AMOR ETERNO

El celo.

A la mañana siguiente, Dilan despertó y se fue a bañarse para ir a clases. Al salir de la ducha se vistió y bajó a la cocina pero tal parecía que estaba solo y recordó que su madre le dijo que se iría con su padre a un hotel por unos días para estar solos.

D: Quisiera tener una relación así -dijo Dilan un tanto triste-

Decidió no perder más tiempo y preparase el desayuno ya que llegaría tarde.

Cuando llegó al instituto, algo no andaba bien, se encontraba mareado, con mucho calor, su cuerpo no respondía y se sentía débil. En un momento ya estaba rodeado de Alfas que lo comían con la mirada y otros que lo manoseaban. Pero luego, un grito hizo que todos los Alfas se fueran y entonces aún con su vista borrosa pudo ver a Marcos pero este no estaba solo, más bien estaba con lo que parecía otro Alfa.

M: No se acerquen!!! Quien trate de toca a MI Omega, se las verá conmigo!
?: Deberías calmarte, ya entendieron el mensaje -dijo el alfa que lo acompañaba-
M: tu cállate! -dijo molesto- Dilan, estás en celo, debo sacarte de aquí.
D: n...no...por.. porf.. favor.
M: Calma, yo no soy ese alfa que te atacó esa vez, confía en mí. Yo te protejo.
D: mmmm...
M: ven, te sacaré de aquí.
?: Marcos, yo me voy, buena suerte amigo.
M: bien, adiós.

Una vez que el otro Alfa se fue,marcos levantó a Dilan quién se encontraba en el suelo debido a que sus piernas fallaron cuando comenzó su celo y lo cargó estilo princesa.

M: ¿dónde vives?
C: MARCOS!!!!!!!!!
M: No puede ser, Candela, ¿que pasa?
C: Dios! Dilan está en celo, agradezco ser beta.
D: Mar..Marcos...ah!...dam... dame...duro.
M: Dios! Si no te controlas juro que te violo aquí mismo.

Esa frase fue suficiente para hacer que Dilan temblara más y se controlara un poco.

C: Dilan vive a unas cuadras de aquí, yo te ayudo y luego me voy.
M: bien.

Candela guió a Marcos hasta la casa de Dilan pero se sorprendió cuando Dilan dijo (no muy claro) que sus padres no estaban y que se encontraba solo.

M: no te preocupes, yo lo cuido.
C: bien pero porfavor no te aproveches de él.
M: Claro que no!
C: bien.

Candela se fue y Marcos sacó las llaves de la casa que Dilan tenía en su bolsillo trasero y está de más decir que eso lo prendió mucho. Una vez dentro, el alfa llevó al Omega a la primera habitación que encontró al subir las escaleras y lo acostó.

M: ¿tienes supresores?
D: n..no
M: okey, estaré abajo, si necesitas algo solo dilo.
D: t...te..quiero..a...ti
M: escucha Dilan, créeme cuando te digo que me contengo de tirarme encima tuyo y oírte gemir mí nombre pero no lo haré y cuando tú celo pasé, te explicaré porqué.

Una vez dicho esto, Marcos salió de la habitación aún escuchando los gritos de Dilan pidiendo que lo haga suyo.

M: no lo haré pequeño, eres valioso para mí ahora que... -susurró- solo espero hacer las cosas bien.

Aunque su cuerpo pedía a gritos estar dentro de Dilan, su mente no dejaría que le hiciera daño.