Tentaciones

13 2 0
                                    

Rápido y fácil. Así es como me gustan las cosas, y hoy estoy dispuesta a follar con alguien que me la ponga fácil y se quite la ropa rápido.

Entro en la discoteca con paso firme, pues no desconfio de ninguna de mis cualidades. Capto la atención de algunos chicos, pero ninguno llama mi atención lo suficiente. Me siento en la barra y no pasa demasiado tiempo para que se acerquen varios hombres, me invitan tragos mientras tenemos una conversación bastante entretenida. Después de tomar algunos tragos y tener el libido aún más por los cielos, voy al baño antes de acostarme con alguien que no me convenza, el alcohol y yo no somos buenos amigos.

Cuando en el fondo del bar en zona V. I. P cliché, veo a un chico fascinante de ojos esmeralda con algunas chicas a su alrededor.

Es el a quién quiero.

Me acerco con lentitud, observándolo con descaro, apoyo mis tacones más firmes en el suelo haciéndolos sonar, para que me note. Parece que esta demasiado entretenido porque aún cuando estoy muy cerca no me presta atención, lo que me irrita.

Ay la vanidad

Bloqueo su vista parandome enfrente suyo. El deja de hablar para mirarme, sonríe...cortésmente o para ser más precisos falsamente y continua hablando con la chica. Carraspeo mi gargante indignada para llamar su atención, y el vuelve a mirarme.

-¿Eh? ¿Quieres algo?-inquirió en un tono molesto que supone ser educado.

¡ay dios!

-Por el momento, quiero que me folles, si no es mucha molestia-

Lo pienso y no lo digo, me quedo como una tarada observándolo y estoy segura que tengo la boca abierta, solo me falta la saliva corriendo por mi barbilla. mientras, sus compañeras se ríen.
El carraapea y medio reacciono.

Maldito alcohol.

- Eh ¡sí! Tu y yo íbamos a ¡no! vamos, a bueno, ya sabes, eso...es un favor ¿o petición? Osea, sexo. Tú y yo vamos a tener sexo... Eh claro si tu quieres... - alargó la última letra de manera exagerada y misteriosa.

Estoy tan borracha que en mi mente me estoy riendo a carcajadas.

Hay un silencio incomodo de unos segundos que a mi parecer duran una eternidad. El chico del cual todavía no se su nombre me regala una hermosa sonrisa ladeada que me deja encantada. Me mira algo sorprendido y todos los presentes tiene esa expresión que tanto me divierte.

-Si no te molesta podría ser ahora, ya va ser más de media noche y está cenicienta necesita volver a su carruaje- comentó divertida.

Resuena una carcajada de el que me derrite la entrepierna, se acomoda en su asiento para hablarme.

- Dejame ver si entendí, quieres que tengamos sexo, o bueno, me lo estás sugiriendo de manera extraña

- sí eres un chico listo, listo y atractivo, es que vine aquí por eso- empiezo a hablar apresuradamente- y tome unos tragos, unos hombres estaban ahí, me dio calor, iba al baño, todavía necesito ir, te vi, me gustaste y ahora quiero que me folles en la parte trasera de mi auto si no es mucho pedir... Ademas la vida es una sola, no te lo pierdas-risitas tontas salen de mi y creo que ese vokc no era solo vokca.

-debe estar loca -murmura-la vida solo es una ¿cierto?

-hasta donde tengo entendido chico sexy...

-Me llamo Máx, pero chico sexy no me disgusta -

-Yo soy Aubrey, pero el amor de mi vida seria un gran apodo-bromeó con el.

Feagmentos de escrituraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora