-Cariño, ya tengo los boletos para irnos- dijo mi mama viéndome sentada en la mesa.
-Bien y cuando nos vamos?- dije entusiasmada.
-En 3 días- dijo- segura que quieres ir?- dijo.
-Si, no creo que en Italia también me secuestren- le dije.
-Esta bien- dijo acercándose.
-Pero y mi papa?.
-El tiene que descansar pero las enfermeras lo cuidarán.
-Y esta deacuerdo con el viaje?.
-Si, dice que no hay problema- dijo sonriendo.
-Bueno, en ese caso esta bien- le sonreí.
-Bueno cariño tengo que ir a la empresa, te veo luego- me dio un beso en la cabeza y se fue.
Me quede sentada aún en la mesa con el celular en la mano.
Revisaba mis redes sociales y las demás cosas.
Lo bloquee y me pare para ir a mi habitación.
Entre en ella y salí al balcón, donde se veía el London Eye.
Tome una foto panorámica y la puse en blanco y negro para subirla a Instagram, volví a bloquearlo y lo guarde.
Me acosté en mi cama mientras veía el techo que estaba pintado de rosa.
Y en un momento mis ojos vieron todo negro.
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-Vamos cariño ya tenemos que estar en el aeropuerto- dijo mi mamá.
-Voy mama- le dije bajando las maletas- Bye papi, te amo- le si un beso en la cabeza.
-Bye cariño, seguro que quieres quedarte sólo?- le dijo.
-Claro, tienen que salir a divertirse, no se arruinarán las vacaciones por mi culpa- dijo mi papa con su bastón en la mano y sentado en el sillón.
-Esta bien, te amo- mi mama le dio un beso.
Salimos de la casa y subimos a la camioneta negra.
Me quede mirando a la ventana donde se veían los carros pasar.
Eran las 10:21 a.m.
-Cariño ya llegamos- dijo mi mama.
-Salí de la camioneta y caminamos asta el Jet privado que nos esperaba.
Me senté en un sillón que estaba al lado de la ventana y mire como el jet se elevaba.
En un momento ya estábamos volando por el cielo de Londres directamente a los cielos de Italia.
Mi madre me hablo avisándome que ya habíamos llegado.
Salí del jet y respire el aire de Italia.
-Oh Roma- dije exclamando.
Caminamos asta adentro del aeropuerto y volvimos a subir en una camioneta.
Llegamos a un Hotel, bajamos con dificultad ya que los paparazzis era imposible.
Cuando logramos entrar al hotel mi madre camino para pedir nuestras habitaciones.
Me senté en los sillones del living y espere a mama con mi niñera.
-Cariño- me hablo.
Caminamos asta la habitación presidencial que era la de nosotros.
Mi madre abrió la puerta con la tarjeta y el portero nos ayudo a meter las maletas.
En la habitación había una gran ventana que daba la vista hacia afuera y se podía ver la mitad de Roma.
Salí al balcón y mire la vista que por cierto estaba preciosa.
-Y bien, te gusta Sky?- dijo.
-Me encanta, es demasiado lindo- le dije.
-Bien cariño, deja voy a arreglarme y saldremos a comer- dijo caminando a la otra habitación que estaba pegada a la mía.
Me senté en la cama y comencé a revisar mi Twitter e Instagram.
Camine de nuevo al balcón y tome una foto panorámica.
La subí a Instagam con el título "Lindo paisaje el de Italia" y la subí.
Lo bloque y mi madre ya había salido cambiada.
-lista- dijo agarrando su bolso.
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-Esto sabe delicioso- dije comiendo.
-Mi madre me vio y me sonrió- Y bien, que quieres hacer después?- dijo.
Ya habíamos ido a muchos lados, ya estaba cansada aún que íbamos en una camioneta.
-No lo se, tal vez a la playa sólo que tengo que comprar un bikini.
-Esta bien, iremos a comprarte uno y después a la playa.
Terminamos de comer y la camioneta partió a una tienda.
-Y este?- dijo mi mama enseñándomelo.
-No, no me gusta lo de arriba- dije haciéndole una mueca.
-Y este?- volvió a enseñarme otro.
-Es precioso, me encanta- lo agarre y camine viendo ropa para ponerme arriba.
Agarre una camisa negra de tirantes y un short de mesclilla con unos guaraches negros con calaveras.
Lo pague y volvimos a la camioneta.
Llegamos a la playa, había mucha gente pero no tanto como para que te incomodarán.
Camine a un vestidor que estaba puesto a unos metros y me metí a uno.
Primero me puse el traje y después guarde la demás ropa en mi bolso y camine afuera.
Me senté al lado de mi mama y me puse los lentes de sol.
Me acosté y me puse mis audífonos.
Sonaba la canción de Rita Ora "I Will Never Let You Dawn"
Movía mi cabeza al ritmo.
Alguien me novio de un lado adentro haciendo que abriera los ojos y me quitara el audífono.
-Mande mama?- le pregunte.
-no quieres ir al mar?- me dijo.
-Si, en un momento sólo deja que se acabe esta canción- me volví a poner el audífono.
Cuando acabó la canción me quite los audífonos y guarde mi iPhone en mi bolsa.
Camine al mar y me metí en el.
Se sentía bien, el agua estaba fresca.
-Mama- le grite.
-Mande- me devolvió el grito.
-Ven- le dije haciéndole una seña con la mano.
-No cariño, ahorita.
-Camine a ella- Hay vamos mama son vacaciones hay que divertirnos.
-Esta bien- se paró y camino conmigo asta el mar.
Se metió sintiendo el agua en cada paso que daba.
-Esta rica- dijo.
Me sentía libre y bien, sentía el agua en mis manos y el aire.
