Daryl Dixon 1/3
P.O.V t/n
Tengo sed...
Mucha sed.
He caminado por mucho tiempo desde que dejé, más bien mi "grupo" a quien consideraba cómo mi familia, me dejó.
Les resumo: con mi familia antes que empezara toda esta mierda, vivíamos en una granja, alejados del mundo, viviendo de lo que nuestras tierras nos daban, hasta que un día los muertos empezaron a revivir, y todo se pudrió, luego de mucho tiempo llegó un grupo a nuestra casa a los cuales les dimos refugio y se volvieron nuestra familia, luego tuvimos unos incidentes por los cuales tuvimos que dejar nuestro hogar, llegamos a una prisión y estuvimos unos meses cuando creíamos que todo iba bien, todo se vino abajo, justo unos días antes me enfermé gravemente y estaba débil en día en que ocurrió, y mi gran familia me dejó ahí, tirada sin saber si iba a vivir o sin aunque sea tratar de ver si podía seguir con ellos, finalmente cuando todos se habían ido, quedé sola sin mis hermanas, mi padre y sin el...
El que yo creia que nunca me iba a dejar, que siempre iba a estar para mi, solo se fue...
Y así fue como termine aquí,han pasado años y yo solo he seguido caminando sin parar,no se donde me dirijo, solo se que tengo que escapar de esos hombre que me hicieron daño, me están buscando y si me encuentran no se si seguiré con vida.
Seguí corriendo hasta que sentí algo impactar contra mi estómago, era una bala, traté de seguir avanzando pero me fue imposible, sentí que mis piernas dejaban de resistir y caí, esperando mí fin, cuando a lo lejos sentí unos pasos y alguien llamando.
-¿¡estás bien!?- preguntó esa voz.
Al ver que no respondía, me tono en sus brazos.
Luego de eso mis ojos se cerraron y no escuché nada más.
2 días después...
Abri mis ojos de golpe, sentía un dolor en mi estómago, no sabía dónde estaba hasta que escuché esa voz de nuevo.
-¡Hasta que despertaste!- me dirijio la mirada para luego darme una pastilla.
La tomé con desconfianza.
El salió de la habitación y busqué con desesperación mi pequeña navaja que estaba escondida en el collar que colgaba de mi cuello.
Había sido un regalo de una persona que yo consideraba alguien importante para mí...
Era pequeña, pero poderosa.
El entró y cuando se iba a acercar a mi, lo empujé poniéndolo encima de la cama en la cual me encontraba antes, me subí encima de él para luego ponerle la navaja en su cuello y gritandole dije:
-¿¡Quién eres!?¿¡Dónde estoy!? ¿¡Hace cuánto tiempo estoy aquí?-
Su mirada no era asustada, estaba neutra.
-¡Te hice una pregunta! ¡respóndeme!- dije gritando y enterrando la navaja un poco más en su cuello.
Tendrás que hablar Maggie- respondió tranquilamente.
Los recuerdos vinieron nuevamente a mí, ¿puede que sea la misma Maggie? ¿Puede que sea Maggie mi gran hermana? Tendre que averiguarlo.
-Llévame con ella- respondí quitándole la navaja de encima y guardandola nuevamente.
-Por cierto, me llamo Zahid, estamos en Hilltop y llevas 2 días aquí- respondió abriendo la puerta de donde yo supuse que era la enfermería del lugar.
Salí y seguí a Zahid hacia donde él decía que era la oficina de Maggie.
Llegamos y Zahid tocó la puerta, a los pocos segundos se escuchó su voz, así es la voz de mi hermana mayor tan solo por 1 año, al entrar mi cara cambió completamente, ya no mostraba una pizca de temor hacia el lugar, sino más bien era una mezcla de ira y dolor.
-Hola cariño- me dijo Maggie, mientras corría hacia mi para darme un abrazo, al cual no le correspondí, logré esquivarlo y lo único que pude decirle fue:
-Hola Maggie, ¿dónde están mis cosas?, me voy lo más antes posible para no molestar más- mi mirada era fría, solo quería salir de ahí.
-Pe-pero t/n, ¿que pasa?, te extrañé tanto y me dices eso.- vi una lágrima correr por su mejilla, la cual se la secó rápidamente.
No siempre fui así, antes del apocalipsis yo era una persona con sentimientos, que se preocupaba por los demás, pero luego de lo ocurrido me volví más fuerte, indiferente e incluso me volví una insensible de mierda.
En ese momento, los recuerdos de cómo había sufrido por personas que según ellos eran mí "familia" me dejaron abandonada y por fin liberé toda esa rabia que tenía contenida desde aquel día.
-¿¡Que me pasa!?¿¡En serio quieres saber por qué reacciono de esa forma!? ¿¡o a caso no te acuerdas como me dejaste tu y nuestra "familia" en la prisión para que me comieran los caminantes!?- dije, mientras la miraba a los ojos, con impotencia.
-N-no fue mi intención, pensé que habías muerto, por eso no te busqué, luego de perder a papá, yo solo seguí buscando a Glenn.- tenia la mirada fija en mi, como si no pudiera creer que fuera yo la que le decía esas palabras tan hirientes.
-¿Sabes quién fue la que tuvo que darle piedad a papá, cuando su cabeza estaba convertida en caminante?¿sabes quien fue quien le cavó una tumba para que no quedara ahí tirado como los demás?, si así es, fui yo estaba débil, por su muerte, por qué me habían dejado ahí.- ya me había calmado pero aún la seguía mirando con rabia.
-T/n l-lo siento mucho, no sabía...
Siento que hayas tenido que pasar por todo eso tu sola... pero ahora estás aquí, podemos reconciliarnos por favor...- ahora estaba de pie sentada encima de su escritorio.
Maggie... solo necesito mis cosas me iré en seguida...- le dije mientras caminaba hacia la puerta.
-T/n no puedes irte por ahora, tu herida aún no sana completamente, por favor quédate solo 1 día más, es lo único que pido...- me dijo acercándose a mi.
Dude por un segundo, pero acepte, ya que si salía así probablemente, mi herida se abriría y moriría desangrada.
Senti como una mujer llamaba a la puerta.
-Pase- grito Maggie.
Vi a una mujer pasar con un bebé en brazos, se parecía mucho a Glenn
-T/n te presento a Hershel, mi hijo.-fijo Maggie.
Mire a maggie se veía feliz, me alegré por ella, por fin pudo conseguir lo que soñaba desde pequeña, tener una familia, me pregunto como se sentirá Glenn, al tener un bebé tan hermoso.
Salude a Hershel con mi mano.
-Maggie, llegaron de alexandria, quieren hablar contigo.- dice la mujer para luego irse.
Maggie dirije su mirada hacia mí.
Maggie me voy a ir a la enfermería a buscar mis cosas, así puedes hablar tranquila con ellos.- dije abriendo la puerta.
-¡No! T/n ¡espera! Necesito que te quedes.-dice Maggie.
La miré extrañada.
-Ya verás, solo espera.- sigo sentándome en una silla la cual tenía vista a todo Hilltop.
Pasados unos minutos cuando se abre la puerta y me sorprendo a quienes veo ahí, estaban Rick, Carl, Michonne, Carol, algunos otras personas que no conocían, y estaba el Ahí, mirándome fijamente, de pies a cabeza, sin poder creerlo.
-¿T/n?- Dice Rick sosorprendido, tenía barba, estaba más viejo.
-La mismísima, permiso voy a salir para que hablen con Maggie.-digo mirándolos con impotencia y al mismo tiempo tristeza.
Salgo de la habitación y a lo lejos escucho como Rick y Maggie me llaman, pero no tomo en cuenta solo sigo caminando hasta llegar a la enfermería para buscar mis cosas.
Necesitaba un momento para procesar todo lo ocurrido.
Hasta que sentí que alguien corría detrás mío, no me importó quien fuera yo solo lo ignoré, seguí hasta enfermería y entre para sacar mis cosas, hasta que sentí su voz...
Esa voz que tanto extrañaba pero al mismo tiempo la odiaba.
-¿T/n?- me dijo, en su voz se mostraba tristeza.
-Hola, Dixon.- respondí con desinterés, y dándome vuelta para mirarlo fijamente a los ojos.
