Boda en el fin del mundo

[Preámbulo]

      —Enciende el dispositivo, hijo. Vamos a recapitular por ahora.
      —Muy bien, pa'.
      (Entonces transmiten antiguas reproducciones a blanco y negro. Parecen ser realmente importantes.
      Lo son)
      —¡Hace más de 100 años del presente..., Robert H. Goddard fue quien lanzó el primer cohete a combustible líquido!
      (Son reportajes escuchándose con eco a gran volumen, mientras se revelan cuadro por cuadro igual que fotografías)
      —En 1944, el cohete V-2, del cual se derivan todos los cohetes espaciales  modernos, es desarrollado en Alemania como arma a finales de la Segunda Guerra Mundial.
      (Las voces manejan distorsión auditiva; son demasiado antiguas, hay diferentes clases de voces: hombres, mujeres, ancianos)
      —1957; la URSS lanza el Sputnik 1. ¡El primer satélite espacial!
      —...Laika es el primer perro, y criatura viva existente del Planeta Tierra, en ir al espacio.
      —...Ella viajó a bordo del satélite Sputnik 2.
      —1958; se lanza el primer satélite artificial de EUA, el Explorer 1.
      —1959; Sonda soviética Luna 1, primera en dejar la órbita terrestre.
      —1960; es lanzado el primer satélite meteorológico, TIROS 1. Y en este mismo año, un concepto formulado tal y como se conoce hoy en día de un «ascensor espacial» se escucha de un ingeniero ruso.
      —Yuri Artsutanov. Yuri Artsutanov —se oyó con retumbo—. Sin embargo, la idea ya había sido planteada.
      —...No existía suficiente tecnología para probarlo.
      —Año 1967; el primer satélite de comunicación exitoso, el Telstar 1, manda las primeras imágenes de TV directas de EUA a Europa.               
      —1964; primera nave diseñada para tres tripulantes; el Voskhod 1.
      —1968. Aún recuerdo ese año. Aquí se estrena la cinta 2001: Odisea del Espacio. Todavía cuando a muchos los confundía el tema, mostraba una visión científica fiel de varios aspectos de vivir y viajar en el espacio.
      —...la URSS lanza la primera estación espacial; Salyut 1. 1971.
      —1973... ¡Agreguemos color a la cinta!
      —...se pone en órbita la primera estación espacial de EUA, Skylab.
      —1986... ¡Qué colores...! Me recuerda a la llegada del hombre a la Luna.
      —...se lanzó la primera parte de la estación espacial rusa. Mir.
      —Nueve años tarde, regresa el cosmonauta ruso Valeri Poliakov a la Tierra, luego de estar 438 días en el espacio a bordo ésta estación.
      Regresa a salvo.
      Regresa.
      A salvo.
      Regresa.
      (Continúan menciones honorificas de las décadas pasadas. No se mencionó a México con tanto orgullo durante la mayor parte de visto «documental». Hasta que el momento justo llegó)
      —¿Y dónde estamos nosotros? —preguntó aquella inocente voz.
      —Ahora. Hasta que apareció un buen número de compatriotas y, entonces todo cambió...
      Tuvimos la oportunidad de cambiar al mundo.
      Lo mejoramos, hijo. En serio —en un tono jubiloso.
      En verdad, lo mejoramos...
      (Y ahora es posible observar... a un equipo de astronautas sin igual. Ellos usan trajes especiales color vino metálico oscurecido, con parches de misión respectivos, en hombros y deltoides; no hay ninguno de ellos que no esté enorgullecido al pórtalo; hechos de oro, el escudo nacional es resplandeciente, y siegan de entre los tres fastuosos colores patrios a la humanidad espectadora. Son imposibles de olvidar.
      Prosigue el documental. Esta fue la historia antes de la gran historia. Los héroes que no irían al espacio, sino los que pusieron el mejor de los ejemplos, en general)
      —¡2018! 2018... —al unísono, místicamente repercutió. Fue la voz de un joven emocionado. Y al final susurró de nuevo la fecha: —2018.
      —2018; aquí fue cuándo inició.
      (Ya las voces cronistas se oyen con claridad. La transmisión mejoró su calidad)
      —Toda nube se despejó. El universo supo que existíamos.
      Finalmente, conocí el cielo cristalino...
      (De blanco al negro se filtraron escenas. Enseguida, después de ver el arcoíris proyectado a través del prisma, y de resguardar el futuro en cualquier puerta, nació posteriormente una generación holográfica)
      —Inicia el proyecto Puente Espacial...Puente espacial —hubo eco.
      Lo presenta un hombre de la tercera edad, imponente, sin necesidad de mostrar su persona. Usó algún micrófono rimbombante o teatral:
      —...Un puente a donde se conecten dos atmósferas por completo distintas e incompatibles; con el propósito de exiliar toda la basura existente. Cualquier residuo unánime generado por el ser humano.
      (La melodía acompañante, ha sido definición de legendario)
      Año 2029:
      Astrofísicos, Científicos, Arquitectos, e Ingenieros, compatriotas y no compatriotas, lo mejor de lo mejor de cada rincón del globo, y además una reconocida escritora a nivel internacional, construyen y levantan al primer Ascensor Espacial de la historia, ubicándose cerca de la Isla Pinta, Galápagos, en Ecuador. Fue edificada una plataforma oceánica, lo suficientemente magnánima, invulnerable, para poder mantenerlo firme. 
      Año 2032:
      Ocurre un declive en el mundo. Una nueva plaga azota al mundo otra vez.
      Tiempo después, se reconstruyó la civilización. Tal y como antes lo hicimos.
      2039. El presente:
      —Disímiles años volaron. «Pasado y Futuro» se volvieron palabras confinadas. Anacrónicas e interfectas. Todo parece actualizado. Y el ser humano ocasionalmente aprende con suma facilidad. No obstante, continuaron esos viajes al espacio... hacia el lugar de donde la vida provino.