Capitulo Tres

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Apenas llegó a casa y corrió directamente a su habitación ignorando todo a su alrededor, simplemente se echó a llorar en su cama tratando de encontrar consuelo entre sus sábanas dejándose caer en un profundo sueño.

Despertó al día siguiente desorientado, no creyendo lo que le pasó la tarde anterior.


-Cariño, ¿estás bien? Me dejaste muy preocupada cuando llegaste, note un olor raro, ¿todo bien mi amor?-


Y ahí estaba su amorosa madre yume, siempre tan persuasiva cuando se trataba de él, lo que le aterraba, era que pudiera descubrir lo que le pasó, y si le contaba a su mamá Kushina no quería ni imaginar lo que pasaría, pero mentalmente no tenía ganas de ocultarlo, quería ser mimado y consolado por esas dos mujeres que tanto ama, pero no se sentía listo para soltarle esa bomba, tenía que relajarse un poco.


- E- estoy bien mamá, hoy no iré a la facultad, me siento mal, me quedaré a dormir hoy- trato de que su voz no saliera temblorosa, o que se le fuera a quebrar de un momento a otro, no contaba con la fuerza para mantener por el momento, lo que le sucedió oculto a su mamá yume por mucho tiempo.

-¿Te sientes mal? ¿no quieres ir al médico?-

- No mamá todo está bien-

-De acuerdo cariño, el desayuno está listo, si quieres comer, me dices cielo-

-Claro mamá, no te preocupes-
Y de nueva cuenta se soltó llorando, se sentía sucio, se daba asco así mismo, duro dos horas dentro de su regadera bajo el chorro de agua pero por más que trataba y tallaba su piel hasta dejarla casi sangrando no podía sacar de su cuerpo ni de su mente la forma en que Sasuke lo violento.

El hambre ya hacia mella en él así que no le quedó de otra más que ir a la cocina y prepararse algo ya que la hora del desayuno había pasado hace mucho tiempo y si no mal recuerda su mamá Kushina ya debería de estar en casa y no tenía el valor para míralas a ambas a la cara, tenía tanto miedo de la reacción de sus mamás qué consideró quedarse para siempre encerrado en su cuarto pero sabía que eso era una mera fantasía tenía que enfrentar y dar la cara al mundo real incluso volver a verle la cara a Sasuke en algún momento pero él lo evitaría a toda costa.

Y cómo lo suponía su mamá yume y su mamá Kushina estaban poniendo la mesa para la comida Así que no podía ser de otra manera más que simplemente enfrentarse a ellas así que con miedo y vergüenza entro a la cocina.

-Mami- sus dos mamás le pusieron atención a Naruto en el momento en que entró a la cocina su mamá yume se le hizo muy extraño que la llamara mami ya que él solamente la llamaba de esa manera cuando tenía miedo y eso lo dejó de hacer cuando cumplió seis años.

-Cariño, ¿todo está bien?- es ahí donde se encendieron las alarmas de yume, ya que conocía a Naruto como la palma de su mano, sabía que algo iba mal

Sin poder evitarlo los ojos de Naruto se llenaron de lágrimas dejándose caer en el suelo del comedor, agarrándose fuertemente de su camisa

-Perdón, per-perdónenme, les eh fallado y ya no las puedo ver a la cara-

Kushina y Yume se alarmaron en el momento en que su retoño se desplomo en un mar de lágrimas en el piso de la cocina, ambas se acercaron y lo envolvieron en un cálido abrazo.

-Cariño de que hablas- Yume se sentía más desesperada ya que Naruto solo hablaba entre llantos y no podía entenderle, y sentía como su niño se desmorona en sus brazos

Ninguna de las dos entendía a lo que Naruto se estaba refiriendo y para Kushina siendo el Alfa de su familia, se empezaba a desesperar ya que su instinto le decía que no estaba cumpliendo con su deber de proteger a su cachorro, y ese sentimiento le carcomía el alma.

-ME VIOLARON- y Naruto estallo más en lágrimas dejándose desparramar en el suelo, rasgando sus brazos con la intención de lastimarse, sacando sangre de estos, con la intención de sacar de su cuerpo la sensación de estar sucio.

Pain with LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora