Emma Salvatore-Mikaelson

Estaca en el corazón

Declan llevaba toda la tarde en el despacho con mi padre, ambos hablando de mi supuesto compromiso. Decidí tomar un poco de aire, no me gustaba nada que tardarán tanto....eso solo significa una cosa. Decidí aceptar a Declan porque no quiero alejarme de mis hermanos, y a él lo conozco un poco, no tendría temor a que mi futuro esposo llegara a ser como mi padre.

Ya oscureció, pero el camino sigue despejado. Seguramente sufriré un castigo por estar tan tarde afuera pero es lo último de mis preocupaciones, veo un carruaje estacionado en medio de la calle.

Me acerco y logro ver que no están ni el conductor ni el pasajero, escucho risas provenientes no muy lejos en algunos árboles, me escabullo con delicadeza a uno de esos árboles cuando observo lo que hay atrás reprimo un grito.

Damon tiene sangre en el cuello, pero también en los labios y las risas son provenientes de Katherine.

Katherine: tienes que comenzar a practicar si quieres ser igual que yo- su rostro cambia, sus dientes se vuelven colmillos, cubro mi boca para evitar que salga un sonido que me delate.

Tenía la esperanza de que Damon la alejara, o ver un rastro de emoción alguna que no fuero deseo y pasión.

Cuando él acerca sus labios al cuello de ella fue un alivio descubrir que no eran colmillos, ella se provocó un rasguño lo suficiente profundo para que sangrara un poco, y ver a mi hermano mayor beber de esa sangre fue la gota que colmó el vaso.

Emma: DAMON!- ambos se dieron cuenta de mi presencia, o bueno mi hermano se dio cuenta porque al parecer Katherine ya sabía que estaba observando.

Katherine: También hay para ti si quieres- sonríe.

Damon: Emma- me tiende su mano- Hay que hablar- permanezco en mi lugar, veo temor en su rostro, ¿Temé que pueda pensar de él?- vamos- me arrastra lejos del lugar, dejo que me guie, estoy segura que no me hará ningún daño, pero por cómo me mira creo que cree que le tengo miedo.

Sin darme cuenta ya estamos en casa, el me guía escaleras arriba ambos entramos a mi habitación y cierra la puerta.

Emma: ¿Que paso Damon?- él suspira, se sienta en la silla del escritorio- y bien?-

Damon: Katherine y sus hermanos son vampiros- toma mi silencio como invitación a seguir- no le puedes mencionar nada de eso a padre, no le puedes decir de Katherine-

Emma: ¡¿tu temor es que delate a Katherine?!- grito, y yo creyendo que temía que pensara de él.

Damon: no será por mucho tiempo, yo me volveré igual que ella y nos iremos de este lugar- al escucharlo decir eso fue como una estaca en el corazón, lo que fue irónico.

Emma: ¡Es un maldito VAMPIRO!- grito

Damon: ¡Tu querido Declan también es uno!- grita en respuesta- ¡¿Ahora quieres casarte con un maldito vampiro?!

Emma: lo sabias todo este tiempo- limpio la lágrima que amenaza con delatar mi dolor- nunca lo mencionaste-

Damon: ¡Eres como Stefan! ¡Ambos quieren tener la aceptación de él! ¡Tú en especial!-agarra fuerte mi brazo- no vas a decir nada, es una orden-

Emma: ¡Suéltame! ¡Me estas lastimando!-grito, después de decir eso pareció como si mi brazo quemara, ahora su rostro esta pálido, trata de acercarse a mí pero yo retrocedo- ¡¿Cómo puedes creer que yo busco la aceptación de nuestro padre?! ¡Tú no eres nadie para darme ordenes!-

Damon: ¡Soy tu hermano mayor!

Emma: ¡Buena hora en la que decide hacer su papel de hermano mayor! Déjeme decirle que ha llegado 19 años tarde, solo una vez lo voy a decir- él me observa detenidamente- Si Stefan y tú se llegan a convertir en vampiros, tengan por seguro que su hermana- me señalo- está muerta y ustedes estarán muertos para mí, por haber preferido a la cualquiera de Katherine Pierce antes que a mí.- en ese momento llaman a la puerta, Damon se hace a un lado permitiendo que abra, en el pasillo se encuentra mi padre.

Giuseppe: Emma mañana mismo tu y yo viajaremos a que se lleve a cabo tu compromiso- abro la boca para objetar pero él me reprime con una mirada- Tu prometido no es el joven Declan tengo que aclararte- me aferro fuerte al marco de la puerta- mientras más rápido evitemos que comiencen a llenarte la cabeza con ideas mejor-

Emma: No- murmuro

Giuseppe: ¿Perdón?- gruñe

Damon: Esta emocionada por comenzar con su vida marital- sonríe.

-¡Emma!- escucho los gritos persiguiéndome – ¡Emma!- no miro atrás, lo único que quiero es huir, huir de ese terrible destino, si hubiera tenido el suficiente tiempo para planear mi escape hubiera sido preferible, pero en cuanto mi padre recalco que no me puedo negar y después de encerrarme en la habitación con llave no hubo otra cosa que viniera a mi mente, solo escapar por la ventana.

Cada segundo que pasa se vuelve más imposible escapar, los gritos siguen, el bosque es un lugar hermoso, me encanta estar en él, jamás desee tanto perderme en un bosque y jamás volver.

Mis hermanos, me duele el alma al recordarlos, ambos hechizados por los encantos de Katherine.

Vampiro....eso fue lo que dijo Damon, ella y sus hermanos eran vampiros. Al inicio no lo creí, era difícil, yo creo en lo que veo, hasta que lo vi.

Ella quiere que ambos sean vampiros, eso no lo puedo permitir, jamás pensé que llegaría a desear la muerte de una persona, siempre he estado tan equivocada.

Declan: Emma!- toma mi brazo, volteo a verlo, se ve agotado- Por favor- trato de liberar mi brazo pero él aumenta su fuerza en el agarre.

Emma: Sueltame!- exijo- no quiero que me toques!

Declan: Emma- suspira- sé que soy la última persona a la que deseas ver- toca mi mejilla- pero no puedo permitir que te manden con ese hombre- al notar mi rostro retira su mano de mi mejilla – él no es un buen hombre, créeme que mi hermana está haciendo de su infierno el tuyo, te llevare a un lugar seguro, luego me encargare que no le pase nada a tus hermanos, pero por favor- suplica- no quiero obligarte.