Una vez en la clase de Biología uno de sus compañeros le dijo que lo de inteligente lo tenía de fea y solo porque ésta fue nuevamente elogiada por la maestra tras entregar un trabajo. Cosa que provocó que Anelle se sintiera terrible ya que el compañero lo gritó delante de toda la clase donde habían más de 35 estudiantes. Todos los ojos caían sobre ella, algunos se reían otros se quedaban a sombrados y murmuraban entre sí. Anelle se sintió tan mal que no pudo con la vergüenza y se fue corriendo del salón y se dirigió al baño donde comenzó a llorar sin parar. Se puede decir que comenzó llorando por una cosa y terminó llorando por 10 más. Afortunadamente sonó el timbre, se secó las lágrimas y se fue a su casa. Justamente esa noche tocaba ir a al iglesia, pero no tenía ni las mínimas ganas de ir. Aún así hizo el esfuerzo y fue. Lo que no sabía es que ese día cambiará su vida para siempre. Comenzó el culto y todos alababan a Dios, se sentía la presencia del señor esa noche como nunca. Una anciana tuvo en su corazón acercársele y decirle que no estaba sola, que había alguien que la protegía desde los cielos, que velaba por ella y que veía como buscaba de él. Le comentó que nunca se rindiera, que aveces era necesario pasar por diversas pruebas para ver la gloria de Dios y que si se sacrificaba por el Señor tendría una gran recompensa. Cierto es que esas palabras quedaron grabadas en la mete y el corazón de Anelle provocando que sintiera el deseo de arrodillarse ahí mismo y pedirle al señor que la ayudar a lidear con todos sus problemas. Que le diera valor para enfrentar a sus compañeros entre otras cosas más. Al otro día cuando él mismo compañero de la otra vez, le dijo que ella solo servía para lamberle el ojo a los maestros y ella le contestó:
"Tal vez tengas razón, pero yo no pienso igual a ti. Yo creo que tú eres bueno dentro de todo, que sirves para muchas cosas como estudiar, salir adelante, superarte, cumplir todas tus metas, ayudar a los demás y confiar en ti mismo. Tú realmente sirves para muchas cosas y es bueno que nunca lo olvides." dijo Anelle para la sorpresa de todos quienes se quedaron boquiabiertos con su respuesta porque ella casi nunca hablaba. Su compañero trató de contestarle, pero le resultó imposible. Pasó el tiempo y no volvió a molestarla, pero otros aún lo hacían. Cuando decían que era fea ella les decía que la belleza era relativa y que respetaba las distintas opiniones, pero que ella sabía que era valiosa e importante porque fue creada por Dios, tenía un propósito y por tal razón era única y especial. Cuando hablaba sobre Dios a veces no le prestaban atención o la ignoraban, pero ayudó a mucho jóvenes a acercarse a Dios. Cada vez que ella se miraba al espejo veía algo más que físico, veía una joven hermosa, sencilla, humilde y que necesitaba ser pulida por el señor y fue ahí cuando ella comenzó a florecer, cuando se convirtió en un árbol que cada día reverdecía más y se llenaba de belleza. Comenzó a verse a sí misma como Dios la miraba. Cambio tanto y tanto que los demás le decían que tenía algo diferente. Esa soledad y vacío que sentía poco a poco fue cerrándose por completo. Respecto a su "amigo" Simón, siguió con su grupo en donde tenía que hacer sentir mal a los demás para poder sentirse mejor con ellos mismos. Anelle cada vez que podía le hablaba sobre Jesús al igual que a Laura y a sus demás compañeros. Ella relata que comenzó a crecer como persona cuando dejó que el Señor entrara en su vida y cumpliera el propósito que tenía con ella. Nunca fue la misma, su timidez se fue y logró atraer a muchas personas a los caminos de Cristo. Anelle se sintió mejor cuando le abrió la puerta de su corazón a Dios y así fue como su vida cambió.Gracias por leer
Autora:Darielys Cortés
Imagen de portada: Google
ESTÁS LEYENDO
Cuando decidí crecer
EspiritualCuando eres adolescente la vida suele ser muy complicada y más aún si te refugias en la tristeza y soledad. Este libro busca inspirar a cada lector con el propósito de quererse, amarse y cuidarse a sí mismo. Cuenta con el personaje de "Anelle" una...