no estás ahí.- Sollozó la chica, apretando sus brazos en torno a la cintura del pelilargo.

-TenTen, escúchame.- Pidió Neji, alejando un poco a la joven para que sus ojos pudieran encontrase. –Yo siempre voy a seguir contigo. Siempre voy a estar para ti. Te visitaré en tus sueños siempre que te sientas triste- Aseguró el ojiplata, separándose por completo de la castaña.

-¡Neji!- Gritó TenTen, viendo como el joven era alejado de ella por una luz blanca. -¡Neji!- Volvió a gritar, echándose a correr en un intento de alcanzar al castaño.

-En tus sueños, TenTen.-

-¡NEJI!- Gritó la chica, despertándose de golpe. Conforme pasaron los segundos su corazón fue recuperando su ritmo habitual, mientras que la joven era más y más consciente de dónde estaba. –Sólo fue un sueño.- Susurró decepcionada, notando como las lágrimas comenzaban a acumularse de nuevo en sus ojos. Sintiéndose triste, desvió la mirada a su costado, quedándose sorprendida por lo que había en su cama.

-Un girasol- Susurró la joven, tomando la flor entre sus manos. –De verdad estuviste aquí, Neji.- Pensó TenTen, con una sonrisa en el rostro.

Wey, casi lloro, no mames ♥

Amo escribir sobre ésta pareja, siento que son super lindos y tiernos juntos♥

Espero que les haya gustado el Shot♥

Nos estamos leyendo♥