Convicción o moral.

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Se acercó una mujer y me pregunto si no había problema en que le hiciera un trabajo ya que muchas personas aún sus compañeros y compañeras de trabajo si bien le hablaban y la trataban como "igual" a la hora de un favor personal se hacían a un lado. La razón, es lesbiana, cuando me dijo esto de inmediato vinieron muchos recuerdos a mi cabeza. Es increíble que en estos momentos exista tanta discriminación y lo peor es que se apele a la moral, como expertos en el tema rigiéndonos a lo aprendido de lo bueno y malo desde nuestra infancia en cuanto a educación y comportamiento.

Creo que mucho de esta disciplina se transmite no solo por generaciones, cuando hablamos del bien y el mal no puedo dejar de lado las enseñanzas bíblicas recibidas, pero ahí se inicia el debate de que realmente es bueno y que malo, si se analiza un poco las diferentes creencias religiosas entre ellas mismas hay infinidad de diferencias, lo que para algunas es bueno para otras es malo y es precisamente ahí donde creo que entra la convicción, porque esas enseñanzas sin importar la secta, religión, denominación o el nombre que le queramos poner nos vuelven personas muy discriminantes con una doble moral.

Según la Biblia nos dice parafraseando que el pecado se debe aborrecer pero se debe amar al pecador, según la misma Biblia todos somos pecadores y no hay legitimidad en cuanto a la escala de gravedad de los pecados ante Dios es lo mismo solo el hecho de pensar ya es un deseo del corazón, por ejemplo desear a la mujer de tu prójimo, solo pensarlo es como hacerlo, además quienes somos nosotros que en muchas ocasiones nos embestimos del atuendo de juez y sin dar oportunidad dictamos sentencia y de inmediato nos cambiamos a la embestidura del verdugo para ejecutar la sentencia, y sin el más mínimo temor cortamos la cabeza, a cuantas personas hemos matado emocionalmente y ni cuenta nos damos, solo le dimos una lección, ahí está la doble moral, le exijo a otros lo que yo no hago o no conozco.

En mi infancia mi madre nos llevó a la iglesia evangélica, creo que algunos problemas la llevaron a buscar la solución en este lugar, a lo largo de mi vida me quede en algunos momento me fui pero algo me hacía regresar, la relación con Dios es personal sin importar la iglesia a la que se asista, pero de verdad adquirí muchas cosas en las que tengo una gran convicción, soy humana de carne y hueso y tengo infinidad de defectos por lo que nadie es mayor o menor que yo.

Un caso particular de muchos fue el que pase en una iglesia, por varios años fui líder y la verdad sin importar en que me gusta servir, ya es algo que estaba en mí pero con el tiempo se desarrolló y creció; en las iglesias evangélicas para las personas esto es algo muy "importante "que los que llegan se den cuenta que eres un líder es lo máximo, algunos lo asocian con madurez espiritual, son la crema y nata de la congregación, en mi experiencia unos que lo disfrutan mucho son los que están en las puertas recibiendo a los demás, lo curioso es que al menos yo que estuve muchas veces en la puerta no solo era estar ahí, eran los primeros que debían llegar, se debían revisar y en caso de, ordenar las sillas, hacer un poco de limpieza y al finalizar el servicio después de despedirse de los que atraviesan esa puertas se debía limpiar, ordenar y cerrar, lo único que muchos hacían era solo estar en la puerta, las demás funciones se las dejaban a otros o no se hacían, al final muchas veces había que ver quien cerraba la iglesia, para mí nunca fue un problema hacerlo aun cuando no me correspondía, por cosas de la vida deje de asistir, lo curioso es que ni a mi superior inmediato le intereso, me topaba con algunos líderes y me volvían la cara y recuerdo que una vez fui, me toco esperar un poco y adivinen, los de la puerta se fueron y dejaron abierto, me puse a cerrar, en eso salió el pastor, se subió a su vehículo con su familia y otros líderes y m grito "arrepiéntase y libérese de esos demonios" seguí en lo que estaba y me admiro de momento que no me prohibiera seguir cerrando la iglesia si estaba tan llena de demonios, se fueron yo termine y me fui.

Entendí que el problema no son las iglesias, la enseñanza puede serlo si no escudriñamos la Biblia, si no dudamos un poco, si nuestra convicción depende de otras personas, tampoco el problema son las personas a pesar que creamos lo contrario, todos somos diferentes y actuamos según creemos, el problema está en que dejemos que las personas nos afecten, en creer sin dar beneficio a la duda, en creernos superiores a los demás, en volvernos religiosos y fanáticos ciegos guiando a ciegos, el creer que un pastor es sobrenatural y lo pongamos en un pedestal, es tan humano como cualquiera, se equivoca como cualquiera, habla de más como cualquiera, pero si merece respeto de eso no hay duda, debemos dejar de creernos dignos de emitir juicios y con mucho más razón de juzgar a las personas por sus elecciones, porque si de algo no tengo duda es que un día debemos de dar cuenta de todo lo bueno y malo que hayamos hecho y no de acuerdo a nuestros parámetros, porque como humanos herramos en todo.

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⏰ Última actualización: Dec 01, 2018 ⏰

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